No podemos ignorar que Google Maps se posiciona como una de las aplicaciones de mapas más completas y funcionales en la actualidad. 

Sus características, que ofrecen notificaciones sobre las rutas más eficientes para evitar atascos, informan sobre el precio de los peajes y alertan acerca de los radares de la DGT, la convierten indiscutiblemente en la mejor opción disponible.

Sin embargo, las virtudes de esta plataforma van más allá de estas funciones conocidas. Dentro de su repertorio, existen opciones menos divulgadas que pueden resultar invaluables en diversas situaciones. 

El cambio de Google Maps que ha enfurecido a la mayoría de conductores

Una de estas características poco conocidas es la capacidad de planificar rutas a pie que evitan las molestas escaleras. 

Esta función no solo se traduce en comodidad para ti, evitando fatigas innecesarias, sino que también demuestra ser una herramienta esencial para aquellos que dependen de sillas de ruedas y buscan una movilidad más accesible.

Así puedes evitar las escaleras en tu ruta a pie en Google Maps 

Cabe señalar que esta funcionalidad de Google Maps está pensada principalmente para personas con movilidad reducida, pero también para gente que lleva consigo cualquier carga pesada. 

Para evitar las escaleras en tus rutas a pie, sigue estos pasos: 

• Abre Google Maps en tu móvil, ya sea Android o iOS y busca el destino que quieres llegar.
• En rutas selecciona A pie y después en Opciones de trayecto. 
• Activa la función Accesible par sillas de ruedas, en el cual evitarás las escaleras y al mismo tiempo se prioriza los ascensores. 

Es importante mencionar que si eres un usuario que utilizas el modo transporte público periódicamente y has activado previamente la opción "accesible para sillas de ruedas", no te preocupes. Se aplicará directamente cuando cambies al modo de ruta a pie, sin necesidad de seleccionarla nuevamente. 

Una vez que hayas activado este truco oculto de Google Maps, la aplicación te mostrará las rutas a pie más accesibles para ti. Estas priorizarán los ascensores, así como las rampas en lugar de las escaleras. 

La funcionalidad tiene una serie de beneficios para las personas con movilidad reducida, como mayor seguridad y comodidad al desplazarse, mayor autonomía, libertad para planificar los desplazamientos, además de una mayor inclusión en la sociedad.