Se dispara la contaminación que provoca el bitcoin y no hay solución a corto plazo

Desde hace años que se viene advirtiendo sobre lo poco sostenibles que son para el medio ambiente las criptomonedas. El consumo eléctrico que requiere su minado es abrumador para el uso tan reducido que tienen y esto no deja de crecer. Además, se ha informado que ahora contaminan más, desde que se prohibieron en China.

China prohibió hace unos meses el minado de criptomonedas por distintos motivos, como su negativa al uso de criptoactivos que se escapaban a su control o los problemas que ocasionaban en la red eléctrica. Esto provocó que las granjas de minado se desplazasen a otros países, como Kazajistán, y recordemos que el 44 % de estas a nivel mundial se encontraban en China.

El problema con estos países es que tienen un uso aún menor de fuentes renovables y el minado es mucho más contaminante, según han publicado en un estudio.

Invierte en criptos y acciones desde 1 céntimo con Vivid Money

Vivid Money ofrece una cuenta bancaria gratuita con tarjeta virtual e inversiones en fracciones de criptomonedas y acciones.

Date de alta gratis en un minuto

Los datos son claros al respecto: "el uso de fuentes de energía renovables como la eólica, solar o hidroeléctrica en la red bitcoin se redujo de un promedio del 42 % en 2020 al 25 % en agosto de 2021", publican en The New York Times.

A estos datos han llegado en Vrije Universiteit Amsterdam, la Universidad Técnica de Munich, ETH Zurich y el Instituto Tecnológico de Massachusetts. Pero el estudio publicado también culpa a las granjas de minado situadas en Estados Unidos.

Si en Kazajistán se usan sobre todo combustibles fósiles como el carbón, en Estados Unidos se han creado numerosas granjas de minado que también se abastecen de la industria del gas natural. Se suele asociar a países asiáticos, pero en EE.UU existen ventajas fiscales a esta industria que allí se abastece de carbón y gas natural. 

Las conclusiones del estudio son bastante demoledoras: ahora las criptomonedas son más contaminantes y se generan sobre 65 megatones de dióxido de carbono al año, una cifra comparable a los desechos que expulsa Grecia.

Aunque existan planes para que el bitcoin se produzca en el futuro con energías limpias, no parece haber solución a corto plazo y todo apunta a que en los próximos años aumentará aún más la contaminación que llega por su minado.