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La increíble historia de cómo un mosquito ayudó a detener a un ladrón de coches

La increíble historia de cómo un mosquito en el parabrisas ayudó a detener a un ladrón de coches
  • Un robo de coches en Finlandia, sin huellas ni testigos, estaba a punto de darse por cerrado.
  • Pero entonces, un inspector de policía halló un mosquito muerto en la tapicería.

La mayoría de los delitos se producen porque alguien se cree más listo que la policía. Y la mayoría de las personas que acaban en la cárcel, suelen ser detenidas por un aspecto que no habían tenido en cuenta. Es lo que le pasó a un ladrón de coches en Finlandia, detenido gracias a... un mosquito muerto.

La historia se remonta a 2008, cuando la policía de Seinaejoki, en Finlandia, encontró un coche robado abandonado. Tras un análisis exhaustivo, no hallaron huellas ni testigos. Es un delito común que se repite con frecuencia en todo el mundo.

La policía estaba a punto de dar el caso por cerrado, hasta que el inspector de policía Sakari Palomaeki se fijó en un detalle que había pasado desapercibido para el resto: en la tapicería del vehículo, había un diminuto mosquito muerto.

Un mosquito, el único "testigo" de un ladrón de coches

Tras observar detenidamente al bicho, el inspector de policía se dio cuenta de que tenía el estómago hinchado, una señal de que había picado a alguien. Y entonces se le ocurrió una idea: ¿y si la persona a la que ha picado, es el ladrón de coches?

Envió el mosquito a las oficinas centrales, en Helsinki, en donde extrajeron la sangre que tenía en su estómago, y analizaron el ADN. Lo cotejaron con una base de datos de ADN de delincuentes, y entonces saltó la sorpresa: la sangre pertenecía a un ladrón local de  Seinaejoki, que tenía antecedentes por robo de coches.

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Sin perder tiempo, acudieron a detener al sospechoso. Confesó que, efectivamente, había estado en el coche. Pero era un tipo listo, un delincuente con experiencia, porque argumentó que no había robado el coche, sino que le habían recogido haciendo autostop.

Por desgracia, no conocemos el final de la historia. No sabemos si la policía encontró más pruebas para poder incriminar al sospechoso. Pero lo cierto es que el caso sentó las bases para el análisis del ADN de la sangre de una picadura de mosquito hallado en las escenas del crimen.

Hoy en día, en las academias de policía, los inspectores son instruidos para buscar mosquitos con posibles restos de ADN, y se acepta como una prueba más frente a un tribunal.

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Etiquetas: Viral, Curiosidades