Nueva actualización de Android Auto, nuevos problemas. Google lanzó hace apenas unos días la versión 10.4 de su interfaz Android para vehículos, pero esta versión beta no ha impedido que aparezcan nuevos problemas y, sobre todo, no ha solucionado los que ya estaban presenten en la interfaz desde hace un par de semanas.

Empeoramiento de la calidad de audio en Android Auto. La principal queja de los usuarios, tanto en los foros oficiales de Google como en los de Reddit, es la bajada en la calidad de audio a la hora de reproducir música. Esta situación ha conseguido que los usuarios expresen sus quejas a Google de forma reiterada y colectiva, esperando una respuesta adecuada por parte de la empresa.

Sonido apagado y con ruido tras usar el Asistente de Google. Lo comentado por los usuarios en los diferentes foros es que el problema aparece tras interactuar con el Asistente de Google. Los principales cambios en la calidad del audio se notan en que el sonido pierde potencia, como si tuviese un filtro puesto o algo que estuviese evitando que saliese por los altavoces y, además, aparece el ruido.

Google no responde a las quejas de los usuarios. La empresa detrás de Android Auto no ha hecho caso a las quejas de los usuarios y esto es un problema para la experiencia general de la interfaz de Android para vehículos. Además, el problema es constante y, aunque parezca que se soluciona, no lo hace debido a que aparece de forma reiterada sin solución alguna.

Android Auto y sus problemas: el audio está acabando con la paciencia de los usuarios

Un problema sin solución en Android Auto. Lo más probable, teniendo en cuenta la actitud de Google, es que este problema no se resuelva. De hecho, la empresa detrás de Android Auto ha indicado hace varios meses que estaban trabajando en solucionar el problema. Las actualizaciones, desde su aparición el 20 de agosto, no han conseguido ponerle fin a esta situación.

Las unidades con Android Auto no oficiales son las más afectadas. Puede que el motivo de que Google no haya solucionado esta situación es que la gran mayoría de las quejas llegan de la mano de usuarios que han comprado unidades con Android Auto no verificadas. Esto hace que los problemas no puedan ser estudiados de la misma forma que se hace con los productos verificados por la compañía.