¿Alguna vez has sentido que el sonido de tu teléfono móvil te genera una sensación de molestia, ansiedad? Sí, antes incluso de saber de quién se trata. Bueno, has de conocer que no eres el único. De hecho, muchísima gente asocia el sonido al que tiene vinculado su teléfono con una profunda incomodidad. No pongas tu canción favorita, o podría dejar de serlo en poco tiempo. 

Esta especie de patología asociada, lógicamente, a los tiempos modernos, suele definirse de maneras diferentes, pero no deja de ser algo así como sentir ansiedad a consecuencia del uso del teléfono móvil. Si en especial asocias este a tu trabajo (a uno que no te vuelve especialmente loco) o a ciertas obligaciones, peor aún. Sin embargo, ¿qué dice la ciencia al respecto?

El móvil provoca ansiedad, y la ciencia lo corrobora

Está claro que los teléfonos móviles proporcionan muchas ventajas: estar conectado, poder hablar con quien sea en todo momento, navegar por Internet desde cualquier parte, utilizas aplicaciones, y todo ese tipo de cosas. Entonces, ¿por qué a mucha gente le produce ansiedad cada vez que suena el móvil? Lo cierto es que cada día parece más habitual. 

No lo decimos nosotros, sino diversos estudios que han querido profundizar acerca del tema. Para empezar, algunos portales especializados como el británico Rehabs UK hablan de que las adicciones a Internet y al móvil ya superan a las de todas las habituales drogas convencionales juntas. Y también en Gran Bretaña se publicó en HRReview que más de la mitad de sus trabajadores sentían “miedo al móvil”.

Desde Australia, por ejemplo, llegan también datos reveladores. Según un estudio realizado por Commbank, un 90% de los jóvenes a los que entrevistaron confesaron que su teléfono móvil les provocaba ansiedad de una forma u otra. Esa es la razón por la que, de un tiempo a esta parte, muchos de ellos optan por tener el teléfono en silencio o, directamente, en modo No molestar.

Esta, por lo tanto, podría ser una de las razones (o la principal) por la que cada día es menos habitual que un joven responda a tu llamada. Al menos a la primera. Esta costumbre de dejar el móvil en No molestar también tiene otros beneficios: menos interrupciones, menos pérdidas de tiempo, menos estrés y todo lo asociado, en definitiva, con la desconexión digital. 

¿Cómo evitar que el móvil te genere ansiedad?

Es obvio que el teléfono móvil no es más que una herramienta. El uso que le des al mismo depende únicamente de ti, sobre todo si no te dejas llevar por las tendencias o corrientes sociales (lo cual en ocasiones no es sencillo). Un primer paso para evitar la ansiedad puede pasar por silenciar las notificaciones, los mensajes o restringir el tiempo que usas el móvil. 

Sin embargo, al final casi todo se reduce a lo mismo: ¿qué pasa si dejo de atender al teléfono? ¿Qué me estoy perdiendo realmente? La mayoría de las veces, y exceptuando los casos de ciertos profesionales, la respuesta a ambas preguntas es la misma: absolutamente nada. 

Cuanto antes se tenga claro eso, más fácil resultará a cualquiera evitar la ansiedad.