El pasado 19 de abril, tres leopardos se fugaron del zoo Hangzhou Safari Park, situado a unos 15 kilómetros de la ciudad de Hangzhou, que tiene más de 10 millones de habitantes.

Durante la limpieza de sus jaulas, un grave descuido motivó que los tres leopardos escapasen. En lugar de avisar a las autoridades, lo que hubiese ocasionado el cierre del parque, los responsables decidieron ocultar la fuga hasta que pasase el puente de cinco días del Día del Trabajo, el 1 de mayo, en donde el zoo recibió 90.000 visitas. Visitas expuestas a un posible ataque de tres felinos hambrientos capaces de matar a una persona...

A los pocos días de la fuga comenzaron a circular noticias de avistamientos de felinos extrañamente grandes, pero el zoo negó que fueran suyos. Finalmente, tras una investigación los responsables del zoo decidieron confesar, y 15 días después de la fuga se inició la búsqueda de los depredadores africanos.

Al primero lo atraparon a las 48 horas, con un dardo tranquilizante.

El segundo animal no tuvo tanta suerte. Las autoridades soltaron perros de caza que terminaron matando al animal. Hay vídeos circulando por las redes sociales chinas que han causado una gran polémica, por el salvaje método de captura.

Para el tercer leopardo, las autoridades decidieron utilizar cebos combinados con tecnología punta: soltaron 100 gallinas por la zona para atraer al animal, colocaron rayos infrarrojos para detectar movimiento en las charcas de agua donde podría acudir a beber, y están rastreando la zona utilizando casi 1.000 drones, algunos de ellos dotados de cámaras de visión nocturna. Pero el leopardo aún no ha aparecido.

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Los tres felinos han sido criados en cautividad, así que no están acostumbrados a cazar. Si aún sigue vivo seguramente estará hambriento, lo que lo hace más peligroso. Los leopardos pueden caminar más de 15 kilómetros al día, así que podría estar lejos de la zona de búsqueda.

Mientras aparece el animal, cinco personas han sido detenidas por esconder la fuga, incluyendo el director del zoo, que ha sido relevado de su cargo.