Los avances en IA son siempre positivos cuando supongan una ayuda para el avance de la civilización humana, pero en ciertos casos se está llegando a un punto donde incluso parece que las IA ya son capaces de engañar a un ser humano.

Y ahora un par de investigadores descubrieron que una red neuronal llamada StyleGAN2 es capaz de crear caras que no se pueden distinguir de las reales y que pasan perfectamente como las de un ser humano, según recoge un comunicado de la Universidad de Lancaster.

Lo preocupante del asunto, es que incluso los participantes en este estudio encontraron a estos rostros generados por inteligencia artificial, incluso más confiables que los rostros de personas reales.

“Nuestra evaluación del realismo fotográfico de rostros sintetizados por la inteligencia artificial indica que los motores de síntesis han atravesado la zona inquietante y son capaces de crear rostros que son indistinguibles y más confiables que los rostros reales”, explican.

Como parte de este estudio los investigadores pidieron a los participantes que calificaran las caras en una escala del 1 al 7 en cuanto a confiabilidad, siendo el siete el de mayor confiabilidad de todos.

En promedio, todas estas caras sintéticas creadas por la IA fueron percibidas como 7% más confiables que las caras de personas reales.

Es por ello que el equipo de investigación avisa de que el avance en IA podría crear imágenes y vídeos falsos que podrían mover masas, crearse para realizar estafas o utilizarse como fines políticos.

Añade que “quizás lo más pernicioso es la consecuencia de que, en un mundo digital en el que se puede falsificar cualquier imagen o vídeo, se pueda cuestionar la autenticidad de cualquier grabación no deseada”.