Kindle vs. libro en físico: ventajas y desventajas de cada uno tras muchos años leyendo
A los lectores seguro que en alguna que otra ocasión se les ha planteado la duda de qué es mejor: ¿Kindle o libro en físico? Esta es mi respuesta tras probar ambos mundos.
Computer Hoy
Aquellos aficionados a la lectura probablemente cuenten en sus casas con el famoso Kindle de Amazon, sea cual sea su edición. Este pequeño dispositivo ha llegado para hacer las maravillas de muchos gracias a su facilidad de uso y, sobre todo, que puedes almacenar en un solo sitio infinidad de libros.
En mi caso, me hice con la versión de 2022 que, aprovechando un Black Friday, tan solo me costó 80 euros y, una vez que encontré sitios seguros y legales en los que descargar libros tanto gratuitos como de pago, se ha convertido casi en un inseparable —a excepción de cuando me lo quitan—.
Sin embargo, no puedo negar que el paso fue algo extraño. Con la idea clara de que me quería tener uno entre mis manos, pasaron más de dos años hasta que me decidí y el problema no era el precio, sino dejar a un lado el libro en físico, el hecho de pasar las hojas o incluso, como fanática de los libros en los que siempre aprendes algo, el mítico subrayado y el uso de post-its para luego revisar en un momento.
Es por eso que si ahora me preguntasen cuál de los dos formatos elegiría la verdad es que no sabría qué decir. Ambos tienen sus ventajas y sus desventajas y aunque para muchos, como comentaba al principio, el Kindle se ha convertido en una extensión de su brazo, aún sigo leyendo en físico algún que otro libro.
Kindle vs. libro en físico: una batalla que para mí no tiene ganador
Amazon
No puedo negar que uno de los mayores atractivos de los libros físicos es la experiencia sensorial que ofrecen. El tacto de las páginas, el olor del papel y la satisfacción de pasar página dan una experiencia que muchos lectores valoran profundamente. Cada libro tiene su propio carácter, desde las tapas duras de las ediciones de lujo hasta el papel rugoso de los libros antiguos.
Como antes mencionaba, para los que disfrutan subrayando frases, escribiendo notas al margen o simplemente colocando post-its, los libros físicos ofrecen algo único. Si bien esto también puedes hacerlo con el Kindle, la experiencia no es ni de lejos la misma.
Aunque algo más absurdo, tengo que reconocer que me gusta tener los libros en físico por un aspecto meramente decorativo. Se conoce bastante a una persona por los libros que lee y es algo en lo que siempre me fijo cuando voy a alguna casa. Al final es agradable ver todos los libros que te has ido leyendo en tu infancia, adolescencia e incluso cuando ya eres adulto, ver como han evolucionado las temáticas o tener en un frontal tu libro favorito, ya destrozado por la de veces que te lo has leído.
Me compré este lector de ebooks y ahora me ha convencido tanto que jamás volveré a comprar un Kindle
Estos tres aspectos lo cierto es que se pierden con el Kindle, pero claro, este dispositivo tiene algo que atrae a las masas —entre las que me incluyo— que es su portabilidad y los precios.
Un libro en físico puede rondar en algunos casos los 30 euros, pero su versión para Kindle se queda por debajo de los 10. Esto es algo fascinante. Ya no solo porque te ahorras bastante, ya que también te permite jugar un poco más con las temáticas sin tanto miedo a haber perdido ese dinero porque al final no te termina de encajar.
Aunque comprarse uno en un inicio puede ser algo caro, lo cierto es que amortizas la inversión en meses. En mi caso tan solo hizo falta una Feria del libro en Madrid para ver que me había gastado solo en un día casi lo que costaba el propio Kindle y eso que solo me hice con tres libros. Luego buscas en Internet y los encuentras hasta un 75% más baratos.
Con todo esto, ¿cuál es mi decisión? Quedarme con ambas versiones. A día de hoy uso el Kindle para probar libros nuevos o best-sellers que quizá no encajan conmigo, pero que todo el mundo recomienda para darles una oportunidad. Por otro lado, si hay un libro de mi autor favorito o uno en concreto que quiero poner en mi librería, me gusta invertir un poco más y hacerme con la versión en físico.
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