Los robots humanoides han dado un paso al frente, y ya son capaces hasta de aprender una serie de movimientos, como el proceso de caminar, y prácticamente por sí solos.

Y es que investigadores de la Universidad de Berkeley han creado un robot humanoide capaz de basarse en técnicas de inteligencia artificial para aprender a caminar por sí solo.

Para que este tipo de robots sean totalmente válidos, deben adaptarse a multitud de superficies y terrenos, por lo que requieren un entrenamiento previo de muchas horas.

Y los investigadores se han basado en el clásico aprendizaje por refuerzo para enseñar al robot cómo adaptarse a los terrenos y necesidades cambiantes.

Para enseñarle a caminar, comenzaron con una simulación ejecutando miles de millones de escenarios en un entorno de simulación de física de alto rendimiento basado en GPU.

Luego este algoritmo del simulador recompensaba las acciones que imitaban el caminar humano y castigaba las acciones que no lo hacía bien.

Cuando se perfeccionó esta tarea, se transfirió a un robot cualquiera humanoide que antes no había sido probado sobre el terreno.

De esta forma, los investigadores implementaron un transformador que aprende de las observaciones y acciones prediciendo las consecuencias de cada una de las acciones realizadas.

De esta forma el robot humanoide fue capaz de adaptar sus acciones a cualquier terreno, aunque no hubiera pasado por el mismo nunca antes.

Lo que sorprendió a los investigadores, es que parece que el robot humanoide aprendió incluso a mover sus brazos a la hora de caminar, es decir, imitando el clásico caminar de los seres humanos para mantener el equilibrio.

Esto es realmente impresionante teniendo en cuenta que este robot humanoide carece de sensores que le ayuden a percibir su entorno.

Si bien el caminar de este robot no es tan refinado con el de los seres humanos y parece incluso entrecortado, el hecho de carecer de sensores, exige a la máquina tener que adaptarse al terreno nada más tocarlo, sin prepararse previamente.

De esta forma, con este algoritmo transferido al robot, es capaz de moverse por todo el campus de la universidad sin aparente ayuda  y es un buen comienzo para facilitar este tipo de entrenamientos a los futuribles robots.