Debo reconocer que tengo un punto débil en el mundo de la tecnología y esos son los smartwatch. Los quiero probar todos y me los quiero quedar todos, pero sé que eso es imposible. Creo que un reloj que es capaz de sacar tantísima información sobre mi día a día con unos pocos sensores, es cuanto menos, revolucionario.

He podido visitar uno de los laboratorios que Oppo tiene en Shenzhen dedicado en exclusiva al deporte. Se llama Oppo Health Lab y es donde los ingenieros de Oppo se juntan con deportistas de todo tipo y niveles, además de empleados para crear las mediciones que acabarán sentado las bases de los algoritmos que los relojes usan para indicar nuestro estado físico.

Oppo Health Lab se parece más un gimnasio que a un laboratorio. Una gran sala llena de máquinas de entreno como, como elípticas, máquinas de remo, bicicletas estáticas o cintas de correr, entre otra equipación deportiva. Además, cuentan con varias máquinas de medición especiales, como un escáner corporal 3D y una máquina que indica, con gran precisión, tu composición corporal.

Este laboratorio se utiliza para hacer algunas de las mediciones esenciales para que luego los relojes de Oppo, como el Oppo Watch 4 Pro (que no está a la venta en Españ) o la Oppo Band, puedan crear una estimación de tus calorías quemadas cuando te pones a hacer ejercicio. Desde montar en bici, hacer remo, levantar pesas o correr.

A nivel técnico a cada sujeto se le realizan unas pruebas, como la medición corporal y 3D y mientras realiza una prueba de esfuerzo, como correr, mide hasta el oxígeno que aspira. También se le toma otras medidas como el pulso o la variación del oxígeno en sangre. Miles de pruebas se utilizan para crear algoritmos que, según tu sexo, edad y peso, crean una estimación de tu actividad diaria.

Otra de las pruebas más curiosas es la que se realiza a los runners. Con una serie de sensores en las piernas, pueden medir con gran calidad de detalle la posición a la hora de correr. Esto ayuda a crear un sistema que detecta la forma correcta a la hora de correr y el equilibrio de la persona que usa un reloj de Oppo.

Es decir, con el estudio de cientos de personas que corren bien, también de los que corren mal, te puede decir qué estás haciendo mal a la hora de entrenar para evitar molestias o posibles lesiones.

Todas estas horas de entrenos, de sudor (y lágrimas) se recoge para entrenar algoritmos y modelos que se utilizarán en los relojes.

De esta forma, cuando te compras un smartwatch de Oppo y te lo pones en la muñeca, esa información que parece aleatoria de calorías quemadas o métricas de entrenamiento no salen de la nada, todo tiene una base y se recopila en este laboratorio.

Como curiosidad, Oppo es una de las pocas marcas que fabrica smartwatch deportivos con mediciones especiales de tenis y de bádminton, algo bastante raro en este tipo de productos.

Oppo, al igual que otros fabricantes, también colabora en grandes estudios de enfermedades, especialmente las cardiovasculares y del sueño. La empresa colabora actualmente con cuatro hospitales repartidos por China utilizando sus relojes que llevan personas con problemas de salud, en busca de grandes bancos de datos para su investigación.