El furor que ha generado esta nueva compra por parte del magante es innegable. El 25 de abril Elon Musk se hizo con el 100% de la empresa al pagar 44.000 millones de dólares.

Ya lo publicamos recientemente, así como el porqué de ese cambio de rumbo tan rápido y brusco, ya que recordemos que poco antes se hizo con el 9,2% de la empresa. Elon Musk ya ha cumplido su sueño de comprar Twitter, y todo el mundo ahora está deseando ver lo que va a hacer.

Ahora bien, entre sus objetivos de cambio en la plataforma se encuentra el de acabar con la censura, sin embargo, sus mayores desafíos pueden surgir en el Pacífico.

Tengamos en cuenta que Asia alberga a más de la mitad de la población mundial, es la mayor oportunidad de crecimiento de Twitter y posiblemente un reto mucho más complicado que cualquier otro que se pueda encontrar. 

China modera su restrictiva normativa y vuelve a aprobar licencias de videojuegos

Y es que se le vienen una cantidad ingente de regulaciones extrañas, establecidas por gobiernos a veces autoritarios y que se van a elevar al máximo exponente al haber aumentado tan drásticamente el número de usuarios que esperar grandes cambios en Twitter.

Y es que, sólo las cifras sugieren que los mayores dolores de cabeza de Musk están en el extranjero. Según su último informe anual, los usuarios activos diarios monetizables de Twitter ascendieron a 179 millones a nivel internacional, superando los 38 millones de Estados Unidos en 2021.

La plataforma siempre ha tratado de respetar las regulaciones de cada país y, por ejemplo, en China estaba prohibido. Sin embargo, al ahora estar en manos solo de Elon Musk, este asumirá personalmente la responsabilidad de navegar por esas aguas y veremos cómo acaba.

"Asia tiene el potencial de hacer o deshacer el nuevo Twitter", dijo JJ Rose, colaborador del Instituto Lowy, un centro de estudios no partidista de Australia. "Dependerá de cómo lo aborde, si puede aprovecharlo para sus objetivos de libertad de expresión".

China lanza su alternativa a StarLink, internet por satélite de hasta 40 Gbps

Además, aquí entran otras cuestiones que pueden poner en un compromiso al magnate: China es tremendamente importante para Tesla (la fuente clave de la riqueza de Musk).

"Una de las pruebas más duras del compromiso declarado de Musk con la expansión de la libertad de expresión en Twitter consistirá en saber si resiste la presión de Pekín para encubrir las críticas y los desafíos a China en la plataforma", dijo Suzanne Nossel, directora general del grupo de defensa sin ánimo de lucro PEN America. 

Con todo esto sobre la mesa, toca esperar a ver cómo consigue ir resolviendo estos frentes y a su vez mantener sus promesas con respecto a Twitter.