Cómo salir de las garras de Google y no morir en el intento

Google forma parte del día a día de millones de personas. Abandonar algunas empresas como Coca-Cola es tan simple como buscar los productos de la compañía, dejar de consumirlos y encontrar unos sustitutos. En el caso de Google es algo más complejo en aspectos de conectividad o privacidad.

Google ha vivido grandes cambios desde 2012 con las nuevas políticas de privacidad, lo que ha animado a muchos de sus usuarios a abandonar el buscador. Este proceso es lento y puede llegar a ser frustrante en algunos puntos.

"La gente lo abandona antes de intentarlo porque cree que es un proyecto demasiado grande", ha explicado Janet Vertesi, profesora de sociología en la Universidad de Princeton para Life Hacker. El primer paso será buscar alternativas antes de abandonar Google por completo.

Puedes probar algunos navegadores como Brave, DuckDuckGo o Safari durante unas semanas. Una vez que hayas encontrado un sustituto, puedes realizar una transición progresiva. El primer paso es cambiar Google Chrome, luego puedes cambiar cada producto de la compañía por aplicaciones de otra empresa.

No te limites a cambiarte a otra empresa

La opción más sencilla para acabar con Google es pasarse a una empresa que ofrezca un buscador y un conjunto de aplicaciones similares. Vertesi desaconseja esta opción, sería cambiar el problema de una compañía a otra.

La profesora de sociología prefiere utilizar aplicaciones de diferentes empresas. Algunas recomendaciones que pueden sustituir a las apps de Google son Proton y Zoho para el correo electrónico, Dropbox y Resilo Sync para el almacenamiento de archivos o CryptPad para la edición de textos en línea. 

La combinación de diferentes herramientas con distintos propietarios permite distribuir los datos en diferentes lugares aumentando la seguridad en caso de ciberataque. Esta práctica también permite elegir las aplicaciones que mejor se ajustan a trabajos específicos.

¿Puedes dejar Chrome y seguir usando aplicaciones de Google? Algunas herramientas como Google Docs son un estándar en el ámbito académico y laboral y compartir archivos con otros usuarios es más sencillo que nunca. Vertesi asegura que puedes mantener algunas aplicaciones esenciales.

La experta ha recomendado utilizar las aplicaciones de Google desde un navegador diferente. La privacidad de los usuarios aumentará al evitar que la compañía pueda rastrear toda tu actividad en línea.

¿Es necesario cambiar el sistema operativo?

La mayoría de los dispositivos están pensados para trabajar con una cuenta de Google, especialmente los móviles Android. La solución en los casos en los que sea obligatorio vincularlo con Google es utilizar un sistema operativo de código abierto como /e/OS. 

Este software es relativamente sencillo de instalar para los teléfonos Pixel y no tiene ninguna influencia de Google y sus aplicaciones propias. Los iPhone también son una alternativa gracias a su mayor privacidad y la menor dependencia de este navegador, aunque lo harán de Safari y su propio ecosistema.

Los Chromebooks lo tienen más complicado y tendrán que buscar alternativas como distribuciones de Linux como ElementaryOS. "No creo que Windows sea una opción viable en la actualidad cuando se trata de privacidad", ha asegurado Janet Vertesi.

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Etiquetas: Chrome, Navegadores, aplicación