Aunque para nosotros iluminar nuestro hogar es algo tan sencillo como presionar un botón, muchas personas en el mundo no son tan afortunadas. Se calcula que hay alrededor de 1.600 millones de familias que no tienen electricidad en sus casas, y que por tanto tienen que recurrir a otras soluciones para ver por la noche, por ejemplo lámparas de queroseno.

Además del coste del combustible, estas alternativas tienen el inconveniente de que pueden ser bastante peligrosas, ya que pueden provocar incendios e intoxicaciones por el humo de la combustión.

Para llevar luz a todos los hogares que no disponen de corriente eléctrica, Andrea Sreshta y Anna Stork crearon una lámpara alimentada mediante energía solar en 2010 como respuesta al terremoto de Haití, cuando eran estudiantes de la Universidad de Columbia. Su idea tuvo una gran acogida, y para distribuir el producto fundaron LuminAID, una compañía que ha iluminado ya a más de 70 países. 

Desde su nacimiento, LuminAID no ha parado de efectuar innovaciones para expandir su tecnología, aplicando la iluminación ecológica y sostenible con energía solar a otras áreas, como el camping o las luces de emergencia. 

El producto estrella de LuminAID es una lámpara ecológica que funciona con energía solar. Se trata de un dispositivo cuadrado y ligero que tiene en su interior una luz LED alimentada por una batería solar recargable. Para funcionar lo único que hay que hacer es inflar la lámpara, y como es resistente al agua se puede usar en cualquier entorno. Hay distintos modelos con distintas potencias, y la versión de mayor rendimiento ofrece hasta 50 horas de luz con una carga de 10 horas. 

Sistema de energía solar portátil para iluminar África y Asia

En este tiempo la compañía ha seguido fiel a su vocación por llevar luz a los hogares más necesitados, por lo que colaboran en diversas acciones humanitarias. Por ejemplo, el año pasado Sreshta y Stork viajaron a Malawi para distribuir sus lámparas solares entre las víctimas de inundaciones.

Además, LuminAID colabora con diversas ONGs y en su página web tiene abierto un programa para comprar una lámpara y donar otra a los damnificados del huracán Matthew en Haití por 29,99 dólares.