El avance que desafía la gravedad y cambiará las reglas de la levitación magnética
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- Una investigación utiliza la tecnología maglev de levitación magnética con objetos y promete revolucionar esta ciencia.
- El sistema aún tiene que hacer frente a algunos obstáculos: las fuerzas externas y la energía cinética.
La levitación magnética se presenta como una solución a la movilidad en todo el mundo. Algunas empresas como Hyperloop de Elon Musk pueden alcanzar 600 km/h y un prototipo de China promete velocidades de hasta 1.000 km/h. Este sistema es también más silencioso y eficiente.
La tecnología, conocida como maglev, utiliza imanes superconductores a temperaturas extremadamente bajas en una tubería de vacío. Esto permite que los trenes se deslicen sin fricción y contaminación acústica. El resultado es un medio de transporte nuevo que supera la velocidad de los aviones.
La ciencia ha enfocado la levitación magnética hacia la industria del transporte, pero el potencial de esta tecnología va mucho más allá. Un estudio publicado en Applied Physics Letters ha explicado cómo podrían aprovechar el uso de imanes para hacer que los objetos leviten en el aire durante un largo periodo de tiempo.
Un equipo de investigación del Instituto de Ciencia y Tecnología de Okinawa está trabajando en un sistema similar a los trenes maglev que permita levitar a una placa de grafito. La novedad respecto a otras técnicas es que en este caso no hay ninguna fuente de energía externa. Para ello utilizan materiales diamagnéticos que generan un campo magnético y alejan a los objetos de los imanes.
Los científicos han creado una plataforma donde pueda flotar y girar sin perder energía. El experimento evidencia que una vez que se coloque el objeto y se aplique un leve movimiento, las fuerzas magnéticas lo mantendrán en el aire con una oscilación estable. La plataforma no tiene fricción ni necesita una fuente de energía.
La tecnología de levitación magnética de objetos es prometedora, pero tendrá que superar algunos obstáculos antes de convertirse en una realidad. El principal problema es la amortiguación de los remolinos: las fuerzas externas interfieren en el sistema y el objeto oscilante puede perder energía con el tiempo.
La energía cinética en la plataforma de levitación magnética es el segundo problema. El movimiento provoca que la base capte información poco fiable del objeto. Los investigadores están buscando nuevas fórmulas para que la plataforma actúe como sensor incluso si un objeto se mueve sobre ella.
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