El mercado de los smartwatch y pulseras inteligentes cada vez tiene más integrantes y cada día es más difícil sorprender. 

Al final, quitando contadas excepciones que van a por todas como los buque insignia de algunas marcas, lo habitual es que cada smartwatch se centre en un aspecto concreto como principal punto fuerte y deje un poco más de lado todo lo demás. 

El Honor Watch 4, que la compañía presentó hace unos meses, pone el foco principal en los modos deportivos y lo cierto es que tras unas semanas de uso me ha parecido que cumplen con creces en este apartado. 

Por 169 euros tienes un reloj que destaca en comodidad y autonomía y que es un fantástico compañero para hacer deporte gracias a su GPS integrado y sus modos deportivos. 

Eso sí, al poner el foco en este apartado, el resto de prestaciones del dispositivo se quedan a medio gas, pero eso no quiere decir que no sea una opción a considerar. 

El análisis del Honor Watch 4 por apartados

• Diseño: comodidad extrema gracias a su ligereza
• Pantalla: una AMOLED muy nítida y brillante
• Monitorización: con lo justo y necesario
• Experiencia de usuario: buen software, aunque le faltan cosas
• Batería: mínimo de una semana de uso
• Conclusiones: lo que buscas si quieres batería y pantalla

La comodidad: la pieza sobre la que gira el dispositivo

Toca empezar por una de las cosas que más me ha gustado del Honor Watch 4: su comodidad. Es un smartwatch francamente cómodo que encaja a la perfección en la muñeca. Ni muy grande, ni muy pequeño. Es decir, perfecto tanto para hombres como para mujeres. 

Cuenta con unas dimensiones de 45,3 x 49 x 11,2 mm, un peso de tan solo 32 gramos sin correa y una forma rectangular que recuerda, irremediablemente, al Apple Watch. A esto suma una caja de aluminio para proteger al dispositivo de cualquier golpe accidental.

Por lo demás, cuenta con un único botón emplazado en el lado derecho que cumple una triple función: encender la pantalla, entrar en la lista de apps y volver a la pantalla de inicio. 

A mí parecer se queda algo corto y me hubiese encantado encontrarme con otro botón configurable para acceder a apps concretas, pero tampoco resulta un incordio. 

Como podrás imaginar, en la parte inferior se encuentra el sensor para las mediciones y los 2 pines de carga que permiten cargar el dispositivo al entrar en contacto con el cargador. 

Por último, cuenta con una correa de 20 mm de ancho fabricada en silicona que puedes retirar fácilmente si no te convence para apostar por alguna de terceros que encaje mejor con tu estilo. 

Muy buena calidad de pantalla con un ajuste de brillo automático excelente

El Honor Watch 4 presenta un panel AMOLED que cuenta con una diagonal de 1,75 pulgadas con una resolución de 390 x 450 píxeles. Esto se traduce, por tanto, en una densidad de 340 ppp. 

La calidad de la pantalla la verdad es que es muy buena: negros profundos, gran contraste y colores vivos y muy definidos. 

A esto suma, además, una tasa de refresco de 60 hz para un desplazamiento fluido, así como una tasa de muestreo táctil de 120 hz para que el toque se registre prácticamente al momento. 

Lo mejor de todo es un sensor de brillo automático muy bien trabajado que se ajusta a la perfección a las condiciones lumínicas del entorno. Y siguiendo con el brillo, alcanza un alto nivel que no te va a dar problemas en exteriores. 

A destacar, también, que reconoce de manera automática cuando giras la muñeca para encender la pantalla. Un detalle que agradezco y que funciona bien, aunque de vez en cuando se enciende accidentalmente. 

Como podrás imaginar, también cuenta con opción de No Molestar, para que la pantalla no se encienda a menos que se lo pidas, así como función de pantalla siempre activa.

Esto no he podido comprobarlo de primera mano porque, a pesar de que está disponible en la app y puedes activarlo desde el smartwatch, no he logrado activar la función durante la prueba. 

Lo justo en monitorización, aunque perfecto para hacer deporte

Este es uno de los puntos que menos me ha gustado del dispositivo. 

No porque lo que lleve no funcione bien, sino porque le faltan algunas opciones que ya se han visto en modelos de otras marcas a precios similares. 

En este Honor Watch 4 te vas a encontrar con los clásicos: sensor de ritmo cardíaco, monitorización de sueño, niveles de SpO2 y monitorización del estrés. Eso sí, falta registro del ECG, control de la presión sanguínea, detección de caídas o registro de temperatura.

Si con lo que tiene en su interior te vale, sí que te puedo asegurar que da buenas mediciones, las cuales se quedan registradas a la perfección en la aplicación Salud por si quieres consultarlas cuando lo necesites. 

Ahora bien, aunque puede que se quede corto en sensores relacionados con la salud, sí que da la talla en lo relativo al deporte. 

Cuenta con 85 modos deportivos y 12 modos de entrenamiento profesional, GPS para registrar las rutas que hagas y la posibilidad de sumergirlo a 5 ATM.

Buena personalización y facilidad de uso, aunque echo de menos bastantes cosas

El Honor Watch apuesta por MagicOS 7.2 como sistema operativo y lo cierto es que no está nada mal en cuanto a personalización y facilidad de uso, aunque tiene una pega que no puedo pasar por alto: no está basado en Wear OS.

Es decir, no tiene acceso a los servicios de Google ni a la tienda de Play Store, por lo que no vas a poder descargar nuevas aplicaciones. Lo que tiene en su interior es con lo que te quedas. Nada más. 

Es bastante común que en smartwatch de este precio no tengan la posibilidad de descargar nuevas apps y aunque sí puedan, las opciones son escasas, pero es importante recalcarlo. 

Lo positivo es que ofrece gran nivel de personalización con multitud de esferas donde elegir, por lo que seguro que encuentras algo que encaja con tu estilo. 

Eso sí, lo que vas a poder hacer con el dispositivo es bastante escueto: mirar notificaciones que te llegan al dispositivo sin posibilidad de interactuar con ellas, gestionar la música, ver las mediciones o consultar el tiempo son algunas de ellas. 

Lo que sí que es una buena noticia es que es posible recibir llamadas con buen detalle y también es posible entrar en la agenda del móvil y hacer una llamada a cualquier persona que tengas almacenada en la memoria.  

La autonomía es otro de los puntos fuertes: al menos 7 días sin problema

En cuanto a batería, es otro de los puntos fuertes del Honor Watch 4. 

La firma asegura que los 451 mAh son capaces de ofrecer 14 días de autonomía y esto es así con un uso bastante comedido.

Durante mis pruebas, he tenido activa la monitorización de ritmo cardíaco, fases de sueño, estrés y SpO2 y he hecho alguna que otro ejercicio deportivo y me he quedado en torno a los 12 días. 

Entiendo que un usuario que haga deporte todos los días y le saque más partido, vea como esta cifra se reduce, pero no creo que baje de los 7 días, así que solo puedo aplaudir. 

En cuanto a la carga, no me ha gustado mucho el cargador, ya que requiere colocar el dispositivo de una forma determinada para que empiece el proceso, pero logra el 100% en apenas una hora.

El Honor Watch 4 es una opción a considerar si quieres pantalla y autonomía

El Honor Watch 4 es un smartwatch que da lo que promete.

Tiene alguna que otra pega, como la ausencia de NFC para pagos móviles, no poder descargar aplicaciones, la ausencia de algunos modos de medición de salud o que es imposible interactuar con las notificaciones que recibes a diario. 

A pesar de estos fallos, se comporta muy bien como reloj deportivo, tiene un diseño que destaca por comodidad y ligereza y una autonomía que es lo mejor del conjunto.