La exploración espacial es uno de los grandes hitos de la humanidad. En los últimos años hemos presenciado avances que pueden cambiar el rumbo de todo lo que conocemos y sabemos sobre lo que nos rodea. La búsqueda casi siempre es la misma: recursos para la humanidad. Teniendo esto como marco, Emiratos Árabes tiene en el punto de mira los asteroides.

Sí, los asteroides pueden ser reservas de materiales necesarios para la vida humana y Emiratos Árabes se pondrán manos a la obra con una misión que parece salida de una película de ciencia ficción. Tienen en el punto de mira el cinturón de asteroides que se encuentra entre Marte y Júpiter, pretenden obtener recursos de estos asteroides.

El nombre de la misión será EMA o Emirates Mission to the Asteroid Belt. El año elegido será el 2028 y es por ello que empezarán a preparar todo lo necesario para poder llevar a cabo la misión con éxito. Este viaje con un destino lejano tiene como objetivo final aterrizar en un asteroide elegido para el estudio que propone la misión.

Pese a estar lejos en términos de distancia, son asteroides cercanos a nivel de ubicación. Además, sus órbitas han sido estudiadas a lo largo de los últimos años lo que supone una ventaja para los científicos que forman parte de esta misión. De hecho, el asteroide protagonista de la misión será (269) Justitia.

Asteroides como fuente de recursos: esto es lo que busca encontrar la misión de Emiratos Árabes

Los asteroides cercanos a (269) Justitia también son importantes, pero este es el principal objetivo de la misión debido a que quieren comprobar si cuenta con materiales orgánicos complejos. Además, gracias a su tamaño de 50 kilómetros de diámetro supone un blanco aceptable para el aterrizaje de la sonda que será enviada en la misión EMA.

Emiratos Árabes pone la vista en el futuro, la llegada de la sonda al asteroide está fechada siete años después del lanzamiento en 2028. Esto se debe a que la misión ha de recorrer 5.000 millones de kilómetros hasta llegar al cinturón de asteroides y, por supuesto, al asteroide que interesa estudiar.

La visa está puesta en el cielo y la misión EMA deberá superar una enorme cantidad de peligros antes de llegar a su destino. Sí, todavía habrá que esperar para ver el despegue y el aterrizaje. Pero el hecho de lanzar una misión tan ambiciosa no deja de ser una señal de que la tecnología ha llegado a un punto en su historia de lo más avanzado.