Para algunos es uno de los mejores momentos del año para hacer un regalo a tu pareja; para otros, en cambio, se trata simplemente de otra estrategia consumista para sacarnos los “cuartos” amparándose en el amor románticos. Pero da igual si te gusta o no, la verdad es que todo el mundo conoce el Día de San Valentín o Día de los Enamorados. 

Lo que no es tan habitual es que se sepa cuál es su origen, ya que ni siquiera los supuestos expertos e historiadores parecen ponerse del todo de acuerdo al respecto. ¿Y por qué precisamente celebrarlo el 14 de febrero? ¿Solo es un fin comercial o existe una razón con más solera detrás? Te lo contamos todo al respecto. 

El origen del Día de San Valentín

No existe un único origen acerca de cómo surgió el Día de San Valentín tal y como lo conocemos hoy. Pero una de las versiones más extendidas tiene su punto de partida, como tantas veces sucede, en el Imperio romano y su progresiva cristianización. Concretamente en la festividad de Lupercalia. 

Esta celebración pagana, que honraba a Fauno, dios de la fertilidad, tenía lugar a mediados de febrero. Sin embargo, la Iglesia Católica buscó cristianizarla, y en el siglo V, el Papa Gelasio I reemplazó Lupercalia con la festividad de San Valentín. No obstante, la identidad precisa de San Valentín es ambigua, ya que varios mártires llevaban ese nombre.

La leyenda más común asocia el día con un sacerdote romano llamado Valentín, quien desafió las órdenes del emperador Claudio II, que prohibía a los jóvenes casarse, creyendo que los solteros eran mejores soldados. Valentín continuó oficiando matrimonios en secreto, pero fue capturado y condenado a muerte el 14 de febrero del año 269 d.C.

Siguiendo una línea similar, Otra versión cuenta que mientras Valentín estaba encarcelado por ayudar a los cristianos, este se enamoró de la hija de su carcelero. Antes de su ejecución, supuestamente envió una carta de despedida firmada como "De tu Valentín", un gesto que se ha querido identificar con la costumbre actual de compartir mensajes de amor.

El Día de San Valentín en la Edad Media

Ya fuese de una forma o de otra, lo cierto es que la popularidad del Día de San Valentín creció en la Edad Media, cuando la tradición de los poemas y cartas de amor se arraigó con bastante fuerza en toda Europa. Durante el siglo XIX, la costumbre se extendió a Estados Unidos, donde las tarjetas y los regalos a modo de declaración de amor ganaron protagonismo. 

Así pues, no puede decirse que el Día de San Valentín sea algo precisamente reciente, como algunos piensan. Pero la verdad es que tampoco tiene un origen perfectamente claro, como es habitual en tantas festividades modernas que comenzaron a practicarse hace ya siglos. 

Lo que sí parece claro es que, pese a todo, mucha gente tiene marcado en el calendario el 14 de febrero como un día especial del año. Y muchos comercios, más aún, cómo no.