La aplicación Microsoft Designer es una herramienta de diseño gráfico en Microsoft 365 que permite a los usuarios crear invitaciones personalizadas, post de Instagram, postales digitales y otros materiales como los logos de empresas utilizando la misma tecnología de inteligencia artificial que DALL-E 2.

Simplemente describiendo una imagen que quieres ver, los usuarios pueden crear de una forma muy sencilla algo totalmente nuevo y único en cuestión de unos 5 segundos.

La empresa presentó Microsoft Designer a finales de 2022, sin embargo, estuvo en un segundo plano hasta abril de 2023, cuando la compañía publicó una entrada de blog para ayudar a los usuarios a comprender lo que Designer puede hacer e invitó a los usuarios a probar el software de IA basado en la web por sí mismos.

Precisamente es por esto por lo que me he lanzado a probarlo y comprobar si realmente es tan acertado y novedoso como muchos están haciendo ver vía Twitter. 

El funcionamiento es simple, cuando entras en se Microsoft Designer, verás una página muy básica. Un cuadro de texto grande para escribir tu prompt o mensaje y un botón “Generar”. También puedes agregar tu propia imagen al cuadro de solicitud o elegir entre una plantilla prediseñada para ayudarte a generar esas postales o post que antes hemos comentado. 

En nuestro caso introdujimos el siguiente prompt —en inglés—: “I need a red logo that include the letter C and H. I want it to be modern, cheerful and fresh but at the same time minimalist”. El resultado a nivel estético, la verdad es que es bastante llamativo aunque parece que no acierta demasiado cuando das indicaciones de palabras o letras.

Resulta más útil cuando la solicitud se basa únicamente en pedir una imagen. En estos casos funciona a la perfección, ajustándose al contenido, el estilo, los colores, etc. que le solicitas.

¿Acabará desplazando la IA a los diseñadores gráficos?

La capacidad de una IA para desarrollar logos en cuestión de segundos abre la veda a todo tipo de opiniones. Es innegable que estas herramientas son extremadamente útiles, ya que pueden generar una amplia variedad de diseños en pocos minutos desde la comodidad de tu casa.

Estos sistemas pueden analizar grandes volúmenes de datos y patrones, lo que les permite generar diseños de manera automática, ahorrando tiempo y esfuerzo a cualquier que quiera probar la herramienta antes mencionada u otras.

Sin embargo, a pesar de todas estas indudables ventajas, existe una gran preocupación —que de cierta forma comparto— en relación con la falta de humanidad y sentido creativo que caracteriza a los logos generados por IA. 

El diseño gráfico es un campo en el que la creatividad y la expresión de una empresa y ese carácter único desempeñan un papel fundamental. Los diseñadores humanos son capaces de incorporar emociones, intenciones y narrativas en sus creaciones, algo que es imposible de replicar por una inteligencia artificial.

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A esto hay que sumar que muchos profesionales del diseño gráfico podrían encontrar dificultades para competir con las soluciones automatizadas. Es cierto que el punto positivo de la IA en todo este proceso es que precisamente solo sean ellos los que la usen para aumentar su creatividad, coger foco, recoger ideas que luego servirán para su creación personalizada.

Parece esencial encontrar un equilibrio entre la automatización y la intervención humana, de modo que se aproveche el potencial de la IA sin perder la perspectiva única y creativa que solo los humanos pueden ofrecer —al menos por el momento—.