Qualcomm acaba de estrenar los nuevos Snapdragon G1, G2 y G3. Estos tres nuevos procesadores están destinados a convertirse en los cerebros de las consolas portátiles que se lancen en los próximos años. Entre sus principales novedades se encuentra contar con una potencia capaz de hacer frente a los títulos de última generación y, por supuesto, al juego en la nube sin retrasos.

Snapdragon G1. Este es el primer procesador que conforma la familia Snapdragon G. Está formado por ocho núcleos junto con la GPU Adreno A11. Qualcomm indica que se trata de una CPU capaz de ofrecer una experiencia de juego sin retrasos, es compatible con Qualcomm Wi-Fi 5 y soporta un panel con resolución Full HD o 1.920 x 1.080 píxeles con una tasa de refresco de 60 Hz.

Snapdragon G2. El siguiente dentro de la familia. Entre sus principales novedades se encuentra contar con 5G gracias al Snapdragon X62 5G Modem-RF y la compatibilidad con Qualcomm FastConnect 6700 que dota al equipo que monte este procesador de Wi-Fi 6/6E. La GPU que acompaña al procesador es la Adreno A21, está un escalón por encima del anterior chip en términos de potencia y conectividad.

Snapdragon G3. La joya de la corona de Qualcomm. Este procesador es el más potente de toda la serie, además de contar con la mejor conectividad gracias a los módulos Razer Edge 5G que permite contar con 5G sub-6 y mmWave junto con Wi-Fi 7 HBS. La GPU que se integra es la Adreno A32 con hasta un 30% de mayor rendimiento que la generación anterior.

Nuevos procesadores Qualcomm Snapdragon G1, G2 y G3 destinados al gaming

Qualcomm no solo ha lanzado los nuevos Snapdragon G1, G2 y G3. También ha mostrado diferentes diseños de consolas portátiles que las empresas pueden utilizar como base para crear sus propios modelos. Esta medida la han tomado para permitir dar un empujón todavía mayor al desarrollo de consolas que permitan a los usuarios jugar en cualquier momento y lugar.

Todo está en manos de los fabricantes. El lanzamiento de la Nintendo Switch ha supuesto un cambio en el paradigma de las consolas portátiles y junto con la Steam Deck puede que hayan conseguido que los fabricantes vean un mercado en el que apostar. Ahora solo queda comprobar cómo serán los siguientes pasos que se den debido a que puede ser un punto de inflexión para el gaming.