Western Digital, uno de los mayores fabricantes de discos duros del mundo, ha confirmado que ha sido víctima de un ataque de hackers que ha resultado en la pérdida de datos de algunos de sus clientes. 

La empresa ha emitido un comunicado en el que indica que los hackers habían conseguido acceso no autorizado a sus sistemas y habían robado información de los clientes, incluyendo nombres, direcciones de correo electrónico, números de teléfono y direcciones postales.

Según la empresa, el ataque se llevó a cabo en marzo de este año, aunque no se hizo público el dato acerca de la cantidad de información robada. Western Digital ha señalado que ha tomado medidas para reforzar la seguridad de sus sistemas y que ha notificado a las autoridades pertinentes y a los clientes afectados.

Han sido 10 TB la cantidad de datos que han sido sustraídos a Western Digital, entre los que se incluye información de la propia empresa. Para conseguir acceder a estos datos los atacantes habrían accedido a la base de datos de una tienda online, siendo este el punto clave de cómo habrían conseguido los datos.

Western Digital actualiza la situación del robo de datos

La empresa ha asegurado que los hackers no han obtenido acceso a información financiera de los clientes, ni a sus contraseñas ni a la información de las tarjetas de crédito. Sin embargo, Western Digital ha recomendado a los clientes que estén atentos a cualquier actividad inusual en sus cuentas y que cambien sus contraseñas como medida de precaución.

Este ataque se suma a la larga lista de incidentes de seguridad informática que han afectado a empresas de todo el mundo en los últimos años. Los hackers han demostrado ser capaces de infiltrarse en los sistemas de algunas de las empresas más grandes y sofisticadas del mundo, lo que ha llevado a muchas de ellas a invertir grandes cantidades de dinero en la mejora de sus medidas de seguridad.

Western Digital ha asegurado que está trabajando estrechamente con las autoridades y con expertos en seguridad informática para investigar el incidente y tomar medidas para prevenir futuros ataques. La empresa ha pedido disculpas a los clientes afectados y ha prometido tomar todas las medidas necesarias para proteger su información personal.

En definitiva, el ataque a Western Digital es un recordatorio más de la importancia de mantener la seguridad de los datos personales en la era digital. Los clientes deben tomar medidas para proteger su información personal y las empresas deben invertir en medidas de seguridad adecuadas para prevenir los ataques de los hackers.