El reciente lanzamiento del cargador inalámbrico Magsafe para la serie iPhone 12 ha supuesto un gran salto si lo que queremos es cargar nuestro dispositivo de una manera mucho más rápida, eficiente y sin cables, un cargador que se conecta de forma magnética a la parte posterior del móvil gracias a sus imanes, y que seguro que ya te ha sacado de muchos apuros.

Pero todavía hay mucha gente que desconoce que el iPhone 12 cuenta con un conjunto de imanes dispuestos en un círculo concéntrico capaces de atraer a pequeños metales que se acerquen, partículas de arena que podrían ser un incordio si piensas ir a la playa o a la montaña durante este verano.

Según se desprende de este hilo en Reddit, un usuario de iPhone 12 Pro se quedó de hielo cuando observó que su a flamante teléfono móvil se le quedó arena “pegada”.

Como puedes ver en la imagen, no solo el iPhone 12 cuenta con imanes en la parte central, sino también en ciertas zonas del módulo de la cámara y en la parte inferior del cuerpo. Si bien esto pueda parecer curioso, puede ser demoledor para la vida útil de nuestro iPhone 12. Porque si estas pequeñas partículas de metal acaban entrando al interior del dispositivo podrían inutilizarlo directamente.

Esta imagen ha sido capturada en la zona del Lago Tahoe, lugar rico en suelo pulverizado junto con otros elementos. Y es que en esta zona encontramos óxidos de hierro y piritas que se pueden adherir de forma magnética a los imanes en la parte posterior del iPhone 12.

Otros metales ferrosos también podrían adherirse a los imanes, y si bien no se trata de un imán muy fuerte, pequeñas partículas pueden ser perfectamente atraídas.