La consola de Microsoft, la Xbox Series X, tiene preparado un rediseño para el año 2024, según se ha revelado en unos documentos oficiales filtrados. El nuevo modelo tendrá mejor conectividad, más eficiencia y más capacidad de almacenamiento, y prescindirá de la unidad Blu-ray. 

Además, la compañía también tiene previsto lanzar un nuevo mando que será modular y tendrá una respuesta háptica mejorada. La Xbox Series X se lanzó en noviembre de 2020 como la consola más potente del mercado, con un procesador AMD Zen 2 de ocho núcleos a 3,8 GHz, una GPU AMD RDNA 2 de 12 teraflops y 16 GB de memoria GDDR6.

Según los documentos filtrados, el nombre en clave del nuevo modelo es Brooklyn y tendrá 2 TB de almacenamiento interno, el doble que la versión actual. Además, al no tener lector de disco, será más ligera y compacta, y tendrá un puerto USB-C frontal para facilitar la conexión de dispositivos externos.

El aspecto de la nueva Xbox Series X también cambiará radicalmente, pasando de tener una forma rectangular a una forma cilíndrica. El diseño recuerda al de la Mac Pro de Apple, pero con un color negro mate y el logo de Xbox en la parte superior. Según Microsoft, este diseño permitirá una mejor disipación del calor y una mayor eficiencia energética.

El nuevo mando de la Xbox Series X será modular y háptico

Otra de las novedades que acompañará al rediseño de la Xbox Series X será el lanzamiento de un nuevo mando que promete revolucionar la forma de jugar. El mando tendrá un diseño modular que permitirá al usuario personalizarlo según sus preferencias y necesidades.

El mando contará con diferentes piezas intercambiables, como los gatillos, los botones, los joysticks y el panel táctil. Así, el usuario podrá adaptar el mando a su estilo de juego, ya sea para juegos de acción, de carreras, de deportes o de aventuras. Además, el mando tendrá una batería recargable integrada que ofrecerá una mayor autonomía.

Pero lo más destacado del nuevo mando será su sistema de respuesta háptica, que hará que el usuario sienta las vibraciones y los efectos del juego en sus manos. El mando tendrá sensores que detectarán el movimiento y la presión que ejerce el usuario sobre los controles, y le devolverán una retroalimentación acorde al contexto del juego.

De esta forma, el usuario podrá sentir el impacto de las balas, el rugido del motor, el golpeo del balón o el roce del viento. Según Microsoft, este sistema hará que la experiencia de juego sea más inmersiva y realista.

La nueva Xbox Series X se reinventará en 2024 con estas novedades que pretenden situarla en lo más alto del mercado de las consolas. Aunque todavía no hay una fecha exacta para su lanzamiento, se espera que sea entre septiembre y noviembre de ese año, coincidiendo con la campaña navideña. El precio oficial tampoco se ha confirmado, pero se estima que rondará los 499 dólares.