Cómo luchar contra la ola de calor si no tienes aire acondicionado
De nuevo nos vemos envueltos en una ola de calor sin precedentes y eso que el verano aún no ha dado comienzo. Muchos de nosotros carecemos de aire acondicionado en nuestras casas, pero no por eso tenemos que pasar más calor. Te dejamos algunos consejos para evitarlo.
Ya lo están alertando en todos los medios, nos encontramos ante la segunda ola de calor. Lo más preocupante de todo es qué va a ocurrir en agosto si muchas comunidades han experimentado 43º un 13 de junio.
Si a esto le sumamos que muchos hogares no tienen aire acondicionado, o si lo tienen hacen un uso muy limitado debido a los altos precios de la luz, esto podría significar pasarlo realmente mal.
Sin embargo, no hay por qué. Hay muchas formas inteligentes de evitar tener que poner el aire acondicionado o reducir al mínimo su uso y si no tienes uno en casa, que no cunda el pánico, te dejamos algunos sencillos trucos para mantenerte fresco, así como tu casa.
Utiliza ventiladores
Es una forma más low cost de mantener algo fresca tu casa. Es cierto que solo pone en circulación el aire de tu hogar pero es innegable que funciona. Sin embargo, cuidado. Al no enfriar nuestra casa podemos cometer el error de dejarlo enchufado todo el día y la noche, con el gasto que esto puede suponer.
Para una mejor eficiencia, mantén las puertas abiertas para que así el ventilador expulse poco a poco el aire caliente de la habitación.
Usa las ventanas y persianas a tu favor
En las noches más frías, abre todas las ventanas, generando así la mayor circulación de aire posible. Cuando salga el sol, cierra todas las puertas y ventanas, asegurándote de cerrar también las cortinas y persianas, para mantener el interior fresco el mayor tiempo posible. Vas a vivir en una caverna sí, pero sin calor.
Cuando el aire exterior se enfríe a una temperatura inferior a la del interior (normalmente al atardecer o por la noche), abre las ventanas y ahí vuelve a encender los ventiladores.
Elimina las fuentes de calor adicionales
Las bombillas pueden generar un calor innecesario, al igual que los ordenadores o los electrodomésticos que se dejan en funcionamiento.
Si es posible, come alimentos que no requieran el uso del horno o la cocina para su preparación y así te quitas unos cuantos grados del medio.
Toma alimentos y bebidas frías
No ingieras comidas copiosas y ricas en proteínas que pueden aumentar el calor metabólico y calentar el cuerpo. Además, cuanto más grasa sea, más va a costar a nuestro cuerpo digerirla, aumentando nuestra temperatura corporal. Un buen gazpacho o salmorejo o una ensalada de pasta, son (entre otras muchas) las mejores y más saludables comidas y cenas que puedes hacer durante la ola de calor.
Otra de las principales formas de mantenerse en pie durante una ola de calor es estar hidratado y beber líquidos frescos con frecuencia. Evita por encima de todo las bebidas alcohólicas y la cafeína, ya que ambas sustancias pueden actuar como diuréticos y favorecer la deshidratación.
Dúchate o báñate con agua fría
El primer consejo si sentimos mucho calor es meterse a la ducha. Eso sí, mucho cuidado con las temperaturas. Lo mejor para bajar la temperatura corporal es que esta sea más o menos fría, pero tengamos precaución con las hidrocuciones (cortes de digestión), debido al cambio brusco de temperatura de nuestro interior con el exterior.
No te metas de cuerpo entero a una ducha con agua muy fría. Procura hacerlo poco a poco y remoja primero algunas zonas sensibles como las muñecas, el estómago o la nuca para que así nuestro sistema comience a reconocer la nueva temperatura.
Sobre todo: hidrátate
Es un consejo básico, pero el error número uno que comete la gente cuando las temperaturas son altas es beber muy poca agua.
Recuerda mantener un nivel adecuado de hidratación, lo que significa que tendrás que consumir más agua de la que sueles cuando hace calor. Si está sudando mucho, también tendrás que reponer los electrolitos comiendo algo extra con el agua o bebiendo bebidas de sustitución de electrolitos especialmente formuladas.
La sed es el primer síntoma de deshidratación y debes beber cantidades suficientes de líquidos antes de sentir sed para prevenir la deshidratación. Mucho cuidado con esto.
Las mascotas también sufren
Por último, recuerda que los animales domésticos también sufren cuando sube la temperatura. Enfriar a los animales (perros, conejos, gatos) dándoles un baño o una ducha fresca ayudará a mantener su temperatura corporal baja.
Una toalla fría sobre el suelo, llevarle al de la cocina que sabemos que está algo más fresco para que se tumbe, una toalla o un paño frío colocado sobre la piel junto a un ventilador también ayudarán a enfriar al animal. Asegúrate también de que tenga mucha agua fresca para beber.
Redactora de Tecnología
Redactora de Tecnología, especializada en inteligencia artificial y ciberseguridad.
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