Shure MV7, análisis y opinión del micrófono para podcast

Hace no muchos años, si querías lanzarte a los podcast, era complicado acertar con el equipo porque no había tantas opciones y, además, casi todas eran carísimas. Sí, estaba el mítico y superversátil Blue Yeti, pero no es que sea el mejor micro para hacer podcast o retransmisión de videojuegos, y había opciones como el Shure SM7B, pero ya necesitabas una interfaz de audio y la inversión se disparaba.

Sin embargo, y por suerte, poco a poco han ido apareciendo alternativas relativamente económicas y ahí entra en juego una marca de renombre como Shure que, con este MV7, ha conseguido enamorar a creadores de contenido de todo el mundo. 

Tras llevar unas semanas usándolo como micrófono para el podcast y para mis videoanálisis, te cuento mi opinión del Shure MV7 en este análisis.

Apartados del análisis del Shure MV7:

• Diseño y conectividad: diseño muy cuidado en el que echo en falta un botón de 'mute'
• Prueba de sonido: por algo es tan popular entre los que quieren mejorar su sonido en YouTube y Twitch
• Software: es plug&play, pero también personalizable con su software en Mac, Linux y Windows
• Conclusión: calidad espectacular sin tener que montar un estudio de grabación

Diseño muy cuidado en el que echo en falta un botón de 'mute'

Antes de nada, voy a empezar hablando del diseño. Como te conté en el análisis del NZXT Capsule, este Shure MV7 está hecho para quedar bien en cámara. 

Sí, puede que seas de los que quiere hacer podcast y nada más y te de igual el detalle del diseño, pero si haces directos, podcast en vídeo, streamings o contenidos en los que se te vea, que el micrófono sea atractivo siempre es un extra.

Este modelo lo es, definitivamente, ya que queda muy bien en cámara tanto en un brazo como en un soporte de escritorio. Nosotros tenemos el modelo en color negro, pero también se puede adquirir en color plateado y ambas opciones me parecen muy bonitas.

El soporte en el que lo he tenido es el famoso Pixi de Manfrotto, pero con la personalización de Shure. Es un trípode que me gusta mucho porque parece que no se puede ajustar, pero realmente solo tenemos que pulsar en el logo para que la rotula se mueva y, de esta forma, podamos ajustar alturas o ángulos del micro.

Pero bueno, realmente lo podéis colocar en el trípode que queráis siempre que sea con la rosca de 5'8". Este pack, por cierto, se puede comprar por unos 242 euros en Amazon y me parece una opción muy interesante si no lo vas a poder en un brazo.

Pero bueno, como digo, el micro tiene su propio soporte que te permite cambiar la altura del mismo, algo fundamental en este tipo de micrófonos, y viene con el filtro, o esponja, antipop integrado. 

Lo puedes quitar si quieres, claro, pero te recomiendo que no lo hagas porque es lo que se encarga de mitigar las consonantes explosivas. Eso sí, creo que este elemento podría ser algo mejor porque cumple su función, pero no las mitiga del todo. 

En la base del mismo tenemos las conexiones, y aquí entra en juego parte de la magia de este modelo. Y es que, podemos conectarlo a una mesa o cualquier adaptador para una cámara, por ejemplo, con la conexión XLR, pero también tenemos microUSB. 

Tener las dos opciones está genial y nosotros lo hemos usado solo con el USB, pero aquí me gustaría haber encontrado un USB-C, ya que es mucho más nuevo y se adapta mejor a mi setup, pero bueno. 

En esa base también nos encontramos el jack de 3,5 mm que nos permite monitorizar nuestro audio, pero también deja pasar el audio del Mac para, por ejemplo, escuchar a nuestros compañeros en un podcast.

No necesita potencia extra y si lo conectas a una mesa tampoco es necesario el phantom power o los 48 v, algo que hace que este micro sea muy versátil.

Ahora bien, tenemos unos controles que me gustan, pero a la vez echo en falta un botón físico. Y es que, con una serie de LED naranjas y verdes, el micrófono nos permite ver tanto el volumen de los auriculares como la ganancia. Con un control táctil podemos seleccionar qué queremos subir y con un gesto de 'deslizado' lo ajustamos.

Me parece bien que sea táctil porque es algo que no vas a tocar demasiado, seguramente, y una vez lo configures a tu gusto... te olvidas. Ahora bien, también hay un botón táctil para mutear el micrófono y aquí habría preferido un botón físico que se notara sin tener que mirar para asegurar que realizas bien la pulsación.

Por algo es tan popular entre los que quieren mejorar su sonido en YouTube y Twitch

Pero bueno, si estás leyendo este análisis del Shure MV7 es porque te preocupa el sonido y quieres mejorarlo todo lo posible para tus producciones.

No vamos a entrar en una ficha técnica porque para eso está la página oficial del producto y, a no ser que seas un entendido del audio, esos numeritos te van a dar igual.

Sin embargo, hay cosas que debes saber. La primera es que estamos ante un micrófono unidireccional o cardioide. Esto significa que solo va a captar con la mejor calidad los sonidos que entren justo frente a su cápsula receptora.

Si te mueves durante la grabación, si le hablas desde un lateral, si te alejas mucho cualquier otra posición que no sea la frontal, el micrófono o no te pillará o te captará a un volumen y calidad muy interior.

Lo segundo importante es que es un micrófono dinámico y no de condensador. Soy poseedor de un Blue Yeti y estoy muy contento con él, pero es cierto que para mi trabajo (podcast, narrar vídeos, etc), el Yeti me "viene grande".

Tiene muchas opciones y, además, al ser un micrófono de condensador capta cualquier sonido que haya en la habitación, incluso con la ganancia al mínimo. 

Si estoy grabando un unboxing y quiero el sonido ambiente, el Yeti es bestial (y mi compañero Rubén analizó hace poco el Yeti X), pero para podcast o videoreviews, prefiero otro tipo de micro, el dinámico como este Shure.

Y, por cierto, ya te he dejado algunos vídeos en este análisis en el que uso el Shure para narrar, pero aquí tienes el ejemplo de un streaming:

Me gusta mucho al calidad y calidez del Shure y mis análisis son grabados con la máxima calidad posible en GarageBand para intentar transmitiros el audio más objetivo posible.

Creo que es un micrófono que aporta mucha calidad a tus vídeos o grabaciones, pero que sea dinámico también implica que siempre vas a tener que colocarlo a la misma distancia de tu boca para que la experiencia sea la misma en cada sesión.

Y es que, a medida que te alejes, aunque sea un poco y tenga la ganancia al máximo, el micro no te captará igual que en otro momento en el que estuviste algo más cerca, y eso al final se nota. 

Si estás en un programa de edición, es algo que vas a poder apañar fácilmente porque lo bueno es que, al menos en mis pruebas, aunque te acerques mucho o hables más alto de la cuenta en algunas ocasiones y con la ganancia al máximo, el sonido no se pica.

Pero bueno, es cierto que es "especialito" y debes procurar colocarte siempre igual respecto al micrófono para que la experiencia sonora sea consistente.

Es plug&play, pero también personalizable con su software en Mac, Linux y Windows

Y aunque puedes conectar el micrófono al Mac o PC y automáticamente el sistema lo reconoce (y cuando hablo del sistema me refiero tanto al sistema operativo con aplicaciones como GarageBand o Notas de voz como a apps de streaming como OBS, Streamyard, Zoom o Meet), hay una app por si quieres configurar un poco la experiencia.

El micrófono es plug&play y llega de serie con el ajuste en automático, pero si te descargas el software ShurePlus Motiv, vas a tener acceso a una serie de herramientas para configurar la experiencia y dejarla como tú quieras o necesites.

Vas a poder decirle dónde te colocas (para poder ponerte más lejos del micro o en un lateral y que te capte bien), pero también vas a poder mitigar algunas frecuencias para que el sonido sea más claro dependiendo de tu tono de voz.

Ya digo que yo lo uso sin el software encendido. Simplemente está todo en automático, me grabo en GarageBand y luego edito un poco el sonido para ajustar el volumen... o simplemente hablo en el podcast en directo, pero si quieres personalizar la experiencia, el software no está nada mal.

Te dejo unos ejemplos:

En este audio has podido escuchar mi voz a medida que iba cambiando entre los cuatro tipos de ecualizador, he ido cambiando el compresor y también la ganancia de forma digital en un slider del programa, no en el que tenemos en el propio micrófono.

Como digo, no es un software que considere imprescindible, pero evidentemente no está de más. Y claro, todo esto si lo estás usando por USB, ya que como te he contado tienes la opción de conectar el Shure MV7 por XLR. 

Aquí necesitarás hardware adicional para sacar partido al micrófono, ya que vas a ganar algo más de calidad, pero sobre todo vas a tener más control en entornos más profesionales.

Calidad espectacular sin tener que montar un estudio de grabación

Estos últimos años el podcasting se ha puesto muy de moda y lo bueno es que hay muchísimas herramientas para empezar en esta bonita afición. Que marcas que no son especialistas en audio se hayan metido en el sector ha permitido que las empresas más especialistas saquen productos algo más accesibles, y este Shure MV7 es una muestra.

Se trata de un espectacular micrófono si lo que quieres es capturar tu voz y, además, es muy versátil. Lo vas a poder conectar al ordenador sin instalar ningún programa, también puedes sacarlo a una mesa con la conexión XLR y es relativamente portátil.

Shure MV7

El Shure MV7 es uno de los micrófonos dinámicos más interesantes del momento. Cuenta con muchísima calidad a la hora de capturar tu voz y es perfecto para podcast.

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Tiene un diseño cuidado, los controles son cómodos y la monitorización con auriculares es de lo más útil. Está claro que 240 euros no es la definición de "barato" que muchas veces tenemos, pero lo cierto es que es de los mejores micrófonos de este tipo que puedes comprar ahora mismo y creo que el precio no es, para nada, alto teniendo en cuenta sus características.

Evidentemente hay opciones mejores y más caras tanto por el propio micro como por el resto del hardware necesario para que funcione, pero si no tienes mucha idea ni ganas de invertir en ese equipo, con este micro y un PC vas a subir la calidad de tus contenidos.

Y sí, debería tener USB-C y un botón para mutear, así como una esponja con algo más de calidad para que consonantes como las "b" o las "p" no suenen tanto, pero en lo importante, es espectacular.

Eso sí, debes tener claro que lo quieres para ese uso: podcast o videoreviews con el micro cerca, ya que no tiene ni los modos ni el rango que hacen que propuestas como la de los micros de condensador sean tan versátiles.

Si es tu caso, a por él, ya que no te va a decepcionar gracias al sonido tan cálido que recoge y que tan agradable resulta cuando está en la red.