En un reciente evento —'Google Cloud Next'—, la compañía ha dado a conocer su última y muy inteligente iniciativa: una serie de API —interfaces de programación de aplicaciones— centradas en diferentes aspectos como la radiación solar, la calidad del aire o los niveles de polen que busca revolucionar la forma en que se interactúa con estos datos tan valiosos y difíciles de calcular.

Esta nueva propuesta busca utilizar el enorme potencial de la inteligencia artificial para proporcionar información en tiempo real sobre estos aspectos tan cruciales para todo tipo de personas y, sobre todo, empresas.

De esta manera, Google busca ofrecer a los desarrolladores herramientas con gran valor para impulsar la sostenibilidad y ayudar a personas, ciudades y empresas a reducir sus emisiones de carbono en 1 gigatonelada (GtC) anual para el año 2030.

En palabras de Yael Maguire, vicepresidente de Geo Sostenibilidad de Google, este enfoque hacia la sostenibilidad y la entrega de este tipo de información no solo beneficiará a las empresas, sino que también buscan que otras organizaciones sigan el mismo camino. 

Un futuro sostenible: ¿cómo reducen las principales empresas tecnológicas su huella de carbono?

"Ahora estamos ampliando nuestras ofertas de sostenibilidad con nuevos productos en Google Maps Platform. Estos productos aplican inteligencia artificial y aprendizaje automático, junto con imágenes aéreas y datos ambientales, para proporcionar información actualizada sobre el potencial solar, la calidad del aire y los niveles de polen. Con esta tecnología, los desarrolladores, empresas y organizaciones pueden crear herramientas que mapeen y mitiguen el impacto ambiental", explica Google en su blog.

'Solar', 'Polen' y 'Calidad del aire': 3 nuevas API de Google para mejorar la calidad de vida de todos y sacar tajada

La API Solar, por ejemplo, es una clara expansión y mejora del exitoso Proyecto Techo Solar de Google, que vio la luz en 2015. Mediante el uso de mapas actualizados y recursos informáticos mejorados, esta abarcará 320 millones de edificios en 40 países, incluyendo Estados Unidos, Francia y Japón. 

Google ha desarrollado una inteligencia artificial avanzada que puede analizar fotografías aéreas o satelitales para determinar con precisión los ángulos y las pendientes de un techo. 

Al combinar estos datos con información sobre sombras de árboles y patrones climáticos históricos, se puede ofrecer a las empresas y propietarios una evaluación detallada del potencial de los paneles solares sin necesidad de una visita física al lugar.

La capa de calidad del aire, otro componente clave, ya está disponible en más de 100 países. Utilizando estaciones de monitoreo gubernamentales, datos meteorológicos, sensores y satélites, la capa Air Quality ofrece un índice local y universal de la calidad del aire. 

Además, predice los niveles de contaminación basados en las condiciones del tráfico y el volumen de vehículos, lo que resulta invaluable para una variedad de industrias como la salud, el transporte y la automoción.

Google no se detiene aquí y está expandiendo su API de seguimiento de polen para ayudar a las personas con alergias estacionales. Con el aumento de las temperaturas y las emisiones de gases de efecto invernadero, el polen se ha vuelto un problema creciente para las personas alérgicas. 

La API de polen monitoreará la liberación estacional de polen de árboles y otras plantas en más de 65 países, dando a los usuarios datos detallados sobre sus niveles y mapas de calor para identificar las áreas más afectadas.

Este enfoque de Google no solo tiene el potencial de revolucionar la sostenibilidad y la calidad del aire, sino que también marca una nueva forma de generar enormes ingresos gracias a su valiosa información. 

La compañía planea vender acceso a estas API a empresas del sector de energías renovables y otras. Se espera que esta estrategia genere ingresos considerables, con estimaciones que oscilan entre 90 y 100 millones de dólares en el primer año después del lanzamiento.

Este paso no solo demuestra la visión de Google para un futuro más sostenible, sino también su capacidad para innovar y liderar en un campo donde la tecnología y el impacto ambiental están cada vez más relacionados y esta compañía sabe perfectamente dónde poner el foco y realizar una gestión que favorezca a todos.