Se hace viral un cuadro de hace 361 años con un niño vistiendo zapatillas Nike, logo incluido
No lleva ropa adecuada para practicar deporte, pero este niño inmortalizado en un cuadro del siglo XVII, parece haber viajado en el tiempo para hacerse con unas zapatillas deportivas modernas.
El cuadro Retrato de un niño fue pintado por Ferdinand Bol en 1642, hace 361 años. Pero se ha hecho viral porque este niño, de hace cuatro siglos, parece vestir unas zapatillas Nike, logotipo incluido.
Muchos cuadros son tan realistas, que parecen fotografías del pasado. Y esas "fotografías" de hace siglos nos asombran cuando muestran móviles, tablets, o como este caso, unas modernas zapatillas deportivas de Nike. Para muchos, seguramente en tono de broma, es una "demostración" de los viajes en el tiempo.
El cuadro fue pintado por el pintor neerlandés Ferdinand Bol, en 1652. Ferdinand Bol era un discípulo aventajado de Rembrandt, y durante siglos algunos de sus cuadros se atribuyeron erróneamente al famoso pintor. El cuadro es de gran calidad, pero se ha hecho viral por las zapatillas Nike que luce el niño:
Al principio se creía que el niño era su propio hijo, pero una investigación posterior determinó que era Frederick Sluysken, el hijo de un importante comerciante de vinos holandés.
Aunque los tacones las asemejan a unas botas de fútbol, los cordones y la parte trasera le dan ese aire de zapatillas Nike.
Unas deportivas Nike de hace 400 años
Pero lo más sorprendente, es que está reflejado el mismísimo logo de Nike. Una asombrosa casualidad que ha dado que hablar.
Los expertos no saben qué es. Quizá una marca, o algún símbolo oculto del pintor. En el otro zapato no la lleva, parece mostrar otro diseño diferente.
Nike se fundó en 1964, tres siglos después. Pero si hubiese diseñado un calzado para el siglo XVII, posiblemente se parecería mucho a lo que vemos en ese cuadro.
El cuadro se ha hecho tan famoso, que hasta la propia Galería Nacional de Londres presume de este divertido anacronismo:
Otros similares se han hecho famosos por mostrar móviles y tablets, que al final terminan siendo relicarios o pequeños libros.
El cuadro Retrato de un niño de Ferdinand Bol, pintado en 1652, inmortaliza a un joven con unas deportivas Nike, logo incluido. Un divertido anacronismo histórico, y un capricho del azar.
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