Pese a la gran fama que Nothing se ha conseguido labrar en poco tiempo, no siempre las cosas salen como uno quiere y, en muchas ocasiones, empresas con un gran futuro como esta se encuentran con algún que otro bache por el camino.

Pese a haber conseguido lanzar al mercado grandes e innovadores dispositivos como los auriculares Ear 1 y Ear 2, así como los móviles Nothing Phone (1) y Nothing Phone (2), la compañía quiso embarcarse en un nuevo proyecto que nunca llegó a ver la luz. 

Se trata del Nothing Power 1, un cargador portátil 3 en 1 que prometía ser un accesorio versátil y sobre todo potente. Este dispositivo tenía tres características principales que lo hacían destacar:

1. Carga inalámbrica: ofrecía la comodidad de la carga inalámbrica, permitiendo a los usuarios cargar sus dispositivos sin cables.
2. Carga rápida por cable: la versatilidad de este cargador no se detenía en la carga inalámbrica, ya que también estaba equipado con una carga por cable rápida de 65 W. Esto permitía cargar dispositivos como ordenadores y móviles de forma bastante rápida.
3. Banco de energía: además de sus funciones de carga, el Power 1 también funcionaba como un banco de energía, dando a los usuarios la posibilidad de llevar algo más de energía adicional para cualquier situación de emergencia.

Nothing Power 1, el cargador portátil 3 en 1 que prometía ser toda una revolución, pero se quedó en el cajón de los olvidados

Diseñado con la estética tan característica de los productos Nothing, el Power 1 no solo prometía ser funcional sino también elegante. Su tamaño realmente pequeño permitía llevarlo incluso en el bolsillo de cualquier pantalón, lo que lo hacía aún más atractivo.

Carl Pei, director ejecutivo y fundador de Nothing, compartió que la idea del Power 1 surgió cuando la compañía tenía un equipo más pequeño y recursos limitados. Fue concebido como un producto que podría haber tenido éxito en 2021, pero las ambiciones de Nothing se habían expandido demasiado para 2023.

Además, el camino del Power 1 tuvo bastantes problemas que, en última instancia, llevaron a su cancelación. Carl Pei reveló que uno de los mayores obstáculos fue negociar precios competitivos con los proveedores para intentar que el producto fuese asequible para los consumidores. 

Sin embargo, el mayor obstáculo vino en forma de rendimiento del producto. Para ser un éxito, un producto como el Power 1 debía funcionar de manera eficiente y segura. Pei explicó que se enfrentaron a problemas relacionados con la gestión térmica del dispositivo. La velocidad de carga que buscaban generaba un sobrecalentamiento que ponía en peligro la durabilidad y la seguridad del producto.

Por último, el Power 1 no superó las pruebas de caída de Nothing, lo que llevó a la conclusión de que se necesitaba un rediseño. No obstante, llevarlo a cabo no era una opción viable desde el punto de vista de la inversión y el tiempo. Esto marcó el triste final del camino del Nothing Power 1.