El Rabbit R1 es el dispositivo portátil del que todos hablan, algunos destacan sus opciones avanzadas de IA más allá de las herramientas conocidas hasta el momento, otros incluso anticipan que puede llegar a sustituir a los móviles poniendo en jaque a Google o Apple. El poder del Rabbit R1 está en su capacidad para aprender frases y comandos para realizar tareas.

El creador del R1, Jesse Lyu, ha expresado que es el ordenador más simple que existe, "algo que es tan intuitivo que no es necesario aprender a usarlo". Este dispositivo tiene una pantalla táctil de 2,88 pulgadas y solo un botón, un micrófono de campo lejano y una cámara giratoria de 360°.

El hardware de este dispositivo también es relativamente simple: un procesador MediaTek MT6765 Octa-core con 4 GB de RAM y 128 GB de almacenamiento. A esto hay que sumar los sensores habituales como el acelerómetro, el giroscopio, el magnetómetro y el GPS, ha informado How To Geek. 

El Rabbit R1 tiene conectividad Bluetooth 5.0, WiFi de 2,4 GHz a 5 GHz con 4G LTE. El dispositivo tiene salida de altavoz, un conjunto de micrófonos duales y una ranura para tarjeta SIM. También admite una resolución fotográfica de 3264x2448 y vídeo de 24 fps a 1080p. Nada diferencia de momento al R1 de cualquier otro móvil con inteligencia artificial del mercado.

El aprendizaje del Rabbit R1 automatiza las acciones

Esta herramienta es más que un simple asistente de voz como Siri al que le pides que reproduzca una canción de Spotify o añada detergente a la lista de la compra. Rabbit R1 es capaz de aprender las marcas que utilizas habitualmente y realizar una compra en Amazon simplemente diciéndole frases como "compra mi detergente".

Los usuarios pueden entrenar a la IA para automatizar acciones como pedir una pizza personalizada, desde el restaurante hasta el tipo de masa y los complementos. El R1 memorizará los pasos y lo guardará con el nombre que decidas. Si luego pides esa pizza por ese nombre, la ordenará de forma automática.

El Rabbit R1 también puede automatizar búsquedas simples en Google con frases personalizadas para conocer las últimas noticias de un periódico que lees habitualmente, las estadísticas de los partidos de fútbol de un equipo o los resultados de una carrera de Fórmula 1.

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Las opciones de IA avanzadas y las posibilidades de personalizar las acciones con el lenguaje de los usuarios diferencian al R1 de los móviles convencionales, pero no parece que podrá sustituirlos, al menos a corto plazo.  

El altavoz y la calidad de la cámara tampoco superan las prestaciones de cualquier móvil de gama media del mercado. El dispositivo está pensado para evitar las distracciones y aumentar la productividad sin tener que mirar una pantalla durante horas, ha explicado su creador.

Las prestaciones de hardware, el procesamiento y el almacenamiento del Rabbit R1 son limitadas, a pesar de todo parece que los principales fabricantes se han mostrado impresionados por las capacidades de este asistente con AI.

Aunque, al menos de momento, no puede competir con los smartphones debido a su tamaño tan reducido y la dificultad para mostrar gráficos, con las pertinentes mejoras es posible que pronto pudiera plantearse con una seria alternativa.