Las 50 mejores series de Netflix que puedes ver
Netflix es una plataforma que cuenta con un bestial catálogo. Las producciones propias no paran de aumentar y, sobre todo en series y no tanto en películas, cuentan con un gran nivel.
Sin embargo, es cierto que hay una ''broma'' que se ha convertido en una máxima: si hay una serie que te apetece mucho ver en Netflix, o una película, seguramente no la vas a encontrar. Y es que, no es sencillo dar con una serie de calidad en Netflix entre tanta producción de menor (hasta límites insospechados) calidad.
Pero no os preocupéis, ya que aquí estamos nosotros para contaros cuáles son las 50 mejores de Netflix que podéis ver ahora mismo. Hay mucha calidad, y muchísimas temporadas, por lo que más vale que os pongáis cómodos para disfrutar de todo lo que tenéis por delante. Empezamos.
Sex Education
Una de las últimas series en llegar a Netflix, y de las mejores. Gillian Anderson, la ''Agente Especial Scully'' es una terapeuta sexual que aconseja a diversos jóvenes sobre cómo lidiar con el sexo. Tiene su toque de comedia, pero también de drama y, además, aborda de manera realista y muy inteligente las relaciones sexuales.
Es una de las series mejor valoradas de Netflix y, aunque son ocho capítulos de casi una hora de duración, se ve en un suspiro, ya que es capaz de enganchar como pocas.
Glow
Y otra que engancha que da gusto, y es una de las mejores series de Netflix, es Glow. Se trata de una serie que nos habla de 12 mujeres que intentan grabar una serie de lucha libre en Hollywood en los años 80.
Tiene su parte de comedia, pero también de drama y unas actuaciones espectaculares. Cada capítulo dura unos 20 minutos y, sin duda, es una de las mejores series de Netflix.
Hannibal
La serie se basa en El Dragón Rojo, el libro de Thomas Harris que luego tuvo dos secuelas y una precuela y nos cuenta la historia de Hannibal Lecter, un formado doctor y... caníbal.
Hannibal es un asesino que hace lo que le place en todo momento y que se ve envuelto, sin comerlo ni beberlo, en el huracán del FBI como psiquiatra de un agente especial, Will Graham. Graham es un virtuoso a la hora de empatizar con los criminales y ayudar a capturarlos, pero también es un demente que forma una gran pareja con el doctor Lecter.
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La serie nos habla de la relación entre ambos, así como en una serie de crímenes, a cada cual más violento, que Graham va resolviendo. La tensión es constante, así como la agudeza a la hora de dirigir al presentarnos al maníaco desde el primer momento y trasladar, gracias a una sublime atmósfera, la tensión en cada momento cuando un personaje querido queda a solas con Lecter.
Aunque hay momentos algo lentos, el ritmo de los capítulos se mantiene muy bien de principio a fin, y cada uno termina con un cliffhanger que nos deja con muchas ganas de más. Y bueno, qué decir de Mads Mikkelsen en el papel de Hannibal... Da la sensación de haber nacido para interpretar al psicópata.
Como recomendación, hay que verla en versión original.
Sense 8
Sense 8 es un serie de la que no se puede hablar, prácticamente, sin hacer spoiler. Dirigida por las hermanas Wachowski, creadoras de Matrix, se trata de una serie de altísimo presupuesto que narra la relación entre ocho personas que sienten lo que los demás del grupo experimentan.
A nivel de dirección, cuenta con unos valores de producción muy alto, una gran variedad de escenarios y países de grabación y dos temporadas a razón de 12 episodios de una hora. Debido al alto presupuesto, la serie se canceló, pero los fans consiguieron que las Wachowski y Netflix se reunieran para hacer un capítulo final de dos horas de duración que cerraba la trama a la perfección.
Es de las mejores series de Netflix, y aunque hay que tener bastante tiempo libre para ver los capítulos, vale mucho la pena.
Vikings
Vikings es una serie que se ha comparado innumerables veces con Juego de Tronos, pero lo cierto es que para unos es mucho mejor (y peor para otros). Nos habla de Ragnar Lodbrok, uno de los mayores héroes de la cultura nórdica que emprende una cruzada personal contra el conde de su región.
A medida que la serie fue ganando popularidad, el presupuesto aumentó y podemos observar una mejor calidad tanto de la grabación como de los escenarios, además de contar con más personajes y batallas más graduación.
Es una serie que engancha, y si tenéis planeado verla, id ya porque hay spoilers bastante gordos rondando por ahí.
Rick y Morty
Nos alejamos de series serias para empezar con una de las mejores series de dibujos de Netflix. Rick es un científico loco que, junto a su nieto Rick, vive espectaculares aventuras.
La serie traspasa constantemente la cuarta pared y, además, cuenta con un humor inteligente, pero también salvaje, ya que el personaje de Rick es bastante... cuestionable.
Es divertidísima, original y tan creativa que nos recuerda a Hora de aventuras o Gumball.
Modern Family
No necesita presentación a estas alturas debido a la popularidad de la serie, y a lo pesado de la publicidad en Neox, pero Modern Family es de las 50 mejores series de Netflix.
En la serie, seguimos la rutina de tres familias, aunque de rutina no tiene nada, ya que cada integrante de cada una de las familias cuenta con una personalidad arrolladora que termina provocando situaciones de lo más disparatadas (en muchos casos).
Aunque al principio parece algo histriónica, terminas cogiéndole cariño a los personajes, y como serie para tener de fondo no está nada mal.
Bojack Horseman
Esta, por el contrario, no puedes ponerla de fondo, ya que necesitas concentrarte en cada uno de los capítulos. Es una serie de la escuela de Archer, dibujos animados para adultos que no cae en una ristra de obscenidades.
Trata sobre un caballo antropomorfo que debe encontrar cómo encauzar su vida y, aunque los primeros episodios son algo complicados, ya que no enganchan demasiado, termina siendo de las mejores series de Netflix por la aguda sátira de la vida en Hollywood.
Cada capítulo tiene una duración de unos 20 minutos, y si queréis soltar alguna carcajada, pero también alucinar con momentos muy inteligentes, es vuestra serie.
Mad Men
Matthew Weiner, guionista de ciertos capítulos de las últimas temporadas de Los Soprano, se encumbró con Mad Men. No es como para considerarla una de las mejores series de la historia, pero sí es cierto que los episodios son vibrantes y están muy - pero que muy - bien escritos.
En la serie seguimos a Donald Draper, o Don Draper, un publicista de la Nueva York de los 60 que piensa que la ciudad es suya. Poco a poco va descubriendo que no es así, y más que por la trama, que no está nada mal, la serie destaca por cómo se tratan temas como el sexismo o el mundo de las drogas.
Mad Men es una de las mejores series de Netflix, y una de esas que os enganchará por cómo evolucionan, e involucionan, los personajes.
Narcos
Con elementos un poco ''de fantasía'', nos cuenta la vida de Pablo Escobar desde que no tiene nada hasta que consigue que su recuerdo siembre el pánico.
Es complicado que no lo sepáis a estas alturas, sobre todo con el revuelo que se formó en su momento debido a la supuesta verosimilitud y el enfoque de ''falso documental'' que tiene en algunas ocasiones, pero Narcos trata sobre el auge y caída de Pablo Escobar, así como sobre el Cartel de Cali.
Los agentes Peña (durante las primeras tres temporadas) y Murphy (primera y segunda) son los que van persiguiendo a Escobar y al cartel de los ''Señores de Cali'' y, claro está, como toda buena ficción se toma licencias respecto a los hechos reales.
Aunque hay algunos episodios en los que el nivel baja un poco, algo que a Netflix suele ocurrirle en sus producciones propias, os satisfará si os gustan las series policiacas y los thrillers.
Prison Break
Vale, la serie entera no es de las mejores series de la historia, pero lo cierto es que, la primera temporada de Prison Break es de las más adictivas que recordamos muchos.
La premisa es muy simple. Michael Schofield es un inteligente arquitecto que entra en la cárcel a propósito para rescatar a su hermano Lincoln.
Lo interesante es que Michael cuenta con el cuerpo lleno de tatuajes, la llave que les permitirá salir de la cárcel. La segunda temporada no está mal, pero la tercera y cuarta desvarían bastante.
Hijos de la Anarquía
Hijos de la Anarquía nos pone en la piel de ''Jax'' Teller, uno de los pilares de la banda de moteros SAMCO (Sons of Anarchy Motorcycle Club Redwood Original), de Charming, California.
Lejos de ser una pandilla de buenos amigotes, los miembros de SAMCRO controlan el tráfico de armas de la zona y ''protegen'' al pueblo del narcotráfico de los Nords, una banda neonazi. Aunque, bueno, realmente tienen sus más y sus menos con varias bandas criminales, cada una con sus intereses en la zona.
La acción y los momentos álgidos en el final de cada capítulo son una constante durante las siete temporadas que componen Sons of Anarchy y, además, estamos ante una serie que comparte universo con The Shield, un motivo más para ver ambas.
Las actuaciones no están nada mal, con un Ron Perlman que hace de... Ron Perlman y una espléndida Katey Sagal. La música, además, es una auténtica delicia.
Your Lie in April
You Lie in April es una tierna historia de amor que os conquistará, sobre todo si os gustan las buenas historias... y la música.
Un joven pianista había perdido el ''hambre'' de componer y la motivación, hasta que por su camino se cruza una talentosa y joven violinista. Es una historia sobre el amor, pero también sobre la superación. Y la propia animación es... una belleza.
The Clone Wars
No hay mucho que explicar. The Clone Wars es la serie de animación creada por ordenador que nos cuenta los acontecimientos entre la segunda y tercera películas numeradas de la saga de Lucas.
En la trama vemos detalles que no se explican e las películas, o que se mencionan de pasada, pero no vemos en las pelis de carne y hueso, así como personajes que son muy queridos por los fans.
Cuenta con 121 episodios y se ve muy fácil, ya que solo tienen unos 20 minutos de duración.
Weeds
Weeds es una de las mejores series de Netflix, 102 episodios de una media hora de duración que nos habla de Nancy Botwin y su desestructurada familia.
Tras la muerte de su marido, termina vendiendo marihuana en el barrio para poder subsistir, lo que da origen a situaciones muy divertidas. Hay varios personajes bastante trastornados, y lo ''peor'' es que consiguen sacarnos más de una sonrisa con su - bestia - humor negro.
Sabrina
Las escalofriantes aventuras de Sabrina es un remake de la serie homónima de los 90, aunque esta es bastante más adulta, por el contenido, que la anterior.
Trata sobre Sabrina, una joven medio bruja que mantiene una dualidad entre su vida con los mortales y los brujos.
Engancha, la fotografía es muy buena y los personajes están muy bien definidos.
Bates Motel
¿Queréis saber cómo era Norman Bates antes de ser... bueno, Norman Bates? Bates Motel es la precuela de Psicosis, la película de Alfred Hitchcock, y nos habla de Norma y Norman Bates, madre e hijo.
Los dos tienen una relación enfermiza que va evolucionando hasta... lo que ya sabréis (si habéis visto la peli claro).
Está muy bien grabada y las actuaciones son espectaculares, mención especial a Vera Farmiga y Freddie Highmore.
Agentes de SHIELD
Si queréis verla, tendréis que daros prisa, ya que puede que sea de las próximas series de Disney que Netflix fulmine.
Los amantes del universo cinematográfico de Marvel encontraréis una serie repleta de referencias a las películas, ya que se supone que SHIELD es la organización de inteligencia y defensa que se creó tras el primer ataque de Chitauri a la Tierra (tras Los Vengadores).
No hay superhéroes, pero sí acción y una serie de episodios, 110, muy entretenidos.
Muñeca Rusa
Muñeca Rusa es la primera gran serie de Netflix en 2019. No podemos contar nada de la trama, pero sí podemos decir que la protagonista, Nadia, está atrapada en el tiempo.
Muere cuando finaliza el día de su cumpleaños... y renace acto seguido sin ninguna secuela. Poco a poco va llegando más lejos en su investigación por intentar comprender qué le pasa.
Es una serie bien grabada, inteligente y muy entretenida.
Black Mirror
No podemos decir de qué va Black Mirror, ya que cada capítulo tiene un tema diferente, y aunque muchos parecen compartir episodio, lo cierto es que las historias son totalmente independientes.
¿De qué va Black Mirror? Casi todos los episodios nos hablan de los peligros de las nuevas tecnologías y de cómo nos atrapan para tomar el control.
Es cierto que hay episodios bastante mediocres, pero los buenos son muy buenos... y hay algunos que nos hacen pensar.
Aggretsuko
Simple, pero muy divertida. Cada episodio dura unos pocos minutos y nos habla de Retsuko, una panda roja de unos 25 años que trabaja en un aburrido puesto de contabilidad de una empresa.
Por el día contiene su ansiedad, pero por la noche se desmelena en el karaoke cantando death metal. Es una serie divertidísima ya que conocemos el carácter del personaje y nunca sabemos cuándo saltará.
Altered Carbon
Si os gusta la ciencia ficción, os encantará Altered Carbon. Se trata de una de las mejores series de Netflix, ya que nos habla de un futuro en el que no tenemos por qué morir.
Todos nuestros recuerdos e información están albergados en una ''pila'' que llevamos en la nuca. Hay muchísima acción, planos que están hechos ''para molar'' y unos personajes con carisma.
Además, la propia trama es interesante, y si os gusta la serie... os encantarán los libros.
Dark
Las series alemanas tienen mala fama, pero The Dark es una auténtica pasada si os gustan los sucesos extraños.
No podemos contar muy bien de qué va, ya que entraríamos en spoilers, pero sí podemos deciros que en un pequeño pueblo alemán, empiezan a pasar cosas raras, y parece que todo está relacionado con una central nuclear y un oscuro secreto que hay en el ''sótano''.
Puede que haya subtramas que sobren, pero está bastante bien hecha y, sobre todo, engancha. Es una de las mejores series de Netflix en estos momentos.
The OA
Y una que mantiene dividida la opinión de los espectadores es The OA. Se trata de ''la gran serie con Brad Pitt como productor, y lo cierto es que es interesante seguir la historia de Prairie Johnson, una joven ciega que es raptada y, tras siete años sin que nadie sepa de ella, aparece caminando tan tranquila, con la vista en perfectas condiciones y unas cicatrices en la espalda.
Poco a poco vamos conociendo a Prairie en una historia mágica para unos y tremendamente soporífera para otros. Como todo es cuestión de gustos, os animamos a verla.
Si me preguntáis, a mi me gustó bastante, aunque sí es cierto que da la sensación de que los guionistas fueron escribiendo cada capítulo sobre la marcha.
Lost in Space
Lost in space es una serie remake de la homónima de hace 50 años. La premisa no tiene mucho misterio: hay una serie de familias que son elegidas para colonizar nuevos planetas, y en el 2048, los Robinson (qué apropiado) son elegidos para colonizar un planeta en Alfa Centauri.
Sin embargo, no iba a ser tan sencillo, y tras un accidente, los Robinson se ven ''perdidos en el espacio'', lidiando con sus problemas personales y con lo que hay ahí fuera. No está nada mal y mantiene el interés hasta el final. Además, como las series de Netflix, es cortita (de 10 episodios), y no resulta muy densa.
Castlevania
Castlevania nos transporta a un medievo fantástico europeo. En Europa del Este, la oscuridad reina, y todo por culpa de... quién si no, Drácula. El conde vampiro campa a sus anchas, y solo el clan Belmont puede detenerlo. En esta historia conocemos a Trevor Belmont, un deslenguado joven que, armado con su látigo, no dejará títere con cabeza.
Son solo ocho capítulos de una animación bastante interesante y, por qué no decirlo, litros de sangre en pantalla. Y, si os gusta, ya tenéis la segunda temporada, también en Netflix.
The end of the Fucking World
Estamos ante una de las mejores series de Netflix, y una de esas que se ven muy fácil, ya que solo tiene 8 capítulos y cada unod ura unos 8 minutos.
The End of the Fucking World nos cuenta la historia de James, un joven que dice ser un psicópata, y Alyssa, una chica que odia a todo el mundo.
Los dos se conocen y empiezan a gustarse, y en ese punto, los dos inadaptados descubren que la vida sin padres no es tan sencilla como habrían querido.
Es una comedia con mucho humor negro, su pizca de drama y dos protagonistas que enamoran.
Casa de papel
Una serie española de atracar bancos que, todo hay que decirlo, no está nada mal. ''El Profesor'' es un experto ladrón de bancos que prepara un ambicioso plan para asaltar la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre.
El plan es robar 2.400 millones de euros, pero para ello necesita 11 días con rehenes. Sin embargo, controlar a los rehenes y mantener a raya a las fuerzas de seguridad no será nada comparado con el equipo de ''profesionales'' que ha contratado.
Es una serie que cuenta con dos temporadas y va a por una tercera, y no solo es una de las mejores series de Netflix, también es de las mejores series españolas recientes.
Por trece razones
Por Trece Razones es una de las series icónicas de Netflix. Es decir, es uno de los motivos para que la gente se apunte al servicio de vídeo en streaming.
Hanna Baker es una joven que decide suicidarse. Deja una serie de cintas para que los compañeros de instituto las escuchen y se vean reflejados en ellas, ya que todos podrían ser responsables de la muerte de la joven.
¿Por qué se suicidó Hanna Baker? Esa es la premisa de una serie que cuenta con una primera temporada muy bien llevada y una segunda que, aunque no es tan buena, sigue tocando temas bastante espinosos y, por desgracia, polémicos.
Stranger Things
Y otro de los ganchos a Netflix es Stranger Things. Es una de esas series que es odiada por muchos y amada por tantos, y como esto es algo subjetivo, entra en la lista de las 50 mejores series de Netflix.
La serie nos habla de una pandilla de jóvenes de los años 80 que juegan a rol y videojuegos hasta que descubren que hay algo más ahí fuera, más alucinante que los videojuegos, pero también más aterrador.
La primera temporada está realmente bien, y aunque la segunda es ''más de lo mismo'', si os gustó la primera, no os decepcionará.
Una serie de catastróficas desdichas
Neil Patrick Harris es el conde Olaf en esta adaptación de Una serie de catastróficas desdichas a la televisión.
Tres niños quedan huérfanos tras la desafortunada muerte de sus padres. Son llevados con su tío, o lo que sea, Olaf, un malvado ser que solo quiere robar la fortuna de los niños, y hará todo lo que esté en su mano para conseguirlo.
Tiene su lado macabro, y es una de las mejores series que podemos ver en Netflix.
Santa Clarita Diet
Una comedia de terror, según sus creadores. Santa Clarita Diet nos mete en la piel de Sheila Hammond y Joel Hammond, un matrimonio que ve cómo sus vidas cambian de la noche a la mañana.
No os vamos a decir por qué, aunque no sería spoiler, pero desde que pasa cierta cosa, la carne cruda parece atraer bastante a Sheila.
Es divertida, sus 20 capítulos se ven enseguida y es de lo mejor que podemos encontrar en Netflix.
Skins
Antes de crear The End of the Fucking World, vio la luz Skins, una serie con varias temporadas, con un elenco que cambia cada dos temporadas y que nos mete en los zapatos de una serie de jóvenes irreverentes que viven en Bristol.
Sexo, drogas, el instituto y el aprender a vivir como adultos son los temas de una serie salvaje en algunas ocasiones, dramática en otras y con una dosis de humor negro. Las dos primeras temporadas deberían ser obligatorias para todos los suscritos a Netflix.
Friends
Otra serie que no necesita presentación es Friends. Seis amigos viven en Nueva York y... buen, ¿de qué va Friends?
Sitcom muy amena que no intenta dejar ningún mensaje concreto y que consigue lo que quiere, divertirnos y ser como Los Simpsons, una serie que podemos ver mil veces sin cansarnos.
Están las 10 temporadas, y los capítulos se ven casi del tirón.
Daredevil
Vamos con un par de series de superhéroes... que no van a tener continuación, al menos de momento y en Netflix.
Daredevil está protagonizada por ''el abogado de la Cocina del infierno'', un ''mutante'' que se enfrenta a los crímenes de la ciudad de Nueva York.
Si habíais visto la película y descartado la serie, estabais en un error, ya que la serie es bastante, de largo, mejor que la serie.
Jessica Jones
Otra de las mejores series de Netflix, y que acaba de ser cancelada, es Jessica Jones. Jessica iba a ser una heroína, pero un accidente acaba con esa posibilidad y, entonces, decide abrir una agencia de detectives.
Al final, todos los casos que le encargan tienen que ver con personas con habilidades sobrehumanas, por lo que la heroína debe ''volver al trabajo''. Y sí, comparte universo con Daredevil.
Better Call Saul
La precuela de Breaking Bad, una serie que no llega a la excelencia de la mencionada, pero que no está nada mal. Vince Gilligan es el creador, y en esta serie seguimos los pasos de Saul Goodman, o James Morgan, como se llama aquí.
Si habéis visto Breaking Bad, ya sabéis qué podéis esperar de este polémico y cuestionable abogado, y si no... ya estáis tardando en verla.
Pokémon
¿Quién no se acuerda de Pokémon? La primera temporada del anime nos cuenta cómo Ash Ketchum pasa de ser un habitante más de Pueblo Paleta a un gran entrenador pokémon. Ahí conocemos a Pikachu, pero también a Brock, Misty, el Team Rocket y, en definitiva, una serie de amigos y rivales que siempre estarán en el corazón de más de uno.
La animación es tan simpática ahora como hace 11 años, y la historia, si habéis crecido con estas criaturas, os cautivará. Hay acción, alguna que otra lagrimilla y, sobre todo, amor en cada trazo por Pokémon, la franquicia estrella, con permiso de Mario, de Nintendo.
Y, si os gusta la primera temporada de Pokémon, también tenéis Pokémon Sol y Luna en Netflix.
Orange is the new black
Otra comedia dramática cargada de humor negro y crítica social, en principio, aunque se aleja de eso poco a poco.
La serie nos mete en una cárcel de mujeres en la que conocemos personajes que no solo valen la pena, sino que resultan encantadores (dentro de que son reclusas) y enseguida les cogemos cariño.
La serie parece estar lejos de terminar, pero de momento podéis ver sus seis temporadas en la plataforma.
Sword art online
Inteligente, divertida y espectacular, además de una buena idea. Sword Art Online es un videojuego, un MMORPG en realidad virtual que los jugadores juegan con unos cascos especiales.
Todo va bien hasta que descubren que no pueden salir del juego y que, además, si mueren en él, mueren en la realidad. El objetivo de los jugadores es superar las cien fases del juego para poder salir.
Es espectacular y, además de uno de los mejores anime de Netflix, es una de las mejores series de la plataforma.
Homeland
Homeland lleva siete temporadas (las podéis ver en Netflix) y es una de las mejores series de Netflix. Sin ninguna duda. Además, si os gustan los thriller políticos, el espionaje y las tramas medianamente enredadas, la disfrutaréis.
En la serie seguimos a Carrie Mathison, una agente de la CIA que empieza a sospechar de un posible atentado en Estados Unidos perpetrado por un marine radicalizado. Así empieza un intenso drama político y policial que toma acontecimientos muy cercanos y dolorosos de la historia reciente como hilo conductor.
Es de esas series que dan la apariencia de ser una gran producción, con un reparto extenso y muy buen escogido que hace que estemos dentro de la serie en todo momento. Si os gustan las series policiacas, la disfrutaréis.
American Horror Story
American Horror Story es otra de esas series de las que no podemos hablar con rotundidad, ya que cada temporada va de una cosa.
Las dos primeras son muy, muy buenas y, aunque la temática, argumento y personajes son diferentes, los actores sí son, en su mayoría, los mismos, lo que resulta muy curioso.
Si os gustan los payasos, las casas encantadas, los centros psiquiátricos... es vuestra serie.
Hora de aventuras
Volvemos a los volvemos a los dibujos animados con una de las mejores series de Netflix, sin lugar a dudas. Hora de Aventuras nos cuentan las andanzas de Finn el humano y Jake el perro (que es de todo menos un perro), en el reino de Ooo.
Los dos héroes deben luchar contra el mal en todas sus formas a la vez que conocen amigos en todos los rincones, y dimensiones, del reino. Tiene su punto de humor negro y comedia, pero lo mejor es que resulta de lo más original.
¿Cómo se les ocurren esos diseños e historias?
Misfits es una serie bastante interesante que empezó a emitirse en MTV en España y que ya cuenta con cinco temporadas.
Es una serie británica, por lo que tiene ese aire ''sucio'' tan característico de las series británicas de poco presupuesto (en imagen y escenarios, claro está), como The End of the Fucking World y Skins.
Nos habla de un grupo de jóvenes inadaptados que consiguen superpoderes tras una tormenta. Es divertidísima, ya que lo que menos son estos jóvenes son superhéroes...
¡Ah! Y lo mejor es que, igual que Skins, tiene nuevos personajes cada temporada.
Death Note
Vamos a una auténtica leyenda del anime, y no por lo veterana que es, sino por la calidad de - casi toda - la misma. ¿A quién no se le ha pasado por la cabeza, alguna vez, que molaría tener una libreta que ''mata'' a la persona que lleva el nombre que apuntas? Vale, a lo mejor es algo muy bestia que no a todos se le ha pasado por la cabeza, pero esa es la premisa de este anime.
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Básicamente, un humano brillante, llamado Light Yagami, se encuentra un buen día una libreta, Death Note, que un Shinigami ha dejado caer a nuestro mundo. Pronto descubre que el nombre que apunta en esa libreta hace que la persona muera, y empieza utilizándolo para hacer el bien.
Cuenta con dos temporadas, siendo la primera de ellas absolutamente brillante. La segunda se ve casi por obligación, pero vale la pena, ya que es, sin duda, una de las mejores series anime que hay en Netflix.
Pesadillas
Pesadillas fue una serie de terror de finales de los 90 que cuenta diferentes historias ''terroríficas'' en cada episodio.
No da miedo, realmente, pero los más nostálgicos, los que la vierais en su día en Antena 3, os alegraréis al saber que la tenéis en Netflix. Al menos la primera temporada.
Star Trek, la original
Ha llovido mucho desde que se emitiera en 1966 el primer episodio de Star Trek, una serie que ha sido leyenda en la ciencia ficción y que, al igual que Star Wars, enamoró a millones de espectadores.
William Shatnet, Leonard McCoy y Leonard Nimoy siguen siendo nombres respetados en el mundillo de la ciencia ficción, y no es para menos, ya que en la serie consiguieron cautivarnos a muchos, a algunos en su día y, a otros, algo más recientemente.
¡Larga vida y prosperidad!
El cuerpo humano
Y, hablando de series míticas, ¿cómo no citar El cuerpo humano como una de las mejores series de Netflix?
Se trata de una serie francesa de dibujos animados en las que, en cada capítulo, se nos muestra cómo funcionan diferentes partes de nuestro organismo, siempre desde una perspectiva bastante divertida, lógica y original.
Tanto para jóvenes como para adultos, El cuerpo humano es una de esas series que es de lo más recomendable. Y sí, sigue siendo encantadora.
Fariña
Nos vamos acercando al final de esta lista de las mejores series de Netflix, y lo hacemos con dos series que valen muchísimo la pena.
Fariña es una serie muy polémica, y de las mejores de la plataforma, que nos pone en los zapatos de Sito Miñanco, un pescador que, por diferentes motivos, necesita empezar en el mundo del contrabando de tabaco.
Sin embargo, del tabaco pasan a sustancias bastante más duras, lo que desencadena que este Narcos a la española se vaya de las manos.
Breaking Bad
Llegamos al final de las mejores series de Netflix con Breaking Bad. Breaking Bad nos pone en la piel de Walter White, un profesor de química de secundaria que descubre que tiene cáncer. No puede pagar el tratamiento y, ala vez dejar una herencia para su familia.
Por eso, empieza a meterse en el oscuro mundo de las drogas, para lo que saca provecho de su conocimiento en química. Pronto se encontrará con Jesse Pinkman, un pringado drogadicto que sabe dónde vender la mercancía de White. Y el resto... es historia.
Cinco temporadas (la última con dos partes) trepidantes que no solo son interesante desde el punto de vista de la narrativa o la fotografía, sino por la evolución de los personajes interpretados por Bryan Cranston y Aaron Paul, dos actores que venían del mundo de la comedia y de los que no se sabía cómo iban a resultar. El cambio de ambos marcó a una generación de espectadores.
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Además, aunque la serie es bastante redonda, hasta la primera mitad de la última temporada, algo que consigue remontar de forma magistral, no todo es tan serio como parece.
Mención especial al capítulo de ''La mosca'', uno de los, posiblemente, mejores episodios que se hayan filmado en cualquier serie de televisión, tanto por el pulso narrativo como por la pausa que se produce en ese momento de la temporada.
Estas son las 50 mejores series de Netflix que podéis ver. Tenéis entretenimiento para rato.
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Descubre más sobre Alejandro Alcolea Huertos, autor/a de este artículo.
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