Hay extensiones de Google Chrome casi para cualquier cosa que se te ocurra que podría hacer tu navegador mientras navegas. Por ello, las extensiones del navegador se han convertido en un vector de ataque crítico, especialmente porque muchas de ellas utilizan más permisos de los que debieran.

Google se ha puesto seria con la seguridad de las extensiones para su navegador Google Chrome y estaría actualizando los requisitos de seguridad de las extensiones mejorando sus permisos mínimos y política de uso de datos de los usuarios.

Por ello, todas aquellas extensiones que el próximo día 15 de octubre no cumplan con las nuevas políticas de seguridad quedarían automáticamente expulsadas de la tienda de extensiones de Google Chrome y no podrían seguir funcionando en su navegador.

La medida se integra en la hoja de ruta de Project Strobe, el plan de choque de Google para proteger los datos de los usuarios. Tal y como anuncian desde su blog, la nueva política de datos de usuarios obligará a las extensiones a replantear su política de permisos si quieren seguir funcionando en Google Chrome.

El primero de los nuevos requisitos es que las extensiones solo pueden solicitar acceso a la menor cantidad de datos de posible. Por ejemplo, si una extensión tiene como objetivo oscurecer la interfaz de YouTube, solo podría solicitar acceso a YouTube, y no a todas las páginas que visites

Si quieren ampliar sus funciones, las extensiones pueden volver a solicitar más permisos en sus futuras actualizaciones, pero si estos se deniegan, Chrome desinstalará automáticamente la extensión.

Google también pedirá que las extensiones cuenten con políticas de privacidad, especialmente cuando estas estén relacionadas con las comunicaciones personales y el contenido proporcionado por el usuario.

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Hasta ahora, Google solo exigía estas políticas de privacidad a las extensiones que gestionaban datos personales y privados, pero ahora este requerimiento ampliará el número de extensiones que la necesitarán.

Google advierte a los desarrolladores que disponen hasta el 15 de octubre de revisar y verificar el cumplimiento de la normativa. De lo contrario, serían expulsados de la tienda de extensiones y se bloqueará la subida de aquellas extensiones que no cumplan con los nuevos requisitos de seguridad.