Los ultrasonidos que destruyen tumores: nueva y efectiva arma contra el cáncer
Los científicos y médicos del mundo están probando una nueva técnica que elimina los tumores de forma no invasiva: con ultrasonidos. Una vez atacado el cáncer, es el cuerpo quien se encarga de fulminarlo por completo.
La idea de utilizar los ultrasonidos para combatir el cáncer de forma no invasiva es una idea atractiva que está ganando adeptos gracias a los estudios que demuestran que pueden administrar fármacos de forma más eficaz, eliminar células cancerosas de forma selectiva y calentar y destruir el tejido enfermo.
Los investigadores de la Universidad de Michigan (UM) han estudiado cómo puede combinarse con las defensas inmunitarias del organismo para eliminar los tumores mediante un doble golpe, y un nuevo estudio realizado en roedores ha arrojado resultados muy prometedores.
La técnica que está desarrollando el equipo de la UM consiste en utilizar ondas de ultrasonido emitidas en pulsos de microsegundos de duración en los tejidos objetivo (mucho más avanzado que este estudio de 2015).
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El tratamiento, denominado histotripsia, da lugar a la formación de pequeñas burbujas en el tejido, que se expanden y colapsan rápidamente de forma violenta, y la tensión mecánica resultante mata las células cancerosas y desmantela la estructura del tumor.
¿Lo mejor? Que el cuerpo es capaz de absorber los restos de forma inofensiva.
Los científicos creen que los restos que quedan tras la destrucción del tumor contienen los ingredientes necesarios para estimular lo que se conoce como muerte celular inmunogénica, en la que el sistema inmunitario se dirige a las células tumorales.
De este modo, los científicos creen que puede ser posible atacar solo una parte de un tumor con ultrasonidos y, al mismo tiempo, estimular al sistema inmunitario para que elimine el resto. Esto podría resultar útil en situaciones en las que un tumor no puede ser atacado en su totalidad (por tamaño o ubicación).
Para explorar esta idea, los científicos llevaron a cabo experimentos con ratas en los que solo se destruyó entre el 50 y el 75 por ciento de los tumores de hígado con la técnica de los ultrasonidos.
La destrucción parcial de los tumores dejando partes intactas estimuló la respuesta inmunitaria de las ratas, que eliminó el resto. En el 80% de las ratas tratadas de este modo no se observaron recidivas ni metástasis.
Los próximos pasos también explorarán cómo podría adaptarse la técnica para tratar tumores en diferentes etapas de progresión, siendo los utilizados en este estudio solo en una etapa temprana.
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Etiquetas: Salud