¿Quieres usar chatbots en tu trabajo? 4 consejos de un experto para no liarla con la IA
No cabe duda de que los chatbots como ChatGPT son de gran utilidad para el día a día de muchos. Sin embargo, su uso de forma indiscriminada podría traerte graves problemas.
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La inteligencia artificial está siendo muy usada para realizar tareas diarias de trabajo. Con sus más y sus menos y con opiniones a favor o en contra de la ventaja que supone usar chatbots para, por ejemplo, ayudarte con la escritura de código, no se puede negar que uno de los grandes capitanes de este barco es ChatGPT.
Gemini de Google, Claude de Anthropic o Perplexity AI le siguen muy de cerca, demostrando que no solo existe una opción y que el mercado está lleno de inteligencia artificial por todas partes. Sin embargo, aquí viene el problema: este avance también trae consigo la necesidad de ser más cautelosos y conscientes sobre cómo se usan estas herramientas.
Teniendo en cuenta lo novedosas que son, falta información sobre un uso seguro de ellas. Al final no se trata solo de una aplicación o herramienta que te ayuda con tu TFG de la universidad o con ese correo que quieres mandar a un cliente. Hay todo un mundo detrás de su funcionamiento.
Sebastian Gierlinger, vicepresidente de ingeniería de Storyblok, una empresa de gestión de contenidos con clientes como Netflix, Tesla y Adidas, ha querido compartir en Business Insider su perspectiva sobre la seguridad y privacidad al utilizar chatbots de IA. Según él, aunque estos pueden ser muy útiles, hay que ser consciente de los riesgos y limitaciones que tienen.
Cuatro consejos para usar chatbots con IA de forma segura
Comparar con el uso de redes sociales
Gierlinger sugiere que todos deberían considerar sus charlas y preguntas con chatbots de IA de la misma manera que lo hacen con las redes sociales. Es decir, ser conscientes de que tus conversaciones no son completamente privadas.
Por ejemplo, al pedir recomendaciones de vacaciones, uno podría decir: "¿Cuáles son los mejores sitios soleados con playas y con al menos 25 grados en mayo?". Sin embargo, si se da demasiada información específica, esta podría ser utilizada para entrenar futuros modelos de IA y, potencialmente, exponer detalles personales si ocurre un ciberdelito.
Seguir las pautas de IA de la empresa
Es clave y muy importante seguir las políticas de IA de la empresa. En Storyblok, por ejemplo, tienen una lista de información confidencial que no se debe comentar a ningún chatbot.
Esto incluye detalles sobre salarios, información de empleados y datos financieros. La empresa también tiene políticas sobre el uso de IA para codificación, donde el código generado por herramientas como Copilot de Microsoft debe ser revisado por un desarrollador humano antes de que se haga nada con ello.
Usar LLM con precaución en el trabajo
A pesar de que muchas compañías aún no tienen una política clara sobre el uso de IA, la base es que hay que ser cautelosos con la información que das. Empleados de bancos o consultoría, por ejemplo, podrían sin querer estar exponiendo datos sensibles al utilizar chatbots de IA para analizar presupuestos o ingenieros revelar código que es altamente secreto.
Diferenciar entre chatbots
No todos los chatbots de IA son iguales. Gierlinger confía en que empresas como OpenAI se esfuerzan por garantizar la seguridad de los datos, pero añade que los chatbots creados por otras organizaciones pueden no tener los mismos estándares de seguridad.
Por ejemplo, un chatbot en el sitio web de un hospital podría recopilar información de salud muy personal sin no existen enormes medidas de seguridad, lo que podría ser problemático si se produce una violación de datos. Acabaría algo tan privado como una enfermedad que, por ejemplo, quieres guardarte para ti, en Internet.
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Etiquetas: Consejos, Inteligencia artificial, Privacidad, Chat, Software