Los científicos llevan años investigando los efectos de la restricción calórica en la longevidad, y diversos estudios han demostrado que reducir el consumo de calorías detiene el envejecimiento biológico en distintas especies. Ahora, un ensayo en humanos que ha llevado a cabo el Centro de Investigación Biomédica Pennington en Luisiana (Estados Unidos) sugiere que, además de disminuir el envejecimiento, la restricción de energía también protege de las enfermedades relacionadas con la edad, como el alzhéimer, el párkinson, la diabetes, el cáncer y otras afecciones.

El ensayo que han llevado a cabo estos científicos recibe el nombre de CALERIE (Comprehensive Assessment of the Long-Term Effects of Reducing Intake of Energy, en español Evaluación Exhaustiva de los Efectos a Largo Plazo de la Reducción de la Ingesta de Energía) y en él han participado 53 hombres y mujeres sanos no obesos de edades comprendidas entre los 21 y los 50 años.

Estos individuos redujeron su ingesta calórica en un 15% durante dos años, con análisis semanales de sangre, escáneres óseos y medición de la temperatura corporal. Además, también analizaron cómo quemaban las calorías sus organismos. 

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Al concluir la investigación, el grupo perdió un promedio de casi 9 kg, aunque no siguieron una dieta en particular y la pérdida de peso no era uno de los objetivos del trabajo. Todos los participantes conservaron su buena salud y no se observaron efectos adversos, como anemia, pérdida ósea excesiva o trastornos menstruales. Además, observaron mejoras en el estado de ánimo y la calidad de vida relacionada con la salud. 

La reducción del consumo de calorías condujo a una disminución de un 10% del metabolismo basal, que es el valor mínimo de energía necesaria para que las células subsistan. Teniendo en cuenta que los subproductos del metabolismo, como los radicales libres, aceleran los procesos de envejecimiento, limitar la ingesta de calorías durante varios años puede ayudar a reducir el riesgo de sufrir enfermedades crónicas y prolongar la vida. 

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No obstante, otros científicos no están de acuerdo con estas conclusiones. Luigi Fontana de la Universidad de Washington, afirma: "Puedes tener un bajo índice metabólico en reposo porque te estás muriendo de inanición. ¿Eso lo convierte en un biomarcador de la longevidad? No. Puedes tener restricciones calóricas al comer media hamburguesa y algunas patatas fritas al día pero, ¿podrás vivir más tiempo? No, morirás de desnutrición".

[Fuente: The Independent]