MSN Messenger: auge y declive del rey de la mensajería instantánea
MSN Messenger, la popular aplicación de mensajería instantánea de Microsoft, dominó el mercado durante años hasta que echó el cierre definitivo a finales de octubre de 2014, momento en el que fue sustituido por Skype. Si tú también lo has utilizado (¿quién no recuerda esos tiempos de iniciar sesión en Hotmail?) y nunca has llegado a entender qué fue lo que pasó para que dejase de ser el rey de la mensajería, presta atención porque vamos a hacer un repaso de su historia y a analizar su auge y declive.
El Messenger de Microsoft nació mucho antes de lo que crees: salió a la luz el 22 de julio del año 1999 como respuesta a AIM (America-OnLine Instant Messenger), el cliente de mensajería instantánea que la empresa de servicios de Internet americana AOL lanzó en mayo de 1997.
A mediados de la década de los 90, AOL se convirtió en el proveedor de acceso telefónico más grande de Estados Unidos. Todos los usuarios de la compañía pasaron a ser automáticamente usuarios de AIM, lo que permitió que el programa dominase el mercado en este país.
Además, también había otros actores que podían presumir de contar con millones de usuarios: ICQ, lanzado en 1996, fue el primer cliente de mensajería instantánea y AOL lo compró en 1998; y Yahoo! Messenger, que nació en 1998, también tenía una cuota de mercado importante.
MSN Messenger: las claves del éxito
Ante este panorama, Microsoft se encontraba frente al desafío de crear su propia aplicación de mensajería instantánea para no quedarse fuera del mercado. David Auerbach, un ex ingeniero de la compañía de Redmond que estuvo implicado en el proyecto de MSN Messenger, explica en un artículo sobre la guerra de chats el reto que supuso desarrollar el programa de escritorio: "Tuvimos que crear una interfaz de usuario elegante para que la gente pudiera ver a sus amigos cuando se conectaran, permitiéndoles cambiar el color de la fuente de una manera genial, y pronto. Es decir, teníamos que crear un programa que hiciera todo lo que otros programas de chat podían hacer, y luego añadir algunas características propias".
Integración con Hotmail
Para poder instalarse en el mercado con una cuota de usuarios elevada, Microsoft pidió a los ingenieros la integración del cliente de mensajería con Hotmail, el servicio de correo electrónico que la compañía de Redmond había adquirido en 1997 y que contaba con decenas de millones de usuarios. Gracias a esta integración, era posible utilizar la dirección de correo y la contraseña de Hotmail para acceder a MSN Messenger, una función que resultó ser una de las claves para que el programa acabase convirtiéndose en el rey de la mensajería.
Interoperabilidad con AIM
Otra característica que permitió a MSN Messenger posicionarse bien en el mercado fue la interoperabilidad. Tal como detalla Auerbach, uno de los problemas que Microsoft temía era que los usuarios no se unieran a su nuevo cliente de mensajeria, puesto que ya utilizaban otros programas de chat. Para superar este obstáculo, los ingenieros de la compañía descifraron el protocolo que utilizaba AIM para comunicarse con los servidores, conocido como OSCAR (Open System for CommunicAtion in Realtime) para permitir que los usuarios de MSN Messenger pudieran hablar con sus contactos de AIM.
Como era de esperar, a AOL no le gustó nada la interoperabilidad y bloqueó a MSN Messenger para que no se conectase a sus servidores, pero Microsoft no se dio por vencido y respondió a cada bloqueo con una nueva estrategia para acceder. Finalmente, AOL utilizó un agujero de seguridad en AIM para evitar que Messenger continuase conectándose, ya que podrían acusar a Redmond de aprovechar el fallo en su propio beneficio.
No obstante, aunque Microsoft tuvo que renunciar a la interoperabilidad, este movimiento le permitió adquirir decenas de millones de usuarios, por lo que la estrategia funcionó.
Integración con Windows
La integración con Windows, el sistema operativo de escritorio más usado del mundo, fue otra de las claves del éxito de MSN Messenger. Al principio venía como una opción de instalación de Windows ME, y más tarde se incluiría de serie en Windows XP.
De hecho, con el paso del tiempo el programa acabó llamándose Windows Messenger. Más tarde, a partir del 13 de diciembre de 2005, el servicio se integró como una más de las herramientas de Windows Live, y su nombre pasó a ser Windows Live Messenger.
Funcionalidades innovadoras
Aunque en su nacimiento se trataba de una aplicación muy sencilla que solo permitía enviar mensajes de texto plano y ver la lista de contactos, MSN Messenger rápidamente comenzó a integrar funcionalidades innovadoras para atrapar a los usuarios.
Por ejemplo, fue el primer cliente de mensajería instantánea de Estados Unidos en incluir emoticonos, que fueron añadidos en el 2000. En este mismo año se añadió la posibilidad de transferir archivos entre ordenadores y del PC al móvil, con capacidades de audio.
En 2001, Microsoft implementó grandes cambios en la interfaz de usuario y añadió soporte para las conversaciones de voz. Más adelante llegarían los emoticonos 3D, la posibilidad de enviar guiños e imágenes animadas, las llamadas de voz, las videollamadas, los zumbidos o los juegos integrados. En 2004 fue lanzado MSN Web Messenger, la versión web que podía ser utilizada con un navegador compatible.
El declive de Windows Messenger
De acuerdo con los datos ofrecidos por Microsoft, Windows Messenger alcanzó su mayor cuota de mercado en el año 2009, con más de 330 millones de usuarios activos en todo el mundo. Sin embargo, se avecinaban curvas y le quedaba muy poco tiempo de reinado en la mensajería instantánea: cuatro años más tarde sería sustituido por Skype en todo el globo (a excepción de China), y en 2014 cesaría el servicio.
La llegada de las redes sociales
Uno de los principales motivos que explican la caída de MSN Messenger es la llegada de las redes sociales y sus servicios de mensajería instantánea. Aunque Facebook se estrenó a nivel mundial en el 2005, tardó unos años en popularizarse, y su plataforma de mensajería, conocida inicialmente como Facebook Chat, no estuvo lista hasta 2008. Poco a poco, los usuarios empezaron a aterrizar en la red social y a utilizar su servicio de chat, dejando de lado el Messenger de Microsoft y otras plataformas tradicionales de mensajería.
El smartphone: la sentencia para MSN Messenger
Al auge de las redes sociales hay que sumar la popularización de los smartphones y sus aplicaciones de mensajería instantánea, como BlackBerry Messenger o WhatsApp, que empezaron a adquirir gran fuerza a partir del 2010 con el asentamiento del sistema operativo Android. Los usuarios ya no necesitaban conectarse a sus ordenadores para hablar con sus contactos, sino que podían hacerlo directamente desde su teléfono móvil, de forma inmediata, en cualquier lugar y, a diferencia de los SMS, sin ningún coste.
Pronto, la fiebre de WhatsApp se extendió por todo el mundo como un nuevo concepto de mensajería instantánea. El viejo MSN Messenger, que ya había sido abandonado por muchos usuarios, empezó a ser olvidado y el servicio de Microsoft no fue capaz de recuperar la cuota de mercado perdida.
El cierre de MSN Messenger
La espantada de usuarios de MSN Messenger se hizo más acusada a partir de 2012 - 2013: de acuerdo con los datos de ComScore, el servicio presentaba una caída del 48% anual y había perdido el liderato en favor de Yahoo! Messenger. Microsoft anunció a finales de 2012 que el 15 de marzo de 2013, salvo en China, el servicio sería sustituido por Skype, plataforma que la compañía había adquirido en 2011. Finalmente, el cierre definitivo se produjo el 31 de octubre de 2014.
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