Los cargadores son una parte fundamente de cualquier teléfono móvil, y también uno de los accesorios de los mismos que más problemas más. ¿A quién no se le ha estropeado en alguna ocasión? El problema radica más bien aquellas veces que no es fácil detectar si realmente está dañado o no. 

Es bastante frecuente que un cargador no dé pistas de que no funciona correctamente de primeras, provocando que la batería del teléfono cargue más despacio sin darte cuenta, o incluso aumentando el riesgo de perjudicar la salud de tu dispositivo de diferentes formas. 

¿Quieres saber cómo puedes puedas si el cargador de tu móvil está dañado? Pues aquí te dejamos algunas sencillas formas de descubrirlo. 

Sobrecalentamiento mientras carga

Uno de los síntomas más evidentes de el cargador de tu móvil está dañado puede ser que este se caliente más de lo debido mientras el teléfono carga. Es cierto que muchos de estos accesorios tienden a coger algo de calor mientras realizan su función, pero si la temperatura sube demasiado, es mejor no correr ningún riego.

Ten siempre presente que un calor excesivo no solo afecta por lo general a la eficiencia de carga, sino que también puede dañar la batería de tu teléfono a largo plazo. Más vale ser precavido con ello. 

La carga se interrumpe

Algo similar sucede cuando la carga se interrumpe con frecuencia o funciona de forma interrumpida. Hay que recordar que las baterías de los teléfonos suelen ser uno de sus elementos más delicados y, en muchos casos, lo primero que se estropea de ello, con independencia de su modelo o marca.

Por eso, si observas que la carga no es tan fluida como debería, intenta probar otro cargador y, si la culpa es del que utilizabas originalmente, no corras riesgos y decide jubilarlo cuanto antes. 

No conecta adecuadamente

Cuando conectas tu cargador al teléfono, lo normal y correcto es sentir una resistencia adecuada que indique que se produce una conexión sólida, por así decirlo. Si la conexión parece suelta o deslizante, podría ser un indicio de que los contactos internos están desgastados o dañados. 

Una conexión fiable es crucial para garantizar una carga eficiente y evitar posibles daños a la batería de tu dispositivo.

Cables pelados o en malas condiciones

Es muy habitual que los cables de tu cargador se deterioren debido al uso. A veces esto llama la atención a simple vista, bien porque el cable se pele, esté excesivamente doblado o simplemente parezca roto. Pero en otras ocasiones no puede resultar tan evidente, pero es igualmente peligroso. 

Si notas que la carga del teléfono no funciona como debería, puede que realmente sea el cable el culpable, como sucede en una gran mayoría de casos.

La importancia de comprobar si el cargador de tu móvil está dañado no solo se reduce a una obvia cuestión práctica. Como hemos comentado puede poner en riesgo la salud de su batería, e incluso provocar peligros mayores, como incendios si saltan chispas o se calienta demasiado. No es habitual, pero en ocasiones sucede.