Todos los usuarios norteamericanos que tienen una consola PlayStation 3 original (la popular fat), recibirán 65 dólares por parte de Sony, después de que la compañía japonesa haya perdido un juicio por quitar el soporte Linux de la PS3.

Linux también desapareció de las consolas europeas (y del resto del mundo), pero los usuarios europeos no veremos ni un céntimo, porque aquí nadie se molestó en demandar a Sony. Todavía tenemos mucho que aprender de los norteamericanos, en muchos aspectos.

Cuando Sony puso a la venta la consola PlayStation 3, en 2006, su característica más sorprendente era el soporte de Linux. Era posible instalar Ubuntu, Fedora, OpenSUSE y Yellow Dog Linux, y usar la consola como un ordenador para ejecutar aplicaciones Linux.

¿Sabías que aún hay una PlayStation 3 a la venta?

El soporte se mantuvo durante 4 años, hasta que en 2010, de forma repentina, Sony eliminó Linux de la consola, a través de una actualización de firmware. La razón es fácil de intuir: los piratas estaban utilizando este soporte Linux para piratear la consola, así que Sony decidió cerrar el grifo.

Algunos usuarios norteamericanos se molestaron por este recorte de funcionalidades, porque ellos habían pagado por una consola con Linux, así que denunciaron a la compañía japonesa. Tras varios años de juicio, una sentencia judicial obliga a Sony a pagar 65 dólares a cada usuario de la primera versión de PlayStation 3, conocida popularmente con el nombre de fat (gorda), pues era más gruesa que las revisiones posteriores:

Los usuarios americanos ya pueden reclamar estos 65 dólares presentando una prueba de compra o posesión de la consola. Al parecer incluso aunque ya no la tengas, si guardas su número de serie es válido para reclamar la indemnización.

Esta reclamación solo afecta a la primera versión de la consola, ya que las posteriores revisiones que salieron no incluían Linux.

[Fuente: Hothardware]

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