Conseguir una PS5 es como superar las 12 pruebas de Astérix, algo difícil, poco divertido pero con una meta que merecía la pena todo el esfuerzo pasado.

La consola de Sony, unas de las mejores creaciones de la compañía, salía al mercado en 2020 con dos cosas bajo el brazo: mucha expectación y buena prensa. De ahí el posterior drama.

Cuando las reservas se abrieron, los jugadores vieron que muchos se quedaban sin su preciada unidad. Algo lógico, acababan de poner las primeras unidades a la venta y siempre hay pocas. Ya se arreglaría con el tiempo, pensamos todos.

Pero no. Durante 10 meses hemos sufrido una falta de stock brutal, lo que derivaba en miles de personas buscando por activa y por pasiva como hacerse con una mientras otros miles de especuladores hacían lo propio para poder revenderla aun más cara.

Por fortuna, esto parece que ha llegado a su fin. O eso nos aseguran desde Sony, que a través de su director financiero (CFO) ha asegurado que han conseguidohacerse con los suficientes chips de AMD (el corazón que da vida a la consola) para terminar con normalidad la producción de este año.

Hiroki Totoki, el CFO, dijo durante la conferencia de resultados de Sony del miércoles, que la compañía tiene suficientes chips para alcanzar su objetivo de vender 14,8 millones de PS5 este año fiscal, o lo que es lo mismo, que tienen como objetivo fabricar casi 5 millones más de consolas en los próximos meses.

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Además de las buenas noticias, Totoki aseguró que la compañía continúa perdiendo dinero con cada venta, tanto con el modelo sin lector como con la normal (algo habitual en los primeros años de las consolas), pero que durante el 2022 Sony empezará a ganar dinero con cada PS5 con lector que venda.

El que es uno de los grandes dramas de este año parece haber llegado a su fin. Aún así, mientras no veamos las consolas apiladas en los centros comerciales como antaño lo mejor será guardar prudencia.