Todos hemos pasado por tener que aprendernos de arriba a abajo la tabla periódica de los elementos, una tabla que recientemente celebrara su 150 aniversario y que cualquier científico del mundo la debe tener como uno de los pilares fundamentales de sus conocimientos.

Pero la tabla periódica que estudiaste en la escuela podría cambiar totalmente si una propuesta de un conjunto de científicos rusos prospera, que quieren ordenar los elementos no teniendo en cuenta las similitudes entre los mismos, sino según lo que han denominado como “número de Mendeleev” (MN). Al principio cuando se creó la tabla periódica que todos conocemos, los científicos eran conscientes de que ciertos elementos tenían propiedades químicas similares con lo que al final los acabaron colocando uno junto a otro según su similitud edificando la tabla periódica actual.

Si bien durante años ha habido multitud de propuestas para cambiar tanto la disposición como el orden de los elementos de la tabla periódica, lo cierto es que la nueva propuesta publicada recientemente en el Journal of Physical Chemistry por los científicos Zahed Allahyari y Artem Oganov, otorga un nuevo enfoque y parece que está gustando bastante.

El enfoque concretamente es asignar a cada elemento lo que se llama el número de Mendeleev que es una combinación de dos cantidades fundamentales que se pueden medir como el radio atómico de un elemento y la “electronegatividad” que viene a describir la fuerza con la que un átomo atrae electrones hacia sí mismo.

Y claro, si ordenamos los elementos según el número de Mendeleev nos aparece una tabla periódica totalmente distinta. El beneficio de este nuevo enfoque puede ayudar a predecir las propiedades de compuestos binarios que aún no se han elaborado. Esto sería útil para la búsqueda de nuevos materiales que sean necesarios tanto para las tecnologías futuras como para las existentes. Cabe aclarar que es un nuevo enfoque de tabla periódica para científicos y profesionales, pero no para el público general.

Así que a diferencia de otras propuestas, esta tabla periódica está pensada para el futuro, que sirva de llave o ayuda para encontrar nuevos compuestos y que pueda ayudar a los científicos de todo el mundo con sus proyectos. 

De momento, no te preocupes, porque en la escuela se seguirá enseñando la misma tabla periódica de toda la vida.

[Vía: TNW]