Viajar está de moda. Y cuanto más distante y exótico sea el destino, casi que mejor. Solo hace faltar echar un vistazo al éxito que tienen países como Tailandia en la gente española para darse cuenta de ello. Pero este tipo de aventuras tienen una característica, que unos llevan mejor que otros: tener que pasar muchas horas a bordo de un avión. 

Hay que gente que aprovecha los vuelos lejanos para ver películas, escuchar música o leer. Pero si existe una forma de que estos pasen lo más rápido posible, está claro, es durmiendo. ¿Quieres saber cómo poder hacerlo como Dios manda? Pues aquí te dejamos 5 consejos que tienes que tener en cuenta para dormir mejor en un viaje largo.  

Elige el mejor asiento

Uno de los trucos para dormir mejor en un avión durante un viaje largo consiste en seleccionar lo mejor posible el asiento que vas a ocupar. ¿Y cuál viene mejor para echarte un sueñecito? Pues eso depende de ti. Si eres de las personas con facilidad para dormir y relejarte, lo mejor es el lado de la ventana, más tranquilo por lo general.

En cambio, si eres de esas personas que no paran quitar, te recomendamos el que dé al pasillo, para así poder estirar mejor las piernas y moverte con mayor libertad durante el trayecto. 

Adapta tu sueño

La mejor manera de dormir en un avión, por lo general, es viajando de noche, si bien es algo que también depende de los cronotipos de cada persona. Un buen consejo en este sentido pasa por dormir poco (o nada, eso ya depende de ti) la noche antes del viaje, para que así te sea más sencillo conciliar el sueño durante el mismo.

Eso sí, ten en cuenta que las horas varían una vez llegado al destino. Algo que igualmente conviene tener presente si quieres escapar de los molestos jet lags. 

Vigila las posturas

La falta de movimiento durante los vuelos prolongados puede provocar rigidez y malestar, algo que a veces impide dormir a mucha gente. Para solucionarlo, opta por levantarte, estirarte y dar un breve paseo por el pasillo de vez en cuando. 

Realizar algunos estiramientos simples en tu asiento también puede ser beneficioso. Gira los tobillos, estira las piernas y flexiona los dedos de los pies para mantener la flexibilidad y reducir la sensación de entumecimiento.

Cuidado con lo que tomas

Todo el mundo sabe que la cafeína, presente en el café y algunos refrescos, puede ser una gran enemiga del sueño. Si lo que buscas es precisamente el efecto contrario, procura evitar esta sustancia. Pero no te confíes pensando que si bebes algo con alcohol vas a dormir mejor. Haría falta bastante cantidad, y puede ser peor el remedio que la enfermedad.

Además, los sueños alcohólicos, por así llamarlos, suelen ser inquietos, y un avión no es el mejor sitio para sufrir uno de ellos. 

Ropa y accesorios

No vamos a decirte que viajes a Tailandia, Japón o Estados Unidos en pijama, porque sería un poco extraño, pero no está de más que durante estos viajes largos utilices ropa lo más cómoda posible, para así poder dormir más confortable en caso de desearlo.

Igualmente, llévate cojín cervical, tapones para los oídos o incluso un antifaz si consideras que vas a poder necesitarlos. 

Siguiendo estos consejos, aprovecharás el viaje largo para descansar y, sobre todo, lograras que el tiempo pase más deprisa. Porque al final, todos queremos llegar lo antes posible.