Logo Computerhoy.com

El Concorde de la NASA listo para volar en 2024: viajar de Londres a Nueva York en 90 minutos

Avión supersónico

Depositphotos

El X59 alcanza velocidades de hasta 4.900 kilómetros por hora y es probado en rutas transoceánicas. La NASA estudia la regulación y probará el avión supersónico para comprobar problemas derivados con el sonido en 2024.

La NASA está explorando un ambicioso proyecto que podría cambiar la forma en que concebimos los viajes transatlánticos. El objetivo es desarrollar vuelos comerciales de alta velocidad que permitan viajar entre Londres y Nueva York en tan solo una hora y media, gracias a un avión capaz de alcanzar velocidades de hasta cuatro veces la velocidad del sonido. Esto supone casi la mitad del mejor tiempo registrado por el mítico avión supersónico Condorde.

De acuerdo con la información proporcionada por la NASA en colaboración con la industria aeroespacial, se está evaluando la viabilidad de un avión de pasajeros supersónico capaz de volar a velocidades que van desde Mach 2 hasta Mach 4, lo que equivaldría a velocidades entre 2.470 y 4.900 kilómetros por hora al nivel del mar.

En comparación, los aviones comerciales más grandes en la actualidad vuelan a una velocidad de aproximadamente 965 kilómetros por hora, alrededor del 80% de la velocidad del sonido. Los estudios realizados por la NASA han concluido que existen posibles mercados de pasajeros en alrededor de 50 rutas establecidas que conectan ciudades. 

Dado que Estados Unidos y otras naciones prohíben los vuelos supersónicos sobre tierra, los resultados de estos estudios se enfocaron en viajes transoceánicos, incluyendo rutas de alto volumen sobre el Atlántico Norte y el Pacífico. 

Se probará en 2024 para comprobar la reacción de población al sonido en Estados Unidos

El proyecto Quesst de la NASA, con su aeronave supersónica silenciosa X-59, tiene como objetivo proporcionar datos a los reguladores que contribuyan a cambiar las normativas de vuelo supersónico sobre tierra. A partir de 2024, sobrevolará determinadas comunidades estadounidenses para recoger datos de los residentes que respondan al estampido sónico del X-59.

Lori Ozoroski, directora del Proyecto de Tecnología Comercial Supersónica de la NASA, mencionó: "Realizamos estudios conceptuales similares hace más de una década a Mach 1.6-1.8, y esos mapas de ruta resultantes ayudaron a guiar los esfuerzos de investigación de la NASA desde entonces, incluyendo los que llevaron al X-59". 

Hyperloop

Ozoroski añadió que estos nuevos estudios actualizarán esos enfoques en mapas de ruta tecnológicos e identificarán necesidades adicionales de investigación para un rango de alta velocidad más amplio.

El Programa de Vehículos Aéreos Avanzados (AAVP) de la NASA está avanzando a la siguiente fase de la investigación de viajes a alta velocidad, que incluye la adjudicación de dos contratos de 12 meses a empresas para desarrollar diseños conceptuales y mapas de ruta tecnológicos.

Estos mapas de ruta explorarán las posibilidades de viajes aéreos, identificarán riesgos y desafíos, y señalarán las tecnologías necesarias para hacer realidad los viajes a Mach 2 y más allá. Boeing lidera el primer equipo, con socios como Exosonic, GE Aerospace, el Georgia Tech Aerospace Systems Design Laboratory, Rolls-Royce North American Technologies, entre otros. 

El segundo equipo es dirigido por Northrop Grumman Aeronautics Systems, con socios como Blue Ridge Research and Consulting, Boom Supersonic y Rolls-Royce North American Technologies. Cada equipo desarrollará elementos de mapas de ruta que incluyan estructura de la aeronave, energía, propulsión, manejo térmico y materiales compuestos capaces de resistir velocidades supersónicas elevadas.

¿Y si la NASA hubiera encontrado y matado accidentalmente vida en Marte en los 70?

Mary Jo Long-Davis, gerente del Proyecto de Tecnología Hipersónica de la NASA, resaltó la importancia de estos conceptos y mapas de ruta tecnológicos en manos de las empresas: "Somos conscientes de la necesidad de tener en cuenta la seguridad, eficiencia, consideraciones económicas y sociales. Es importante innovar de manera responsable para beneficiar a los viajeros sin dañar el medioambiente".

Una vez completada la fase de participación de la industria, la NASA y sus socios de la industria y la academia decidirán si continúan la investigación con sus propias inversiones. Sin duda, este proyecto podría representar un hito en la forma en que concebimos los viajes intercontinentales en avión.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Computerhoy.

Etiquetas: Viajes, NASA, Aviones