El proceso para ordenar una casa requiere de cierta practicidad para decidir lo que guardas y lo que debes tirar. La típica excusa del "por si acaso" se puede convertir en el peor enemigo, incluso para las personas más metódicas y organizadas.

Las técnicas de organización más populares se centran en visualizar el espacio disponible y decidir un orden de prioridad. El proceso puede acabar con algunos productos en la basura, pero los expertos aseguran que primero es necesario formularse algunas preguntas. 

La regla del 20/20 es cada vez más popular. Este método consiste en plantearse dos preguntas sencillas antes de tirar un objeto para evitar los "por si acaso": ¿puedo reemplazar este artículo por menos de 20 euros? y ¿puedo reemplazarlo en menos de 20 minutos?

Si la respuesta a ambas preguntas es “sí”, el objeto puede acabar en la basura y las consecuencias en caso de arrepentirse son relativamente bajas, según Lifehacker. Esta técnica puede funcionar para objetos que se utilizan con poca frecuencia y ocupan más espacio del que deberían en comparación con los beneficios que aportan.

La regla 20/20 se puede complementar con otras técnicas

La regla 20/20 es un simple ejemplo de cómo organizar los espacios en base a las necesidades que aparecen a lo largo de la vida. El truco se puede complementar con preguntas como “si necesitase este artículo, ¿dónde lo buscaría?”. 

Si no recuerdas el lugar en el que guardaste el objeto por última vez, probablemente no lo necesites. Otro truco similar para ordenar la casa y tirar los objetos innecesarios es la regla de los 21 días. Los productos que no se han utilizado en ese plazo de tiempo tienen un enorme potencial para acabar en la basura. 

Las técnicas son innumerables, pero las preguntas siempre deben ser de respuestas simples con un sí o no. Esto evita caer en sentimentalismos, arrepentimientos o la típica percepción de falsa necesidad. Si en algún momento realmente necesitas lo que has tirado, podrás permitirte gastas 20 euros en un artículo nuevo.