Si ya tenías un smartphone hace 8 años o más, seguro que recuerdas que la mayoría de móviles se podían controlar con una mano gracias a que tenían tamaños de pantalla manejables. Hoy, como te habrás dado cuenta, las pantallas de los móviles son más grandes. Mucho más grandes.

Pero al mismo tiempo, si preguntas a conocidos y familiares, seguro que te encuentras con una gran cantidad de personas, muy convencidas, que te dicen que nunca se comprarían un smartphone tan grande como el tuyo y que prefieren móviles pequeños.

Por eso lanzo la duda: ¿cuál es la prevalencia en el mercado actual de los móviles de pantallas grandes y cómo ha ido evolucionando con respecto a los años anteriores?

Computer Hoy recoge en este artículo los datos más recientes de los analistas para que conozcas cuál es la aceptación actual de las pantallas grandes y cómo está disparada recientemente.

Antes de nada: ¿qué es una pantalla grande?

Lo cierto es que la idea de cuándo empezamos a considerar que una pantalla de un móvil es grande ha ido evolucionando con el tiempo y, sobre todo, con el lanzamiento de los nuevos modelos.

Hoy en día podríamos decir que un móvil con pantalla de más de 6,5 pulgadas es considerado grande, ya que el estándar en la mayor parte de los nuevos lanzamientos son las pantallas de 6,6 pulgadas.

El panorama se complica a partir de 2019 cuando aparecen los primeros móviles plegables, con cada vez más modelos de más marcas disponibles, pero este artículo se centrará en los móviles tradicionales, que aún suponen la inmensa mayoría –en el mundo se  vendieron 268 millones de móviles en el segundo trimestre de 2023 y solo 2,1 millones fueron plegables, según Counterpoint.

Y aquí otro pequeño disclaimer: pantallas más grandes no significa necesariamente móviles más grandes, ya que con el tiempo las marcas han ido reduciendo a la mínima expresión los marcos de sus terminales para que las pantallas crezcan pero las dimensiones se mantengan.

2023 es el año del sorpasso de las pantallas de 6,5 pulgadas o más

Este año 2023 marca un hito importante en cuanto a tamaños de pantallas, ya que por primera vez las pantallas grandes con más de 6,5 pulgadas de superficie superan a las más pequeñas.

Según los datos de la firma de análisis Counterpoint Research, el mes de julio de 2023 se vendieron un 51% de móviles con pantallas de 6,5 pulgadas o más, superando así a las variantes más compactas.

Esto supone un crecimiento enorme con respecto al estado del mercado de móviles hace solo 3 años, con un aumento del 285% frente a julio de 2020, en el que el porcentaje de móviles grandes apenas superaba el 10%.

Esta tendencia no solo ha llegado para quedarse sino que en los meses posteriores se está consolidando aún más.

Según la misma firma de análisis, la aceptación de las pantallas de 6,5 pulgadas o más había subido hasta el 54% en el mes de agosto de 2023, con un boom del 246% respecto a tan solo 3 años antes.

Esta tendencia internacional también se produce en España, como muestran los datos que el analista Canalys ha compartido con Computer Hoy.

En el mundo solo el 2% de los móviles que se vendían en 2018 tenían una pantalla pero este dato aumentó rápidamente hasta el 44% en 2020 y hasta el 76% en el primer semestre de 2023. Le siguen los móviles de entre 6 y 6,4 pulgadas, con el 21%, mientras que el 3% se reparte entre terminales más pequeños.

En España también partíamos de apenas un 2% de móviles con más de 6,5 pulgadas en 2018, pero el formato de móviles con pantalla grande rápidamente nos convenció y de hecho entre 2020 y 2022 España estaba por encima de la media en este aspecto.

En la actualidad, los españoles prefieren móviles de entre 6,5 y 6,9 pulgadas en el 73% de las ventas de smartphones nuevos, seguidos de los paneles de 6 a 6,4 pulgadas, con el 22% del mercado, según las estimaciones del analista.

¿Qué consecuencias tiene esto para el usuario y para la industria?

El aumento del tamaño de las pantallas tiene varias consecuencias a nivel global para los consumidores de tecnología, algunas más positivas que otras.

En el lado bueno, las pantallas grandes han dejado de ser un elemento que sube el precio de los móviles y que queda relegado a los modelos de gama alta, y ahora los usuarios con presupuestos ajustados que quieran uno, incluso por debajo de los 200 euros, no tendrán demasiados problemas para encontrarlo.

Y esto ha requerido que los procesos de fabricación se adapten a la nueva realidad.

"Los avances en la cadena de suministro han permitido la producción eficiente en cuanto a costes de pantallas grandes y de gran calidad incluso en dispositivos más asequibles", como asegura Runar Bjørhovde, analista de Canalys.

Gracias a las pantallas más grandes, las personas pueden hacer más cosas desde el móvil y sin depender de otros dispositivos.

"Los consumidores, acostumbrados ahora a realizar una amplia gama de tareas en sus teléfonos, desde tareas profesionales hasta entretenimiento, gravitan naturalmente hacia pantallas más grandes", según destaca Boyce Fan, vicepresidente de investigación de TrendForce.

Estos móviles con pantalla más grande son el reflejo de unos consumidores que han cambiado de hábitos digitales.

"En la última década se han producido grandes cambios de comportamiento que han impulsado el cambio a pantallas más grandes. El mayor interés por el streaming, las videollamadas, la calidad de la cámara y la navegación han favorecido las pantallas más grandes, mientras que antes primaban las llamadas y los mensajes de texto. Este cambio se aceleró durante la pandemia por el trabajo a distancia y las necesidades tecnológicas", coincide el analista de Canalys.

En el lado malo, los usuarios que buscan móviles puedan manejar con una sola mano cada vez tienen más dificultades para comprar uno porque las excepciones son cada vez más escasas. Es el caso de los iPhone 15 estándar y iPhone 15 Pro, Samsung Galaxy S23 base, Xiaomi 13 u Oppo Reno 10. 

"Hace solo 5 años, los teléfonos con pantallas de menos de 6 pulgadas suponían más de la mitad del mercado, pero en la actualidad se han convertido en un producto de nicho", según Bjørhovde.

Pese a ello, los expertos coinciden en que los móviles compactos aún siguen siendo una opción y no creen que vayan a desaparecer en el corto plazo.

"La cuota de mercado de los teléfonos compactos, con pantallas de unas 6 pulgadas o menos, está disminuyendo, pero no están al borde de la extinción. Un segmento de consumidores sigue valorando la portabilidad y los diseños ligeros, lo que garantiza una demanda sostenida, aunque menor, de smartphones compactos en un futuro previsible", apunta Boyce Fan.

¿Seguirán creciendo aún más las pantallas?

Ante esta situación, la duda pasa por si el tamaño de las pantallas ha llegado ya su máximo o si aún tiene margen para crecer en los smartphones de los próximos años.

Los expertos coinciden en que hay señales claras de que los móviles no pueden crecer ya mucho más.

"La tendencia hacia pantallas cada vez más grandes está cerca de llegar a su límite, y el ritmo del crecimiento ya está descendiendo", señala el analista de TrendForce.

Esto es algo que apoyan los datos de Canalys en España, donde entre 2021 y 2023 el crecimiento se ha estancado entre el 70 y el 73% de prevalencia de los paneles de más de 6,5 pulgadas, en contraste con el rápido aumento de los años anteriores.

Además de la preferencia de los usuarios, otro aspecto está determinando que los móviles hayan dejado de crecer: el tamaño de los bolsillos de los pantalones, que no ha cambiado.

"Apenas ha habido móviles de formato tradicional de más de 7 pulgadas y esto se debe al equilibrio entre tamaño de pantalla y la portabilidad. El desafío de llevar un móvil de más de 18 centímetros en diagonal en el bolsillo limitará el crecimiento en el futuro", afirma el experto de Canalys.

Y la otra limitación que se encuentra la industria es el tamaño de las manos de las personas, que hace imposible manejar terminales por encima de las 7 pulgadas con comodidad.

"6,8 pulgadas es el máximo de los móviles con formato tradicional. El tamaño de las manos humanas es la principal limitación, ya que es difícil sujetar y utilizar un teléfono con la pantalla demasiado grande", como afirma Karn Chauhan, analista senior de Counterpoint Research.

En su lugar, el futuro de los usuarios que deseen pantallas aún más grandes solo puede avanzar en una dirección: la de los móviles plegables, en especial los plegables tipo libro, que proporcionan una pantalla interior de dimensiones comparables a la de una tablet pequeña pero que se puede llevar en el bolsillo.

Pero ojo, porque la fiebre actual por las pantallas grandes no tiene visos de desaparecer sino todo lo contrario, por lo que si eres defensor de los formatos compactos tienes razones para estar preocupado en el medio largo plazo.

"Gracias al aumento del consumo de medios en nuestros dispositivos, ya sean fotos o películas en streaming, e incluso al impulso de las redes sociales en nuestra vida cotidiana, la importancia de pantallas más grandes y más almacenamiento seguirá creciendo", como predice Nabila Popal, directora de investigación de IDC especializada en móviles.