Durante nueve días, un grupo de ingenieros de la compañía Delphi se lanzó a la aventura de realizar un viaje en un coche autónomo. Escogieron para ello las carreteras de los Estados Unidos y más concretamente el trayecto San Francisco - Nueva York. La tecnología de esta compañía fue presentada en el CES 2015. El viaje se inició el 22 de marzo.

El recorrido de un total de 5.400 kilómetros fue todo un desafío para un coche con "cerebro", lo suficientemente inteligente como para sortear todo tipo de obstáculos que se pongan en su camino, ya sean semáforos, montañas, carreteras en obras, atascos, etc. Nada parece haber sido demasiado complicado para él, aunque sí que ha tenido algunos momentos muy puntuales en que se ha visto un pelín "apurado".

Para la realización de esta prueba se ha utilizado un Audi SQ5, con la tecnología de Delphi Automotive integrada, que es la que permite que se realice la conducción de manera autónoma. El coche integraba, además, otra serie de tecnologías que jugaban un papel fundamental para que el trayecto recorrido de manera autónoma por este coche que se conduce solo acabase siendo un éxito: sistemas de detección de tráfico, asistente de cambio de carril, radar o un sistema de cámaras muy completo.

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El Audi SQ5 fue capaz de recorrer el 99 % del trayecto de manera autónoma. ¿Qué ocurrió con ese 1 % restante? Bien, al parecer hubo algunas situaciones que no supo manejar del todo bien, como el paso por algunas zonas de obras, en las que tuvo que intervenir el equipo humano de Delphi. Por lo demás, nada destacable, más que un cómodo viaje en que uno puede dejarse llevar y olvidarse, casi por completo, de pisar el acelerador, freno y embrague, o de cambiar de marcha.

Os dejamos con un vídeo del noveno y último día de viaje de los chicos de Delphi a bordo del Audi (en la fuente original podéis ver un vídeo por cada día de viaje):

El objetivo de este trayecto de prueba era recopilar la suficiente información como para poder seguir mejorando el sistema, y lo han conseguido, ya que han recopilado 3 terabytes con información del viaje.

Parece que los coches sin conductor están mucho más cerca que nunca, ¡ya casi los tocamos con nuestros dedos! Y puede que Delphi juegue aquí un papel importante.

[Fuente: Delphi]