El despliegue que Xiaomi ha realizado a nivel internacional en 2018 hace que queden pocas gamas, líneas de producto y potenciales clientes por explorar. Son ya decenas de móviles los que tiene a la venta. Hoy traemos el análisis del Xiaomi Mi 8 Lite, uno de los últimos en llegar.

Una vez más, la marca china ha querido ampliar su base de consumidores con un modelo Xiaomi Mi 8 Lite de su buque insignia, el Mi 8. Además, lo hace prácticamente copiando la plantilla en cuanto a hardware de su modelo de más éxito, el Mi A2.

En esta review a fondo del Xiaomi Mi 8 Lite lo hemos sometido a test de todo tipo y contrastado con nuestra experiencia personal tras probar innumerables móviles. ¿Qué tal funciona? ¿Se comporta bien MIUI 10?

Son varios los aspectos a tener en cuenta, aunque sin perder de vista el precio de este teléfono: 329 euros. Es asequible y tiene varios puntos fuertes que van más allá de su potencia, como por ejemplo el diseño.

Sin adelantarnos a los acontecimientos, aquí va lo que nos ha parecido.

Tan bonito como frágil

Si has seguido la evolución reciente del mercado de los smartphones, seguramente habrás notado que pocos terminales por encima de los 200 euros se han escapado a la moda del cristal, y este no iba a ser menos.

El Mi 8 Lite es de cristal por delante y por detrás, algo que lo convierte en tremendamente frágil, como todos los demás móviles con los que comparte diseño. Y eso por no hablar de las huellas que acumula de forma continua con el más leve toque.

En este caso la sensación nada más sostenerlo en la mano es que es un poco más frágil de lo normal, y es que su poco peso (169 gramos) unido a la delgadez de sus 7,5 mm de grosor hace que parezca que se va a romper con nada más que sostenerlo.

Eso sí, tanto los colores con degradado en los que está disponible como los acabados son realmente espectaculares. Para este análisis hemos dispuesto del modelo en azul-púrpura y la verdad es que llama la atención.

Más allá del color y el material, hay que decir que el aspecto es muy monótono. Es un diseño clónico que repite el aspecto que hemos visto en decenas de móviles de este año y otros ejercicios anteriores.

El lector de huellas se sitúa en la parte trasera y la cámara dual en posición horizontal. No arriesga prácticamente en nada, aunque quizás no lo necesite.

IPS LCD: una apuesta sobre seguro

Si nos atenemos a los datos puramente técnicos de la pantalla de este móvil, se podría pensar que es una más de muchas, y es totalmente cierto. Ya hemos visto otros paneles IPS LCD con resolución Full HD+, como es el caso.

No obstante, no se puede decir que esto sea la norma ni mucho menos, ni tampoco despreciar el logro que es tener un pantalla de esta calidad en un móvil de apenas 300 euros. Otros dispositivos mucho más caros se quedan en HD+.

Sí es cierto que destaca en algunos aspectos. Por ejemplo en el brillo, que aquí permite ver a la perfección incluso a plena luz de sol. También hay que mencionar que con 402 puntos por pulgada la nitidez es más que buena en su rango de precios.

Poco más se puede pedir a un móvil de estas características. Realmente cualquier mejora significaría un considerable aumento de precios, y es que los paneles AMOLED -como el del Mi 8 normal- son costosos.

Con un 82,5% de proporción pantalla-cuerpo, se puede decir que exprime bastante bien el frontal. El notch está en el límite entre lo que puede considerarse grande y pequeño: no molesta y te acostumbras rápido.

En líneas generales, es una buena pantalla que no destaca ni por encima ni por debajo de las que puedes conseguir por el mismo dinero. Se beneficia de los avances en paneles para mostrar un brillo y nitidez excelentes, pero no hace destacar especialmente este dispositivo con funcionalidades adicionales, como podría haber sido la compatibilidad HDR.

MIUI 10: seguimos esperando las mejoras prometidas

Pasamos ahora al apartado de software, uno de los más interesantes de este móvil. Es de los primeros que llega al mercado con MIUI 10, la nueva versión de la capa de personalización de Xiaomi.

Está basada en Android 8.1, aunque es probable que haya actualización a Android Pie tarde o temprano. Los principales cambios a mejor se producen en el apartado estético y de atajos, donde recuerda y mucho a iOS 12.

Por ejemplo, para pasar a Modo Silencio o No Molestar tienes que subir y bajar volumen y desde el menú que aparece ir a los Ajustes de Modo, algo muy intuitivo.

Además las notificaciones se muestran en tarjetas al deslizar hacia abajo la barra de notificaciones, al estilo de las que hasta ahora muestra Google Now. A continuación compartimos algunas capturas en las que se puede ver qué tal queda MIUI 10 en el Mi 8 Lite.

Dicho esto y hablando de notificaciones, tenemos que decir que las mejoras prometidas no han llegado: en esta versión de MIUI siguen sin aparecer iconos de notificación en la barra de notificaciones. Puedes tener un correo electrónico y no lo sabrás hasta que deslices hacia abajo.

Es algo verdaderamente exasperante que supuestamente se iba a solucionar, pero no lo ha hecho y echa por tierra buena parte de los avances de MIUI en esta edición.

Por otra parte, hay que decir que los extras que Xiaomi añade a Android son bastante útiles. Hablamos de aspectos como las apps duales para tener más de una sesión iniciada en el mismo móvil dentro de apps como Instagram o WhatsApp.

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Además continúa su apuesta por las aplicaciones de optimización de la memoria, la seguridad y el almacenamiento, que están ahí aunque no las utilices, al igual que un puñado de apps preinstaladas que seguramente no uses. Es el precio a pagar cuando compras un móvil Xiaomi con MIUI, de ahí que muchos prefieran Android One.

Habla muy bien del trabajo de optimización de software de Xiaomi que la fluidez sea excelente en todo momento y que poco a poco su capa avance a mejor. Con algunos problemas, como por ejemplo el abuso de aplicaciones de fabricante, pero a mejor definitivamente. Seguiremos esperando para ver si finalmente se pulen estas imperfecciones en MIUI.

Xiaomi Mi A2, edición MIUI

El titular de este apartado es bastante explicativo por sí mismo: la configuración interna del Xiaomi Mi 8 Lite es idéntica a la del Mi A2: 4 GB de memoria RAM y procesador Snapdragon 660, un set que ha demostrado que puede rendir de forma excelente.

¿Por qué arriesgarse con otros procesadores? La marca china, al igual que sus usuarios, confía ciegamente en Snapdragon 660, y hacen bien. En este análisis del Xiaomi Mi 8 Lite hemos podido comprobar una vez más que este chip rinde bien y es bastante eficiente.

A nivel de rendimiento se le pueden poner pocas o ninguna pega a este móvil. Nada de lag, nada de ralentizaciones y respuesta instantánea en todas y cada una de las aplicaciones, justo como ocurre con el Mi A2 pero con MIUI como capa de personalización.

Es un buen chip que además también es compatible con carga rápida y con WiFi AC, por citar dos ejemplos.

Sí se le puede poner alguna pequeña pega a su GPU, Adreno 512. Pega por llamarlo de alguna forma: simplemente no llega al rendimiento de lo que ofrecen procesadores más avanzados, es decir, no permite jugar con los gráficos al máximo a juegos como PUBG Mobile, aunque sí con calidad media con FPS más que decentes.

Esto mismo le ocurre al Mi A2, uno de los móviles más vendidos del año, al igual que a todos los smartphones que equipan este procesador.

Es una muy buena noticia que por apenas 300 euros o incluso menos puedas tener un móvil que no tiene problemas y hace que el SO funcione como la seda. Es el principal avance desde hace algunos años y algo que el usuario debería valorar.

Desbloqueo facial, esta vez sin trucos

En anteriores análisis de móviles Xiaomi nos hemos encontrado con algunos problemas a la hora de configurar el desbloqueo facial: está, pero para usarlo debes modificar la región del teléfono a algún país asiático.

En este caso no es así, sino que simplemente tienes que añadir un PIN y posteriormente registrar tu rostro. La fiabilidad y la velocidad son excelentes y harán que te acostumbres rápido a usarlo.

Durante este análisis del Xiaomi Mi 8 Lite no hemos tenido que recurrir al lector de huellas en prácticamente ninguna ocasión, algo que no muchos en esta franja de precios pueden decir.

El lector de huellas también funciona a la perfección y está localizado en la zona trasera, sobresaliendo apenas un milímetro sobre el cristal

Por supuesto, ya hay móviles que incorporan lector de huellas en pantalla, pero ninguno por debajo de los 500 euros. Además es una tecnología en desarrollo que aún no es tan fiable ni rápida como el lector de huellas capacitivo.

Quick Charge 3.0 para maquillar una autonomía algo corta

¿Es buena la batería del Mi 8 Lite? ¿Puedes fiarte de ella si sales de casa por la mañana y no te llevas el cargador? Es la pregunta clave con este y otros móviles, aunque no deja de ser difícil darle una respuesta rotunda.

Para empezar, acotemos datos: son 3.350 mAh de capacidad lo que tiene la batería de este móvil. Es suficiente pero no se puede hablar de una superbatería, como también hemos podido comprobar.

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Su autonomía suele moverse en torno al día de uso, dependiendo de las apps que más horas de pantalla consuman. Si por ejemplo juegas o consultas redes sociales de forma intensiva, seguramente llegues al final del día con algunos apuros, no así si le das un uso más conservador.

El sabor de boca es agridulce, ya que es una autonomía algo corta para lo que comienza a estilarse en el sector. Sin ir más lejos el Huawei Mate 20 Lite o el Honor 8X estiran hasta día y medio sus baterías sin problemas. Ambos equipan Kirin 710, el chip que hace la competencia a este Snapdragon 660.

Xiaomi podría y debería haberse esforzado más en este sentido, sobre el añadiendo un poco más de capacidad y quizás mejorando la optimización del software.

El punto positivo es que cuenta con carga rápida Quick Charge 3.0, cuyo cargador viene incluido en la caja. Eso significa que en poco más de hora y media puedes cargar tu móvil completamente (104 minutos para ser más exacto).

De haber tenido un poco más de duración de batería, hablaríamos de un smartphone mucho más competitivo. Es un tropiezo que se une a la fragilidad para poner piedras en el camino del éxito.

Sorprendentemente afinado modo retrato

A lo largo de 2018 ha quedado claro que el modo retrato es una de las características que no pueden faltar en ningún móvil. Con una buena cámara, unos buenos ajustes y algo de pericia por parte del fotógrafo pueden salir fotos verdaderamente espectacular.

No obstante, el último de los requisitos no hay que darlo por hecho, y aun así siempre es bueno tener una cámara capaz de suplir tus carencias como fotógrafo. Por eso cada vez más marcas han apostado por el Modo IA, que automáticamente selecciona una escena perfecta y modifica los parámetros para realzar las fotos.

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Galería de fotos realizadas con la cámara del Xiaomi Mi 8 Lite (15 imágenes)

Por desgracia algunas marcas han incorporado una IA que modifica en demasía estos parámetros, haciendo que las fotos luzcan completamente irreales. No es el caso de Xiaomi, y es que en este Mi 8 Lite y otros móviles que hemos podido probar la IA es "de baja intensidad".

Además de seleccionar automáticamente la escena, hace pocas cosas más. De todas formas siempre tienes la opción de habilitar desde los Ajustes el doble guardado de imagen original y retocada con IA, aunque insistimos en que la diferencia es muy pequeña.

Si quieres ver todas las fotos que hemos hecho en resolución original, puedes hacerlo desde esta carpeta de Google Drive. Recordemos que este dispositivo equipa una cámara dual trasera de 12 + 5 MP con apertura f/1.9, mientras que la frontal es de 24 MP.

Dicho esto, pasamos a mencionar el otro modo que este año ha triunfado: el retrato con modo bookeh, pensado para desenfocar el fondo y dejar enfocado el objeto en primer plano, casi siempre una persona.

Ni que decir tiene que hemos realizado análisis de decenas de móviles este año y probado otros tantos más. No todos lo hacen bien y de hecho la mayoría tienen problemas, especialmente al resolver los contornos de objetos complicados como plantas o las gafas en un selfie.

En este análisis de la cámara del Xiaomi Mi 8 Lite nos hemos fijado en ello con minuciosidad, y los resultados son sorprendentes. Este smartphone resuelve mejor estas situaciones que otros que supuestamente son mejores, al menos por precio. 

En las fotografías que hemos podido tomar con modo retrato, tanto de selfie como de otros objetos, queda bien delimitado el objeto a enfocar, incluso si hay gafas o pelos de por medio. Si se amplía la imagen se observa que el contorno está perfectamente definido sobre el fondo que sí ha sido desenfocado.

De noche sufre bastante más para mantener la nitidez, aunque por otra parte es normal en un móvil de esta gama. Una cámara con buen modo nocturno requiere de una apertura bastante más amplia que el f/2.0 de su cámara frontal, además de ciertos retoques a nivel de software, aunque eso no significa que los selfies y fotos nocturnas del Mi 8 Lite no sean más que aceptables.

Colores vivos y sobre todo reales

Uno de los problemas que son comunes en la fotografía móvil es que a la hora de plasmar los colores y las texturas, estos pierden mucho. Ya sea por exceso de celo a la hora de realzarlos o por todo lo contrario. El caso es que llama poderosamente la atención cuando una marca hace un buen trabajo en este sentido.

Pues bien, Xiaomi lo ha hecho en este terminal. De las muchas fotos que hemos tomado con su cámara, podemos decir que nos ha dejado satisfechos la calidad de las instantáneas, sobre todo los tonos. No sobresatura las imágenes ni las deja "apagadas" y con falta de color, sino que los toma tal y como son.

Para ser un móvil de apenas 300 euros son bastante buenas, aunque tenemos que volver a un punto que hemos mencionado anteriormente: las fotos nocturnas.

Aunque la IA asigna un modo nocturno cuando detecta una escena así, no tiene nada que ver con el modo que puede ofrecer el Xiaomi Mi 8 Pro o el Oppo RX17 Pro, mucho más trabajado a nivel de software y con una apertura de lente mucho mayor, como corresponde a su rango de precios.

La nitidez deja bastante que desear y se observa a simple vista que la calidad de la imagen cae en picado en cuanto la luz deja de ser intensa.

Realmente no se le puede exigir mucho más al Mi 8 Lite. Está a la altura de otros de su segmento en fotos nocturnas, aunque seguramente les supera en escenas con buena luz.

Si lo que buscas es un móvil para hacer fotos decentes sin manejar el modo manual y tener que ajustar valores, esta es una opción buena. Sin duda de las mejores que puedes encontrar en la gama media. Además lo combina con otras características interesantes.

Es curioso y esperanzador el avance que hemos visto últimamente en la franja que va desde los 200 a los 400 euros, y no sólo por la IA o el modo retrato, sino por la facilidad de uso de las cámaras y en definitiva por la mejora de la calidad media de las fotografías.

Además, cabe destacar que su HDR actúa de forma acertada a la hora de ampliar el rango dinámico de una imagen. Otros móviles lo aplican de forma discretísima, pero aquí no, y además se agradece.

En la imagen que adjuntamos abajo se puede ver la comparativa de una misma foto con y sin HDR. Se puede ver que hay zonas en las que el contraste entre luz y oscuridad es muy elevado sin HDR, y eso hace que apenas se vea. En cambio cuando se aplica, la imagen cambia completamente.

Quizás la cámara no es el principal punto fuerte que hemos encontrado en esta review del Xiaomi Mi 8 Lite, pero nuestra opinión se ve reforzada positivamente después de probarla en varias situaciones.

Habrá que estar atentos a la evolución a lo largo de 2019, aunque si decides comprar este terminal, puedes estar seguro de que no se quedará obsoleto o "viejo" de aquí a un año.

Sin NFC, la única pega en conectividad

La conectividad móvil es otro de los apartado que ha mejorado mucho gracias a los procesadores de última y penúltima generación. Hoy es posible comprar por relativamente poco dinero un móvil y que tenga WiFi AC, Bluetooth 5.0 y USB de Tipo C.

Sin embargo, siempre hay que renunciar a algo para mantener los costes bajos, y habitualmente es el chip NFC el sacrificado. Es lo que ocurre con este móvil: olvídate de pagos móviles con el Mi 8 Lite.

No tiene NFC, y eso es un inconveniente si te has acostumbrado a andar sin tarjeta por el supermercado, pero poco más. Esta tecnología crece, pero no se puede decir que a día de hoy se deba descartar la compra de un móvil por no tener etiqueta NFC.

En este caso sólo hemos echado de menos esta característica, la radio FM y los infrarrojos, aunque no son ausencia que consideremos como diferenciales en esta franja de precios, como por ejemplo sí lo sería no tener WiFi.

Un móvil equilibrado que apunta muy alto

Si el Xiaomi Mi A2 ha triunfado en el mercado español, lo mismo puede ocurrir con este Xiaomi Mi 8 Lite, que tras el análisis nos ha dejado un muy buen sabor de boca. Tiene carencias, por supuesto, pero ninguna que sea insalvable.

Sin NFC se puede vivir, igual que con un diseño frágil si usas una funda. A cambio, por 329 euros te llevas un móvil con un rendimiento excelente, carga rápida, pantalla Full HD y bastante bonito.

Además, como también hemos podido comprobar, su cámara es bastante buena dentro de su segmento, con algunos problemas con fotos nocturnas pero con muy buenos resultados en líneas generales.

No cabe duda de que Xiaomi ha dado con la tecla de lo que debe ofrecer en la gama media: precios bajos, rendimiento equilibrado y diseños lo más atractivos posibles.