Ese momento en el que te despiertas, con hambre, te diriges a la cocina y te preguntas qué vas a desayunar esa mañana. Abres el frigorífico, abres la despensa... sí, un tazón de leche con cereales. Nada más rico para empezar el día, y todo un clásico. Y vaya si hablamos de clásico.

Publican en la revista Nature que hace 5.500 años, los habitantes de las Hébridas Exteriores de Escocia comían unas gachas elaboradas mezclando leche con cereales, según sugieren las huellas de sus vasijas.

Y es que los primeros indicios de cultivo de cereales en Gran Bretaña se remontan a hace unos 6.000 años, pero se sabe poco sobre lo que se cultivaba o lo extendido que estaba. Esto no es muy diferente de lo que ahora tomamos cada día.

La cerámica de la época conserva evidencias de residuos lácteos característicos, por lo que los arqueólogos saben desde hace tiempo que la leche (o sus subproductos) eran una parte importante de la dieta en el Neolítico (Nueva Edad de Piedra).

Los historiadores sospechan que las pruebas del consumo de plantas han sido más difíciles de encontrar no porque no estuvieran en la dieta, sino porque los rastros son más difíciles de detectar después de todo este tiempo. Aquí tenéis otros buenos desayunos actuales.

Los 59 fragmentos de cerámica utilizados en el estudio proceden de crannogs, islas parcial o totalmente artificiales construidas en lagos y estuarios, y eventualmente recuperadas por las aguas.

La cerámica se ha datado entre 5.600 y 5.300 años atrás, en torno a la época de los crannogs más antiguos y unos siglos después de la llegada a Gran Bretaña de tecnologías neolíticas como la agricultura, la alfarería y la domesticación de animales.

Dieciséis de los fragmentos conservaban moléculas distintivas de cereales, acompañadas en ocho casos de grasa láctea. Otros llevaban moléculas vegetales de origen incierto; los autores proponen los frutos secos como posibilidad.

Los fragmentos se encontraron en el barro de los lagos, y probablemente cayeron allí poco tiempo después de su uso. El entorno con poco oxígeno contribuyó a la conservación de los residuos vegetales en sus superficies.

Algunos desayunos hacen que envejezcas más rápido, ¿cuáles debes evitar?

No hay forma de saber a qué hora del día consumían las gachas. Tal vez, al igual que los habitantes de los asilos dickensianos, los primeros habitantes de las Hébridas subsistían a base de gachas (gachas aguadas) mañana, tarde y noche.

También podemos imaginar que los constructores de crannog se adelantaron al Dr. Kellogg en los beneficios de un desayuno de leche y cereales, tal y como nosotros hacemos casi 6.000 años después. Parece que la tostada con aguacate es algo posterior.