Motorola Edge 30 Neo: análisis y opinión
El Motorola Edge 30 Neo es la nueva propuesta de la marca para conseguir dominar la gama media más asequible. Te contamos todo lo que quieres saber de este nuevo smartphone.
Hace pocas semanas que vimos los Motorola Edge 30 Neo, Edge 30 Fusion y Edge 30 Ultra, tres nuevas apuestas del fabricante propiedad de Lenovo, con los que pretendía tener una presencia importante en diferentes gamas con terminales en una misma familia.
De todos ellos, ha caído en nuestras manos el Motorola Edge 30 Neo, un smartphone que, pese a no ser el más potente de todos, ya nos pareció interesante por su lista de características antes de probarlo, dentro del precio que tiene.
De todas maneras, hasta que no se prueba no se puede asegurar que todo vaya como pinta sobre el papel, ya que muchas veces nos hemos encontrado teléfonos que apuntaban maneras y se quedaban a mitad de camino.
Como pequeño adelanto, este no va a ser el caso, ya que este terminal puede llegar a sorprender en muchos sentidos. Pero dejemos ya la introducción y vamos a meternos en materia para que conozcáis qué nos ha parecido el nuevo Motorola Edge 30 Neo.
Motorola Edge 30 Neo | |
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Pantalla | pOLED de 6,28 pulgadas | Resolución de 2.400 x 1.080 píxeles Formato 20:9 | Densidad de 419 ppp Tasa de refresco de 120 Hz |
Procesador | Procesador Qualcomm Snapdragon 695 5G | Adreno 619 |
Memoria RAM y almacenamiento | 8 GB | 128 GB |
Cámaras | Principal: 64 Mpx f/1.8 | Ultra gran angular: 13 Mpx f/2.2 |
Cámara Frontal | 32 Mpx f/2.4 |
Batería | 4.020 mAh | Carga rápida 68 W Cargador TurboPower de 68 W | Carga inalámbrica 5 W |
Sistema operativo | Android 12 con MyUX |
Conectividad | 5G | Wifi 5 (802.11 ac) | Bluetooth 5.1 NFC | USB-C | A-GPS, Glonass, Galileo |
Dimensiones y peso | 152,9 x 71,2 x 7,8 mm | 155 gramos |
Precio | 399 euros |
Análisis del Motorola G42 por apartados:
- Diseño: compacto, bien fabricado y con un color que atrae miradas
- Pantalla: panel pOLED pequeño para disfrutar
- Rendimiento: más que correcto hasta que se le exige
- Cámaras: ninguno de los sensores da el nivel esperado
- Autonomía: buena autonomía y carga espectacular
- Conclusión: más luces que sombras
Compacto, bien fabricado y con un color que atrae miradas
Parece que lo de tener un teléfono compacto había pasado a mejor vida, ya que este tipo de terminales cada vez son más escasos en el mercado de la telefonía.
Pues bien, ahora llega Motorola y nos trae este Edge 30 Neo, un terminal con unas medidas contenidas en todos los aspectos, no solamente en lo que es su cuerpo, ya que hablamos de 152,9 de alto y 71,2 de ancho, sino que también el grosor está muy bien conseguido con solamente 7,8 mm.
A todo esto, le debemos sumar un peso de apenas 155 gramos, lo que hace que el conjunto siente realmente bien a la mano y que la frase más repetida por quienes lo han cogido durante el tiempo que he estado probándolo es "pero que poco pesa y que bien se lleva".
No vamos a ser nosotros quienes rebatamos esta afirmación, puesto que es totalmente cierta. Hablamos de un terminal en el que Motorola ha realizado un trabajo estupendo para ofrecer un producto compacto, pero que no da la sensación de ser excesivamente pequeño (y os lo dice alguien que prefiere móviles muy grandes).
Además, lo que son los acabados en plástico brillante y el color Very Peri de la unidad que ha llegado a nuestras manos, hacen que no sea un terminal que pase desapercibido y, por lo tanto, atrae las miradas. Pero no solo eso, tiene un agarre muy bueno que no resbala y, claro está, con una capacidad muy buena para usarlo con una sola mano.
En la parte derecha del terminal están los botones para el volumen y el que usamos para apagarlo. En el lado contrario no tiene nada, mientras que en el borde inferior podemos observar el micrófono de llamadas, el altavoz multimedia principal, el puerto USB de Tipo C y la bandeja para montar dos tarjetas SIM.
Podemos decir que los dos grandes ausentes en este Edge 30 Neo son el jack de 3,5 mm para auriculares y la posibilidad de albergar una tarjeta de memoria microSD.
La parte trasera de la versión que hemos recibido es realmente bonita y llama la atención, como ya te hemos contado, además de tener un módulo de cámaras que sigue los cánones estilísticos que últimamente llevan la mayoría de los smartphones y en el que se incorpora un LED de notificaciones que rodea dicho módulo, una solución que recuerda en cierta forma a la del Nothing Phone (1).
En la parte frontal predomina una pantalla con unos marcos bien conseguidos, dentro de lo que se espera de un terminal de estas características, con un orificio en el panel donde tiene la cámara de los selfies.
Panel pOLED pequeño para disfrutar
Pese a tener una pantalla cuyo tamaño de 6,28 pulgadas es reducido en comparación a lo que suele ser lo habitual en el mundo smartphone, el hecho de contar con una tecnología pOLED y la tasa de refresco de 120 Hz, hace que hablemos de una visualización bastante más que decente.
Los colores son de calidad y están bien calibrados, con un brillo que se comporta de manera más que correcta comparándolo con otros rivales de su gama, y con un detalle que está a muy buen nivel.
Además, desde Motorola han incorporado funciones interesantes, como la de no permitir que la pantalla se apague mientras estamos mirándola o el hecho de dividirla en dos apps con solo deslizar un dedo por la mitad de esta.
Cuando reproducimos una película donde hay muchos efectos especiales o un juego de última generación, es cuando realmente nos damos cuenta de la incorporación de los 120 Hz de tasa de refresco, puesto que el movimiento de la imagen es mucho más natural y directo.
Hay dos facetas donde esta pantalla no nos ha gustado demasiado: los ángulos de visión y el sistema de brillo automático, el cual tiende a estar demasiado apagado en todas las situaciones para nuestro gusto.
Ya que estamos hablando de la pantalla hay que contar que el sensor de huellas está instalado en la parte inferior de la misma. Es un sensor que nos ha gustado, ya que es suficientemente rápido y efectivo, sin ser el más veloz del mercado, algo lógico dado el rango de precios en el que se mueve este terminal.
El desbloqueo facial también es correcto, aunque en este sentido es menos eficaz al reconocer el rostro del usuario, puesto que necesita tener la cara más vertical hacia la cámara que otros terminales.
Para complementar a la pantalla, tenemos dos altavoces multimedia en este Motorola Edge 30 Neo. Ya te hemos contado que uno de ellos está en el borde inferior, mientras que el otro es el mismo que usamos para las llamadas, ya que también nos sirve como sonido externo.
Tenemos un sonido estéreo de calidad correcta, sin ser algo espectacular, pero al menos no distorsiona, se consigue un buen volumen y los agudos tienen algo de cuerpo, sin ser despampanante.
Más que correcto hasta que se le exige
El procesador que lleva en el interior es el Snapdragon 695 5G, el cual ya nos está marcando el camino que va a seguir este Motorola Edge 30 Neo en lo que a rendimiento se refiere. Tiene 8 GB de memoria RAM (se le pueden añadir 2 GB más de forma virtual desde el menú de Ajustes), y 128 GB de memoria de almacenamiento en el terminal que nos han mandado, aunque también hay una versión con 256 GB de capacidad.
La verdad es que la sensación que hemos tenido con este equipo es que los benchmark no hacen justicia a lo que sentimos nosotros utilizándolo. Es cierto que no podemos esperar que sea lo más potente, pero da la sensación de que estamos ante un terminal un poco más potente de lo que realmente es.
Motorola Edge 30 Neo | OnePlus Nord CE 2 | Xiaomi Poco M4 Pro | TCL 20L+ | |
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Procesador | Snapdragon 695 5G | Mediatek Dimensity 900 5G | Mediatek Helio G96 | Snapdragon 662 |
Geekbench 5 Single | 457 puntos | 784 puntos | 525 puntos | 311 puntos |
Geekbench 5 Multi | 1.459 puntos | 2,309 puntos | 1.841 puntos | 1.383 puntos |
3D Mark Wild Life | 1.201 puntos | 2.041 puntos | 2.417 puntos | - |
AnTuTu | 402.500 puntos | 371.702 puntos | 307.076 puntos | 218.102 puntos |
PC Mark | 10.310 puntos | 11.223 puntos | 8.666 puntos | 6.372 puntos |
Para nuestro día a día es más que suficiente, aunque seas un tipo de usuario exigente que, como en nuestro caso, no de dejamos de usar el smartphone con mensajes, correos y todo tipo de notificaciones.
Cuando queremos exigirle un poco más de rendimiento jugando a alguno de los juegos más populares, la verdad es que se comporta con bastante dignidad, aunque sí que puede aparecer algún que otro tirón cuando llevamos bastante tiempo funcionando, además de que se va a calentar con el uso.
Esto lo podemos minimizar bajando la tasa de refresco o poniéndola en posición automática. Con esto, aunque tampoco podemos esperar un cambio radical en la gestión de la temperatura, reduce bastante el calentamiento.
Es el único escenario de uso donde, realmente, nos damos cuenta de que estamos ante un dispositivo de gama media asequible.
El sistema operativo del Edge 30 Neo es Android 12 prácticamente puro, ya que la capa MyUX que utiliza Motorola incorpora muy pocos retoques con respecto a Android de stock.
Esto quiere decir que, en prácticamente todas las funciones y en la propia interfaz, estaremos viendo lo mismo que en los terminales de Google con algún añadido de Motorola en forma de incorporación y no de variación estética.
Simplemente tendremos la aplicación Moto donde nos mostrará consejos y funciones extra para Android, que tiene el terminal para poder activarlas o desactivarlas a nuestro gusto como la personalización con temas e iconos para cambiar o lo que son los gestos, tales como la captura rápida, activar la linterna con los dedos o poner boca abajo para activar el modo No molestar, entre otras.
Ninguno de los sensores da el nivel esperado
Si hablamos de fotografía, el Edge 30 Neo llega con dos sensores en la trasera. En la cámara principal encontramos uno de 64 megapíxeles, mientras que el segundo es de 13 Mpx para el Ultra gran angular.
La verdad es que las fotografías lanzadas en el modo Automático, es decir, con el que solo se tiene que pulsar un botón para hacer la foto, tiene varias carencias que saltan a simple vista, como son la falta de colorido y el nivel de detalle al ampliar la imagen, algo que mitigamos si lanzamos las fotos con los 64 megapíxeles de la cámara principal.
En sí las instantáneas tienen un nivel decente, teniendo en cuenta la gama en la que se mueve este modelo. No obstante, es evidente la falta de viveza en los colores dando una sensación de imagen plana que no aporta mucho a la calidad de la imagen. Está claro que aquellos usuarios que busquen el colorido más cercano a la realidad van a quedar algo decepcionados.
Al usar el modo Retrato hemos observado que recorta bien al sujeto protagonista, pero sigue manteniendo la falta de viveza en los colores. El único modo donde está mejor pulido este tema es en el Macro, aunque la verdad es una parte de la cámara que, en líneas generales, se utiliza menos.
Las fotos nocturnas, pese a que el modo Nocturno hace que se capture más luz, también se generan unos resultados donde el color es más irreal, además de perder bastantes en lo relativo a la nitidez y el nivel de detalle.
Si no utilizamos este modo para hacer fotos con poca luz, lo cierto es que respeta un poco mejor el ajuste de color, pero perdemos luz, además de que la nitidez y el detalle dejan mucho que desear.
En cuanto a la cámara de 32 Mpx de la parte frontal, hemos de contaros que peca de las mismas carencias en el color que ya hemos visto en los sensores traseros.
Pero es que, además, en esta cámara hemos notado la aparición de ruido, incluso en fotografías tomadas con buenas condiciones de iluminación.
El modo Retrato con la cámara frontal, sinceramente, sigue decepcionando un poco. El recorte no es demasiado exacto que digamos y hay fotos, sobre todo en aquellas con una luz media o algo baja, en la que pierde nitidez. Lo que sí consigue es una mejor representación del color.
Sinceramente, esperaba bastante más de las cámaras del Motorola Edge 30 Neo. Sobre el papel parecía que podría sacarnos alguna sonrisa, cosa que desgraciadamente no ha sido así. No olvidemos que hablamos de un terminal que se mueve en el rango de los 400 euros.
Buena autonomía y carga espectacular
Si en el apartado anterior no teníamos motivos para sonreír, el apartado de la autonomía de su batería es todo lo contrario.
Hablamos de un teléfono que tiene una batería relativamente pequeña, dejándonos una capacidad de 4.020 mAh. Sin embargo, se ha comportado realmente bien superando ligeramente las 8 horas de pantalla y moviéndose entre 35 y 37 horas de autonomía con cada carga.
Estos datos los hemos conseguido con el WiFi conectado prácticamente todo el día, viendo algún que otro video, leyendo el correo, mensajería, jugando de manera esporádica y con la pantalla permanentemente a 120 Hz.
Si utilizamos el móvil sin WiFi, más o menos para lo mismo (jugando algo menos la verdad) los resultados se han movido sobre las 7 horas de pantalla aproximadamente, estando el teléfono encendido unas 31 ó 32 horas.
A estos excelentes resultados, hay que sumarle que tiene un sistema de carga rápida TurboPower de 68 W con un cargador de esa misma velocidad, que es capaz de conseguir cargar el teléfono de 0 al 50% en solo 15 minutos, llegando al 100% de la carga en unos 44 minutos.
Además, hablamos de uno de los escasos móviles de menos de 400 euros que cuenta con carga inalámbrica capaz de cargar el teléfono a una potencia de 5 W.
Más luces que sombras
Una vez que ya conocemos cómo es el Motorola Edge 30 Neo, llega el momento de poner en contexto este nuevo móvil de Motorola y valorarlo en su conjunto. El Edge 30 Neo tiene sus luces y sus sombras, pero sus virtudes aportan mayor valor a su argumentario haciendo que brille más por sus aciertos que por sus carencias.
No solo es un dispositivo "raro" al menos por lo compacto que es. Todos sabemos que prácticamente ya no quedan smartphones así hoy en día, pero es esa rareza la que le hace especial, unido a un color (Very Peri) que le da un atractivo innato y hace que nunca pase desapercibido.
Además, los acabados acompañan a la buena sensación de calidad y el peso ayuda a que sea sumamente cómodo y sencillo de llevar.
La pantalla es otro de sus puntos fuertes. No es la mejor del mercado, pero es un excelente panel para un terminal de esta gama.
Lo mismo ocurre con el rendimiento, que en líneas generales es bastante correcto incluso cuando le exigimos más de la cuenta, momento en el que nos devuelve a la realidad mundana de un móvil de gama media, pero es algo normal y tampoco podemos pedir maravillas.
El Edge 30 Neo brilla con luz propia en la carga rápida con unas velocidades de carga realmente buenas, además de tener una autonomía que nos ha sorprendido.
Las sombras pueden ser alargadas, ya que todos conocemos lo importante que es el apartado fotográfico para muchos usuarios y es aquí donde menos atención a los detalles ha puesto Motorola a la hora de diseñarlo.
Ni los sensores traseros ni el frontal acaban de dar el nivel que esperábamos sobre el papel, y eso para nosotros puede ser una decepción, pero para algunos usuarios, no estar a la altura en fotografía puede ser suficiente motivo para decirse por otro móvil y no por este Motorola Edge 30 Neo.
Sea como sea, estamos ante un móvil que nos parece muy aconsejable y, en líneas generales, Motorola a hecho muy buen trabajo en este Motorola Edge 30 Neo que llega con un precio de 399 euros.
Nuestra valoración
Lo mejor
- Diseño y peso
- Pantalla
- Rendimiento
- Autonomía y carga rápida de 68 W
Lo peor
- Gestión de la temperatura
- Brillo automático
- Rendimiento fotográfico.
- Procesado de color.
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Productos: Motorola Edge 30 Neo