Parrot Jumping Sumo: el drone Yoda
Miguel Morales

Marca | Parrot |
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Modelo | Jumping Sumo |
Tipo | Dron terrestre |
Dimensiones | 143x150x110 mm |
Peso | 182 g |
Análisis en vídeo
Diseño
Aprended de nuestro error: este dron no tiene arriba y abajo. Es inútil que os pongáis a buscar cual es la postura correcta. Al Jumping Sumo le da igual hacia donde lo orientes. Y aunque a nosotros nos gusta usarlo en la postura tradicional, con el logo de Parrot hacia arriba, lo cierto es que no afecta para nada a su funcionamiento.
También puede parecer extraña su parte trasera, en la que no hay ningún tipo de carcasa. Eso sí, en cuanto se prueba se comprende el motivo: esta parte trasera es el propulsor que lanza al drón en saltos de hasta 80 centímetros. Y creednos: hay pocas cosas tan divertidas como plantarle a un compañero de trabajo un dron en su mesa por las buenas.

Los LEDs que hacen las veces de ojos se podrán en verde cuado el robot esté operativo, y su sensibilidad al contacto los teñirá de rojo cuando alguien lo toque o lo levante.
Sin embargo, lo más importante del dron son las ruedas. Para empezar, son tremendamente ligeras. Los neumáticos están fabricados en algún tipo de espuma de la que podemos recoger dos características principales: es tremendamente resistente (no te quedas sin neumáticos por las buenas) y su ligereza ayuda al Jumping Sumo en el tema de los saltos.

Las llantas no se limitan a estar ahí y tener buena pinta, sino que además sirven para regular las ruedas, y lo lejos que queramos que estén del cuerpo del dron. Si están más separadas le dan mayor establidad, pero cuando se coloca en lo que podríamos denominar "modo compacto", dan una sensación de mayor resistencia y precisión para, por ejemplo, saltar.
Manejo y compatibilidad
La verdad es que hay poco que podamos añadir. El Jumping Sumo utiliza sólo las dos ruedas para realizar algunas maniobras realmente asombrosas, y combinando la tracción y del mecanismo de salto, las posibididades son casi ilimitadas. Su velocidad máxima es de 7 Km/h, y los saltos podrán ser de 80 centímentros en horizontal y vertical. Además cuenta con una selección de animaciones que harán que salude, se incline, proteste, gire....
Especialmente, hay que fijarse en el tema de la velocidad de los giros. Es capaz de girar sobre sí mismo en menos de un segundo en ángulos de 90 o de 180 grados. Y para los usuarios que sean tan poco espabilados como nosotros: no, sus giros no están limitados a estos ángulos. Es más, los giros se hacen moviendo el smartphone, y el ángulo se puede regular desde los controles.

Para manejarlo, lo primero que tendréis que hacer es descargar la app de Freeflight 3 de la App Store o de Google Play. Después de abrirla y ponernos al día con las actualizaciones, encenderemos el robot en con botón situado en la parte superior, y nos conectaremos a la red Wifi que generará, fácilmente localizable por tener "Jumping Sumo" en el nombre.
Ahora llega la parte complicada: la app no siempre se da cuenta de que el robot está conectado, así que puede que tengamos que reconectarnos al WiFi Jumping Sumo para que lo termine de reconocer, pero aparte de éste, no hemos encontrado ningún problema de compatibilidad al probarlo con móviles y tablets, Android e iOS.
Cámara y características

El objetivo incorporado en el Jumping Sumo permite tomar capturas de 640x480 píxeles, así como capturar vídeos de 30 FPS. La duración de la batería es algo escasa, ya que está limitada a 20 minutos de duración 5509 mAh. En cualquier caso, es fácil de extraer, y cada batería extra cuesta 13,99 euros en la tienda oficial de Parrot.
Está equipado con WiFi de 2,4 GHz y 5 GHz, LEDs y altavoz. Pesa un total de 182 gramos, y mide (como máximo) 185x150x110 con las ruedas desplegadas. Por desgracia, y a pesar de su aspecto "todoterreno", el Jumping Sumo es un aparato más de interiores: no tiene ningún tipo de resistencia ante el agua y el polvo, así que mucho cuidado.

Conclusión

Sí, puede que no sea sumergible y no se os ocurra exáctamente para qué lo queréis, pero creednos: lo queréis. A medida que vas utilizando el dron se le van encontrando más posibles usos. Personalmente, en la oficina hemos descubierto que el Jumping Sumo puede ejercer cómo:
- Representante
- Mensajero
- Monitorización de productividad (supervisión de redactores)
- Espía cuando se juega a las cartas
- Asustador de perros
...y seguimos investigando.
Nuestra valoración
Lo mejor
- La capacidad de salto
- La facilidad de manejo
- Los giros rápidos
- Las animaciones (saludo, inclinación, giros...)
Lo peor
- La duración de la batería
- El sonido del dron
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