La salud y el bienestar físico son dos sectores al alza, y eso explica el auténtico boom que viven desde hace años las pulseras de actividad o los relojes deportivos, y es que quien más y quien menos quiere saber cuántos pasos da, cuál es su frecuencia cardíaca o qué tal duerme.

Hay multitud de gadgets que mide de todo, algunos bastante particulares, como una colchoneta que analiza sueño y hasta detecta apnea del sueño, pero en un plano más común están las básculas inteligentes, entre las que hay un modelo que para mí siempre ha sido una referencia, sobre todo ahora que lo he podido probar: la Garmin Index S2.

La clave de este modelo está en la marca, Garmin, que indudablemente es una referencia para todo el que hace deporte, la que más relojes deportivos vende –con permiso de Apple, si consideramos como deportivos sus Watch– y quizás la que mejor lo hace, aunque eso ya es totalmente subjetivo.

Garmin Index S2

Tanto si eres un deportista que está entrenando como si simplemente intentas mantener un peso saludable, esta báscula puede ofrecerte una visión más global de tu salud

• Amazon 160,8€
• tradeINN

El caso es que, teniendo un reloj de Garmin, el Swim 2, y estando acostumbrado a manejar su aplicación Connect, vincular ambos dispositivos para medir ejercicio y todo lo que su báscula me pueda decir es una decisión lógica, así que me animé a probarla a fondo.

El resultado ha sido muy bueno, y ahora tengo una nueva necesidad en casa, un nuevo gadget que sumar a la colección, aunque sé que ir añadiendo más dispositivos Garmin al repertorio va a aumentar mi dependencia de esta marca, pero si cubre mis necesidades, pues bienvenida sea.

No obstante, hay que aclarar que las características de la Garmin Index S2 son las de una báscula inteligente, y ahí lo que hay que valorar es la precisión y los parámetros que mide en comparación con otros modelos. No deja de ser una báscula, así que no hay que pedirle más de lo que puede dar.

Voy a hacer un repaso a lo que más me ha gustado y lo que menos de mi experiencia con la báscula de Garmin, así como de qué puede realmente medir y qué tal lo hace.

1. Una medición más realista que otros modelos low cost
2. La configuración multiusuario existe pero debe mejorar
3. Diseño robusto, aunque con un pero para los maniáticos de la limpieza
4. Hasta nueve meses de autonomía
5. El precio es elevado, pero es lo que cuesta tener datos fiables

Seis datos físicos, incluida la grasa corporal, y se acerca bastante

Cuando te subes a una báscula, lo menos que se le puede pedir es que el peso que te da sea preciso, y en el caso de la Index S2 confirmo que es así. He comparado sus mediciones en este sentido con la báscula de la farmacia que tengo al lado de casa y con la Xiaomi Mi Body Composition Scale 2, que seguramente sea el modelo más vendido desde hace algún tiempo.

Tengo que decir que me ha sorprendido mucho la gran diferencia que hay en medición de peso –de peso, ojo, lo más básico– entre la báscula de Xiaomi y la de Garmin, y es que esta última ha llegado a dar 1,6 kg de peso menos.

Es una diferencia notabilísima, y hablo de dos mediciones tomadas con segundos de diferencia, pero es la de Garmin la que prácticamente clava la medida con la báscula de la farmacia, aunque hay que tener en cuenta que en la farmacia me he pesado con ropa, obviamente.

Estos son los datos físicos que cuantifica la Garmin Index S2:

• Peso
• Índice de masa corporal
• Grasa corporal
• Masa muscular
• Masa ósea
• Agua corporal

Hay modelos que tiran de algoritmo para dar metabolismo basal o porcentaje de proteína, aunque es de poco probable tirando a imposible que sea calculen ambos datos de forma precisa desde una simple báscula.

La grasa corporal: útil si no te obsesionas demasiado

La Index S2 también da más peso a la masa ósea, y eso hace que el porcentaje de grasa corporal sea menor. En este caso, tengo que guiarme a medias por mi intuición: un 2% de grasa corporal menos por parte de Garmin se ajusta más a la sensación que tengo, y aun así me sigue pareciendo mucho.

He podido probar algunos modelos más en los últimos años y siempre es el mismo problema: hace cinco años que pasé por última vez por una máquina de bioimpedancia profesional y en aquel entonces tenía un 5% de grasa corporal, que es un porcentaje bajísimo. Desde entonces no considero que mi composición corporal haya variado demasiado, así que un 17% de grasa sigue siendo un porcentaje elevado.

Dicho esto, hay que tomar todos estos datos como meramente orientativos: ¿es realmente relevante tener un 17 o un 7% de grasa corporal? En mi opinión, no demasiado, así que la clave está en seguir la tendencia, si es al alza o a la baja. Por supuesto, me gustaría que una báscula inteligente "de andar por casa" midiera este dato de forma mucho más precisa, pero no hablamos de un dispositivo profesional, que puede llegar a costar miles de euros.

Por lo tanto, no hay que obsesionarse con ninguno de estos parámetros. La Index S2 es más precisa en mi opinión y comparándola con otras según mi experiencia, pero a pesar de eso lo importante, insisto, es seguir tus tendencias.

Fácil de configurar, pero con problemas cuando hay varios usuarios

Poner en marcha el dispositivo es bastante sencillo, como es en realidad hacerlo con otros relojes y gadgets de Garmin. Solo hay que encenderla e ir a la aplicación Garmin Connect a añadir un nuevo dispositivo.

Automáticamente es detectada y de ahí no hay más que vincularla al WiFi para que quede automáticamente conectada a tu cuenta, a donde subirá de forma instantánea cada medición cuando te peses.

Eso sí, dichas mediciones no aparecen en la pantalla principal cuando se toman, como por ejemplo si aparece cada actividad deportiva registrada. Tienes que ir a Estadísticas de forma física > Peso para ver los datos, de la forma más minimalista posible.

También se muestran en la propia pantalla de la báscula una vez que finaliza la medición, aunque lo hace con una serie de iconos que quizás no son tan fáciles de identificar como "grasa" o "masa muscular" como en Garmin piensan.

Más de un usuario pero pasando por Connect sí o sí

Hasta 16 usuarios distintos pueden usar la báscula Garmin Index S2 y mantener su vinculación a la misma a la vez, al menos sobre el papel. En teoría es fácil ya que solo tienes que ir añadiendo usuarios desde la cuenta principal del propietario.

A la hora de la verdad, es bastante más complicado y Garmin debería trabajar seriamente para mejorar este aspecto. Cada nuevo usuario debe tener sí o sí cuenta en Garmin Connect, y  los que no tienen relojes de la marca no suelen tenerla.

No acaba ahí la cosa porque el propietario tiene que añadir a esa persona a sus contactos de Connect y luego enviar la invitación. Al final son muchos los pasos que hay que dar para hacer una simple medición.

Cuando lo hayas hecho la báscula detecta automáticamente cuál de los usuarios es el que se está pesando, en base a las métricas tomadas en anteriores ocasiones, pero aquí he encontrado otro problema: al menos una vez me asignó una medición de otra persona, mi pareja, en este caso. Y ni siquiera nos parecemos porque ella pesa unos 7 kg menos, así que es un error de bulto.

Por suerte solo tienes que ir a Connect y borrar esa medición.

Superficie de cristal resistente, un imán de huellas

Paradójicamente, independientemente de lo que peses tú o no, la Index S2 sí que es pesada. Pesa 2 kg, que es bastante y lo vas a notar en cuanto la saques de la caja, pero eso no es algo malo.

Está hecha con materiales robustos, preparados para aguantar que le echen encima hasta 181,4 kg, que es más de lo que otros modelos pueden ofrecer, aunque para la mayoría de usuarios es un límite que les queda lejos, pero siempre está bien ampliar el horizonte para dar cabida a la mayor cantidad de usuarios posible.

Eso sí, a diferencia de las básculas que tienen la zona superior de plástico, esta lo tiene de cristal. No es un problema en sí, porque es cristal resistente a golpes y arañazos, pero es que es todo un imán de huellas y de suciedad. Al final, lo ideal es pesarte descalzo si quieres que te mida todos los datos físicos, y eso significa que vas a tener que pasarle un trapo cada vez que te peses.

Es un problema menor, solo reseñable para los más detallistas y amantes de la pulcritud, pero se menciona por si acaso.

Si no tienes una superficie sólida, no hay problemas

Cuando te pesas, tienes que hacerlo situando la báscula –cualquier báscula– en una superficie sólida, con los cuatro puntos de apoyo totalmente inmóviles.

Como Garmin trabaja en muchos países, incluidos algunos amantes de las moquetas por toda la casa como Reino Unido, han pensado en ellos también, y en la caja vienen cuatro alzadores que se pueden poner en sus patas para darle la estabilidad necesaria sobre ese tipo de superficies.

Es un detalle por su parte, igual que lo es que se incluyan las pilas necesarias para ponerla en marcha.

Nueve meses de batería, eso sí, con pilas

La Garmin Index S2 funciona a pilas. Sí, es algo que a estas alturas de 2024 a mucha gente le puede sonar raro, pero así es. Usa cuatro pilas AAA que vienen incluidas en el paquete, aunque las que vienen no son recargables.

En teoría y según la marca, puede llegar a nueve meses de autonomía con ellas, aunque entiendo que esto depende de la cantidad de mediciones que tenga que tomar, el número de usuarios y también el tiempo que pase en reposo.

En cualquier caso, a diferencia de un móvil o un smartwatch, no es un dispositivo que vayas a usar constantemente, así que no tiene por qué ser un detalle de capital importancia.

El precio es elevado, aunque en línea con las que son sus competidoras reales

A pesar de los puntuales problemas de stock que tiene la Garmin Index S2, su precio suele moverse en el entorno de los 120 euros cuando está disponible, y eso hace que se sitúe muy por encima de los modelos low cost más vendidos, que siempre cuestan 20-30 euros.

Dicho esto, si quieres datos reales y precisos, hay que pagarlos. Por eso un Garmin Venu 3 cuesta casi 500 euros y otros modelos no llegan ni a 50, y hay muchísimas diferencias.

Las verdaderas rivales de la Index S2 con básculas como la de Withings, otra marca top del sector, que vende su modelo incluso más caro que el de Garmin, por hacernos una idea de cuál es la banda de precios.