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Se acabó el gritar a los niños cuando hacen mucho ruido: esta lámpara lo hace por ti

Se acabó el gritar a los niños cuando hacen mucho ruido: esta lámpara lo hace por tí

© Fraunhofer IPMS

Una casa ruidosa puede desesperar a cualquiera. Y no hablamos solo de los niños... Al final acabas recurriendo a los gritos o los castigos, pero hay una solución más civilizada.

Es normal que los niños armen jaleo, o que se junten varios amigos en casa, y se acabe levantando la voz más de la cuenta. Incluso en la oficina a veces hay más ruido del que sería deseable.

Médicamente está demostrado que el exceso de ruido produce malestar, falta de concentración, irritabilidad, estrés, etc.

Al final acabamos gritando o enfadándonos para poner orden. Pero esa no es la solución. Resulta mucho más práctico utilizar la psicología, y esta lámpara antirruidoinventada por el Instituto Fraunhofer. Sí, los mismos que inventaron el formato MP3.

Se acabó el gritar a los niños cuando hacen mucho ruido: esta lámpara lo hace por tí

¿Cómo funciona la lámpara antirruidos?

En realidad, su tecnología es sencilla. Se trata de una lámpara LED dotada de varios micrófonos.

Cuando la enciendes la lámpara es de color verde. Pero, como los semáforos, si los micrófonos detectan cierto nivel de ruido, cambia a ámbar. Si el ruido sigue en aumento, pasa a rojo.

Si no disminuye en unos segundos, comienza a sonar una alarma a una potencia de entre 70 y 100 db.

Puede parecer un poco brusco, pero es un sistema que psicológicamente funciona.

A las personas no nos gustan las luces rojas ni las alarmas, así que incoscientemente los niños, y también los adultos, cuando ven la luz amarilla o roja, comienzan a bajar la voz. Más aún si suena la alarma. Y tú no tendrás que enfadarte, ni dar ni un solo grito...

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Cada persona tiene su nivel de tolerancia, por eso la lámpara es completamente ajustable.

En el nivel 1, el más sensible, cambiará a amarillo con el menor ruido. Está pensado para usarlo a la hora de dormir, por ejemplo.

En cambio en el nivel 3 se pueden tener conversaciones bastante animadas, y la lámpara se mantendrá en verde. Solo cambiará cuando haya gritos o ruidos fuertes.

También se puede evitar que suene la alarma, o dejar fijas las luces en un determinado color.

Es una idea interesante y que ya han probado con éxito, pero de momento el Instituto Fraunhofer no ha mostrado intención de comercializarla.

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