3 ventajas (y tres inconvenientes) de los coches de hidrógeno
Jorge Morillo
Para lograr el objetivo de alcanzar una movilidad sostenible es imprescindible que el parque automovilístico se renueve con vehículos que emitan los menos gases posibles. O que no emitan, directamente. Ahí entran en juego fundamentalmente los eléctricos, pero también los coches de hidrógeno. Menos populares pero igualmente eficaces en este sentido, presentan una serie de ventajas e inconvenientes que vamos a repasar.
Ventajas de los coches de hidrógeno
- Rapidez a la hora de repostar
La gran ventaja de los coches de hidrógeno respecto a los eléctricos es la velocidad de repostaje. Mientras que los primeros apenas necesitan unos minutos conectados al surtidor, los segundos en el mejor de los casos emplean media hora en una toma de carga rápida, que además de hacer sufrir a las baterías no les hace recuperar toda su capacidad.
- Precio respecto a gasolina o diésel
El precio del hidrógeno es bastante más asequible que el de la gasolina o el gasóleo. Según los cálculos de Toyota, el depósito de 5 kilogramos que tiene el Mirai requiere un desembolso medio de unos 45 euros para llenarlo del todo. ¿Hace cuánto tiempo no llenamos el depósito de nuestro coche de toda al vida por ese precio? Algunos ni siquiera llegan a la mitad con este importe...
Por qué el coche de hidrógeno lo tendrá tan difícil ante el coche eléctrico
- Etiqueta cero emisiones
Los coches de hidrógeno tienen derecho a lucir la pegatina CERO en España, lo que supone una serie de importantes ventajas en determinadas ciudades. Pueden circular los días que se activen los protocolos anticontaminación, pueden aparcar en la zona SER sin pagar, etc.
Inconvenientes de los coches de hidrógeno
- Falta de estaciones para repostar
Los coches de hidrógeno no son la panacea. También presentan una serie de inconvenientes que, al menos de momento, no hacen del todo recomandable su compra, al menos en la situación que la mayoría de posibles clientes viven. La principal es la falta de infraestructura para repostar. No son muchas las estaciones de servicio que tienen en España un surtidor de hidrógeno.
- No son limpios del todo
Una vez en marcha este tipo de vehículos no emite emisión contaminante alguna, es cierto, pero también lo que que el hidrógeno es un gas que no se encuentra de forma natural. Para generarlo hay que utilizar una energía que puede provenir de fuentes renovables o fósiles, con lo que el ciclo del coche de hidrógeno podría no ser limpio del todo.
- Precio
Si los coches eléctricos ya son caros de por sí, los de hidrógeno más aún. Para que os hagáis una idea, el Hyundai Nexo, primer vehículo de este tipo matriculado en España, parte de 69.000 euros, mientras que el Hyundai Tucson, su 'equivalente' convencional, empieza en 24.215 según nuestros datos.
Conoce cómo trabajamos en Computerhoy.